Búscame

Capítulo 11

Volví a leer el correo, una y otra vez, y ya iban unas 50 veces sin exagerar.

"¿Qué tal te va?"

No sabía si era esa puntería que tenía, pero Tyler siempre aparecía justo en el momento que no debía. Como en la fiesta de Nochevieja, o la fiesta que nos montamos Chaz y yo. Momentos en los que hubiese dado mucho porque él no apareciese.

Justo anoche me lo había pasado bien con Rob, y a la mañana siguiente me manda este mensaje Tyler.

¿Qué es lo que debía hacer exactamente? ¿Contestarle? ¿Ignorarle? ¿Contestarle fríamente?

Pensé, pensé y seguí pensando.

Aún me encontraba en la cama con el móvil en la mano, volviendo a leer ese pequeño correo.

Y tras mucho meditar, y varios rugidos de mi estómago, me dije a mí misma que tomaría la decisión tras desayunar un bollo de chocolate. Por lo que bajé a la cocina y disfruté de mi amado chocolate.

—Ojalá me pudiese casar con un bollo de chocolate. Tú nunca me defraudas. —Le dije a mi bollo con la boca llena para luego tragar.

Cuando terminé aquella delicia volví a mirar el móvil y pensé que si no le contestaba podría pensar que era una cobarde, y eso sí que no.

"De: Julia Thompson

Para: Tyler Blue

 14 de Enero, 2014 08:27

 Genial, me encuentro realmente genial.

Julia."

Breve y sin dar una sola explicación, así fue mi contestación. Además, sin darle la oportunidad de contestar al no preguntarle que cómo se encontraba él.

No obstante, él contestó al segundo, lo cual me confirmó que estaba pendiente al correo por si le contestaba.

"De: Tyler Blue

Para: Julia Thompson

14 de Enero, 2014 08:31

Siento que me haya atrevido tarde en hablar contigo, pero tuve que esperar a que se me pasase el enfado por la bofetada.

Me alegro de que te marche todo bien. Pronto  iré a Bristol, ¿te gustaría que nos viésemos?

Me gustaría ver esos ojos de nuevo, pero esta vez sin enfado en ellos.

Tyler."

Volví a leer el mensaje, una y otra vez. ¿Qué tendría que contestarle? Me había pillado todo por sorpresa, y a decir verdad me moría por verlo. El enfado se esfumó hace días. Sin embargo, tenía la sensación de que verle sería algo malo y que tendríamos que ocultar. No obstante, ¿Qué malo tenía verse con un amigo? Quizás fuese porque en mí sabría que no podría controlarme, y si él intentaba algo conmigo volvería a caer.

Pensé en una respuesta hacia aquel correo, y decidí que por dejarle esperar no habría ningún mal. Así que dejé el teléfono sobre la mesita de noche y volví a la cama para continuar la lectura del libro de Tom.

La historia de la chica me conmovía, pesé a la multitud de problemas que se le presentaba no se daba por vencida y buscaba enamorar a aquel chico, el cual no se daba cuenta aún de todo lo que esta hacía.

El sonido de un trueno interrumpió mi lectura, sin darme cuenta de que era casi mediodía. Me había pasado las horas leyendo sin apenas sentirlo.

Actualicé el marca páginas y guardé el libro en uno de los cajones de la mesita de noche, cogí mi móvil y miré si había algún mensaje o alguna llamada, y caí en la cuenta de que aún no le había contestado a Tyler. Tras mucha meditación comencé a escribirlo...