SZIRATROV

Capítulo 1

              El viaje

_Tomé el mapa y lo abrí mientras me sentaba en el suelo del barco, la madera estaba fría por lo que me sobresalté un poco.

Crucé mis piernas y antes de mirar el papel en mis manos, eché un vistazo a mi alrededor; el cielo estaba despejado, haciendo una hermosa combinación con el mar.

-Oye, Bee, ¿tienes una navaja?- Erin se acercó a mí hasta quedarse a mi lado. Dejé el mapa y me levanté, limpiando mis vaqueros en el transcurso.

Erin: es el cliché del nerd en persona, sacado de los libros. Usaba lentes y era todo un cerebrito.

-Tengo una en la mochila, voy a traerla- me dirigí hacia la parte interna y caminé hacia mi bolso que yacía en mi camilla.

Saqué la navaja y, justo cuando me iba a voltear, Irene habló a mis espaldas.

-¿Prestas tus cosas sin saber para qué las usarán?- cuestionó a mis espaldas. Me volví hacia ella y decidí mirarla antes de responder. Era una chica muy bonita, la había conocido en un viaje hacia Maldivas. Ella me caía muy bien, pero siempre intentaba buscar el lado negativo de las cosas.

Irene: la que piensa que se acabará el mundo con solo pisar una piedra, una mujer que le preocupa mucho su físico y su belleza.

-¿Cuál es el problema?- pregunté caminando hacia la puerta.

Ella me dió su típica sonrisa tenue y me respondió: -Erin podría matarte con esa navaja.

Antes de abrir la puerta me volví hacia ella, la miré.

-O puede que te mate a ti- sonreí.

Salí y le pasé la navaja a Erin, quien la utilizó para cortar una cuerda en dos.

Casi todos molestaban a Erin por tener siempre la solución a todo.

-Todos acérquense- llamé a todos los tripulantes para contar nuevamente a cada uno.

-¿Vas a contarnos nuevamente?- preguntó Gate, el chico guapo.

Gate: un hombre muy apuesto, de hecho, también tenía su camisa llena de pines que había ganado en su vida de explorador. ¿Un problema? Era arrogante y machista.

-Así es, necesito que estén todos aquí- cada uno fue colocándose delante de mí

-No hay necesidad, estamos todos completos. No es como que yo haya lanzado a Blace al mar- sonrió Gate.

-Ya basta de bromas, Gate- reprendí echándole un vistazo a Blace, quien conducía el barco.

Blace: El capitán mudo, como todos lo llamaban, de hecho también era el hombre mayor de todos y había pasado muchas tormentas en el medio del mar.

-Irene, Celene, Gate, Eme, Blace, Rice, Sharon, Gabriel, Hemist, Ryan,Gary,Steffany, John, Mike, Brody, Malcom, Brittany, James, Xian, Zoe, Richard, Shian, y yo- cada uno levantó la mano cuando dije su nombre.

Tomé mis binoculares y miré hacia el frente.

-Llegaremos en unos diez minutos, la isla está en el oeste. Recojan sus cosas. Quiero a todos con sus radios- dije y fui a buscar mi mochila.

Regresé afuera y cada uno tenía sus cosas en sus manos, ya no había necesidad de usar los binoculares, la isla estaba demasiado cerca. Sonreí; otra aventura para mis recuerdos.

-No quiero que nadie se quede detrás y tampoco se dividan- todos asintieron.

***

Mis botas tocaron la arena, miré hacia los árboles. Una maravilla de lugar, definitivamente.