Seis

356 22 3
                                    

Bruce me dio la evidencia de como traficaban los químicos, no sabía y no entendía que tenía que hacer. No sabía que dirigir una empresa internacional conllevaba tantos dolores de cabeza.

-Yo sé que deben odiarme por tenerlos aquí a esta hora

-Son solo las 9 Alaska -Dijo Zara tomando Red Bull-

-El último retiro de la bodega fue hace una semana -Dijo Jackson, que no dejaba de ver una pantalla-

-¿Cuál es el código de empleado?

-Es uno nuevo, mira la terminación -Dijo Zara-

-En unos segundos debe de aparecer la foto

Le di una mordida al pan. Y me puse a pensar que mi único círculo de confianza eran ellos, Zara y Jackson.

Apareció una foto mía en la pantalla, dejé caer mi pan al suelo.

-Mierda

Los otros dos estaban en la misma situación. Pensé más y me levanté de la mesa.

-Mierda mierda mierda -Comencé a caminar con las manos en la cabeza-

-¿Qué significa esto? -Dijo Jackson mirándome-

-El único que tenía acceso a esto era James

-¿Quién?

-Su ex -Susurró Zara-

-Él no sabía todo lo que se manejaba aquí

-Nunca se lo dijiste?

-Nunca

-Tuvo que haber un informante

-O una -Sugirió Zara-

-Natasha

-No entiendo que está pasando -Jackson se levantó- Y no estoy dispuesto a apoyar algo que no entiendo

Me miré con Zara, no tenía otra opción mas que armarme de valor y contarle todo.

--------------------------------------------------------------

Ya eran cerca de las 12 de la noche, estaba manejando la camioneta en completa soledad hacia mi casa, esperaba que James no estuviera ahí.
Una llamada que entró a mi celular me sacó de mis abrumadores pensamientos, era mi papá.

-Hola -Dije al contestar-
-Necesito que me expliques qué sucede, ahora
-¿Referente a qué?
Tenía la luz roja pero con precaución la pasé.
-James me llamó, dijo que te pusiste agresiva y le dislocaste el brazo
-Por Dios -Susurré y agarré el volante con fuerza- Él está mintiendo
-¿Como quieres que no le crea si te conozco Alaska?
Suspiré
-Él intentó abusar de mí, pero claro que no te lo dijo
-Deja de crear cuentos
-¡No estoy creando ningún maldito cuento!
Nos quedamos callados por un momento.
-Estaba teniendo un amorío con una maldita secretaria de Recursos Humanos. Y sabes que es lo peor? Está traficando con los químicos de la industria
-No lo puedo creer -Susurró-
-Pero vamos, dale la razón. Yo solo buscaba hacerte feliz a ti estando con él, pero ya. fue suficiente. Arreglaré este problema sola.

Colgué y aventé el teléfono al asiento, sin siquiera quererlo mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, pero no me iba a permitir ser débil. Llegué a mi casa y me di un baño caliente a pesar de la hora, estando ya con la pijama me tomé un té en la cocina y caminando por la casa me di cuenta de que había una nota en el gran comedor.

"Cuídate, lo vas a necesitar"
-James

La hice bola y la tiré por ahí, el pobre no tenía idea de lo que le esperaba.

—————————————————

Pasaron dos semanas y no había rastro de James, habíamos implementado más seguridad en todas las centrales de distribución y laboratorios. Natasha seguía asistiendo a trabajar, nunca me atreví a confrontarla respecto al tráfico de los químicos y mucho menos sobre lo de James, no podía hablar sin argumentos.
Me había comenzado a relacionar con más personas, tenía una nueva amiga llamada Elsa, trabajaba para el gobernador pero pasaba la gran parte de su tiempo administrando cosas en Ciudad Gótica. Zara era mi mano derecha, había dejado de ser mi secretaria y trabajaba junto con Jackson coordinando la mayoría de las actividades de la empresa.

-Hola -Dijo Zara entrando a mi oficina-
-Hola -La saludé mientras miraba documentación en la computadora- ¿Todo bien?
-Sí, te traje esto, son las renovaciones de contrato de algunos empleados; necesitamos tu firma
Vi el mundo de papeles que puso frente a mí, me quejé abiertamente y ella se rió.

-¿Sabemos algo de Natasha y su relación con el tráfico de las sustancias?
-No -Se acomodó su cabello pelirrojo- ¿Por qué no solo la despides y ya?
-Me vería mal -Suspiré- Pensaran que lo hago por James
Me dió una mirada de compasión. Vi sus manos y traía un sobre muy lindo.
-¿Que es eso?
-Claro, casi lo olvido -Lo puso en el escritorio- Es del Señor Wayne
Sonreí y agarré la carta.
-¿Ustedes se traen algo?
-¡Zara! -Reímos- No, claro que no. Nuestra relación es profesional
Me miró con cara de que no me creía.
-Es guapo -Dijo-
Miré por la ventana.
-¿Siempre está nublado en Ciudad Gótica?
-Que manera tan sutil de cambiar el tema

———————————————

-¿Ya cenaste? -Me preguntó Elsa desde su cocina-
Estaba en su Penthouse en el centro de la ciudad.
-Ya -Dije mirando la televisión-
Pasados unos minutos ella fue y se sentó en otro sillón, yo estaba acostada.
-¿Como va todo en la oficina?
-Bien -Suspiré y miré el techo-
Se me cerraban los ojos, ya eran cerca de las 12 de la noche, así que me despedí de ella y me fui a mi casa como de costumbre, era todo tan rutinario que me llegaba a aburrir. En casa me bañé y tomé un té mientras miraba la oscuridad del lago, me hacía sentirme relajada, cerca de la una de la mañana alguien tocó la puerta y yo seguía despierta, sin pensar fui y abrí pero no había nadie, extrañada miré hacia los lados y dándome por vencida vi el suelo, había un papel. Lo levanté.

Los Müller arderán

Rising From The Dark [Batman]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora