Capítulo 4.

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Observamos como Jenna baila junto un chico, el ritmo es algo sensual y latino lo cual le queda bien a mi amiga.

Heather a mi lado tiene su teléfono en la mano, le doy una mirada y me doy cuenta que está en el perfil de su ex.

Bufo.

– Heather, ya basta. –ella me mira y frunce el ceño.– Estoy cansada de verte llorar por un tipo que ni siquiera te da la hora, estuvieron un tiempo juntos pero ya se acabó. Incluso cuando eran novios no te daba tu lugar, todo era más importante para él que tú, solo fuiste un juego y tu no mereces ser el juego de nadie, Heather.

Se queda callada, por lo que prosigo.

– Mira todo lo que has hecho, llevas dos meses tratando de superarlo y aún estás revisando sus cuentas, así nunca lo harás.

– Es dificil, Leah. –suspira – Lo veo todos los días en la escuela, lo veo ser feliz sin mi y me pregunto, ¿qué tengo de mal?

A nuestro lado, un chico alto y delgado se ríe. Ambas nos volteamos hacia él y este nos mira.

– Perdón por interrumpir y meter mis narices donde no me corresponde, pero me parece tonto ver llorar a una chica tan hermosa por alguien que seguramente es un imbecil. No te merece, vales mucho pelirroja.

Sus ojos verdes resplandecen con alegría, por lo cual noto que es su personalidad.

– Gracias. –responde Heather con una voz suave.

Las palabras del chico parecen calarle a mi amiga, porque borra a su ex y su nu a conquista de todas sus redes sociales y se dedica a ver la clase de Jenna.

El chico entrometido no deja de mirarme, así le devuelvo la mirada.

– ¿Qué?

– Eres hermosa.

Sonrío. – Ya lo sé.

Él parece que va a contestar pero Jenna y su compañero se acercan a nosotros, el chico gira los ojos cuando ve a mi acosador.

– Kylan, no comiences.

El pelinegro a mi lado alza las manos, una sonrisa divertida surca los labios.

– No he hecho nada, solo estoy hablándole a esta hermosa rubia a mi lado.

Jenna parece divertida, alza una ceja cuando Heather se une nuevamente al grupo y coloca un hombro sobre ella.

– Tu si que sabes mover el cuerpo, amor.–la pelirroja le dice a mi amiga, a lo que está asiente.

– Gracias, bebé.

Jenna le tira un beso a Heather, el susodicho "Kylan" las mira, en sus ojos brilla la perversión.

– Vaya, eso fue caliente.

– ¿Nos vamos? –pregunto, quería alejarme de este chico cuanto antes, no me agrada su actitud.

Mis amigas intercambian una mirada rápida conmigo y asienten.

Leah Meets WorldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora