Rising From The Dark [Batman]

Diecisiete

-Entonces, eso fue todo? -Interrogó él.

Asentí con la cabeza.

-¿No recuerdas como llegaste aquí?

-No, me desmayé poco después de esto -Señalé mi torso.

-Bueno -Se levantó de la silla que estaba a mi lado- Hablamos con el doctor, ha sido una herida profunda pero no ha tocado ningún órgano vital, en un par de días estará bien

-Esos hijos de puta -Me quejé del dolor.

-Todos irán a donde pertenecen -Apretó mi hombro- Gracias por la declaración

-No es nada

Él me sonrió, hice lo mismo un poco forzada y después de eso, salió de esa habitación de hospital. Pensé en las palabras de James, ahora comprendía. Pasaron un par de horas, dormí, hablé con el doctor, hice llamadas. Un rato después, cuando estaba a punto de quedarme dormida la puerta se abrió.

-No esperaba verte por aquí -Fui sincera.

-Dios Alaska -Se acercó a mí- ¿Cómo te sientes?

-De la mierda -Reí- Pero sanaré rápido, solo un par de días

-¿Quien ha mandado eso? -Preguntó él señalando la mesa en la esquina de la habitación.

-No lo sé -Me acomodé en la cama- ¿Puedes pasarme la tarjeta?

Eran flores, bonitas rosas rojas. Él me hizo caso, pero antes de dármela la abrió por su cuenta.

-Xander Wilde -Leyó.

Me sorprendí, instintivamente estiré mi mano para quitarle la tarjeta.

-Dame eso Bruce, o me voy a levantar a quitártelo

Creí que me discutiría acerca de eso, pero solo estiró la tarjeta y me la dio.

-Te he traído hasta acá -Confesó- Vi todo, la discusión con Jerome, el golpe de Bogdan, la apuñalada de James

-¡¿Y por qué carajo no hiciste nada?!

-Me pediste que me mantuviera alejado

-¿Y eso implica el dejar que casi muriera ahí? ¡Pudiste haber acabado con todos ellos!

-Lo sé

-Que basura -Me quejé.

-Escúchame

Yo estaba dispuesta a hacerlo, pero la puerta de la habitación se abrió.

-Bruce, cariño. ¿Podemos irnos? La reservación es en media hora -Cuestionó una chica rubia de ojos azules.

Esto debe de ser una broma, pensé. No sabía que decir.

-¿Elsa? -Pregunté ingenua.

-Alaska, que sorpresa. Supe lo que pasó, está en todos los noticieros. Pero no creí que Bruce viniera a verte a ti, solo me dijo que se trataba de un socio -Justificó ella.

Bruce buscó contacto visual conmigo pero me limité a mirar al suelo. Ella era mi mejor amiga.

-Que sorpresa -Dije sarcastica.

-Entonces, mi amor, podemos irnos? -Insistió ella.

-Sí, claro cariño

-Adios Alaska, esperamos mucho que te recuperes -Dijo ella.

No pude mirarlos más, solo se fueron. Me sentía triste, decepcionada, no tenía manera de describirlo. Al bajar la mirada vi la tarjeta, la abrí.