No es para Eliza® || KNJ | KTH

Capítulo 13

- Error 10: Elegir el tipo de chico que debía conocer (parte 2) -

El almuerzo se sintió incómodo, papá miraba a Tae como si deseara acabar con su existencia o como mínimo parecía querer ignorar su presencia durante la comida, pero esa mirada me hacía sentir todavía más nerviosa porque, al igual que él, Nam parecía juzgarlo con la mirada y no era precisamente una mirada de alegría .

La tensión en el ambiente incluso se podía cortar con una tijera porque era evidente, la sentías con simplemente entrar al comedor, creo que incluso los perros la podían sentir porque no habían dejado de mirarnos desde que nos sentamos a comer. 

Para buena suerte, Tae no parecía sentirse nada intimidado por los ojos que lo observaban, pero si que su actitud era completamente diferente.

Hablaba con una elocuencia y propiedad que llego el punto en el que podía decir que parecía no ser el Tae Hyung de siempre, él demostraba ser una persona mucho más sabia que Nam, aunque yo bien sabía que era algo torpe para varios temas.

No lo negaré, me sentí impresionada y es que era un lado de él que no había conocido a pesar de que en la universidad éramos como uña y mugre y que los profesores lo miraban con más intensidad que mi papá y Nam, tal vez era porque la universidad era como nuestro hábitat, al que ya estábamos acostumbrados y mi hogar parecía el de personas muy rectas, frías y calculadoras (lo cual, por parte de mi papá no era del todo falso).

- cariño -llamó mamá a papá mientras dejaba el plato de ensalada en el centro de la mesa- ¿Cómo te fue hoy?

- bien -dijo papá centrando su mirada en mamá- hoy tuve que hacer una autopsia a un feto

- ¿Qué le pasó? -pregunté a mi papá con curiosidad

- mal formación de sus extremidades y su corazón era demasiado pequeño -dijo papá sirviéndose mucha ensalada del tazón, ensalada que Tae había preparado- fue un aborto natural

- bueno, debe haber sido una lástima si sus padres lo querían -dijo Nam y yo hice una mueca

No acostumbrábamos a hablar de temas de aborción porque mamá perdió a mi hermano y se había sentido terriblemente culpable por eso, aunque después se recuperó nunca más hablamos del tema, ambos se ponían bastante tristes al recordar el suceso y es que les había golpeado demasiado fuerte la pérdida de un hijo, todos sus planes se fueron por la borda.

- creo que se equivoca -dijo Tae- es una lástima sin importar si sus padres lo querían o no, el pobrecito no alcanzó a ver la luz del día

Nam y Tae se dirigieron miradas de duda, seguramente tenían extrema curiosidad por lo que el otro quería decir y la opinión que tenían sobre el tema y en busca de más información miré a papá quien peleaba con la carne en su plato

- tenía 7 meses de embarazo y la chica era joven -añadió mi padre y finalmente empezó a comer para después señalarme con su cabeza- de la edad de Liz

- creo que fue bueno en ese caso -soltó Nam y empezó a poner ensalada en su plato- hubiera arruinado la vida de ese pequeño ser 

- pero ¿y si vivía? -preguntó Tae entrecerrando sus ojos

- mejor lo abortaba

- para nada -refutó Tae-si llegó a los 7 meses estoy seguro de que ella lo adoraba, seguramente el haber perdido a su hijo le causó un grave daño psicológico a esa chica

- igual pudo suceder si lo tenía, imagine el cargo de consciencia de tener a un niño al que no puede darle un futuro -dijo Nam y miró disimuladamente a mi padre en busca de algún tipo de apoyo a su idea, pero papá comió otro pedazo de carne

- la verdad es que no me gusta hablar del tema -dijo papá y siguió comiendo, pero su ceño parecía haberse relajado- ni a mi esposa, pregúntenle a Elizabeth

Ambos ojos se centraron en mí y yo sentí mis manos sudar, tenía un debate mental entre seguir la idea de Nam para quizá seguir aún con mis patético intentos de gustar de él o de ser su alma gemela.

A pesar de que, me carcomía mi conciencia diciéndome que apoyara a Tae porque esa era la ideología que yo compartía.

Sentía que me encontraba entre la espada y la pared y creo que por la mirada de Tae pude deducir que él me incitaba a ser yo y no buscar ser un tipo ideal para alguien que a fin de cuentas no me veía del mismo modo en que yo lo hacía, los ojos de Tae en realidad parecían regañarme porque tenía la idea de que apoyaría a Nam.

Así que, por primera vez en mucho tiempo decidí no seguir la idea de mi corazón, decidí no encajar con su descripción para defender mi ideología y a eso no le di la importancia necesaria en aquel momento pero si que fue un cambio que debía tomar si quería dejar de sentirme tan exageradamente miserable y para al menos empezar a sentir que la única persona que podía manejar mi vida era realmente yo y no Nam.

- la verdad es que comparto la idea de Tae Hyung -dije mirándolos a ambos- la chica debió amar a su hijo y de no ser así, pudo dejarlo en un centro de adopción -me acomodé en mi asiento aún temblando- hay tantas parejas casadas que buscan por todos los métodos tener un hijo y otros que son capaces simplemente los descartan -añadí y un recuerdo bastante vago llegó a mi cabeza- de hecho existen varias organizaciones que ayudan a los niños en ese estado y les dan una familia adoptiva y todos ellos crecen sanos y cumplen sus sueño, papá dona a una de esas organizaciones de hecho -indiqué y papá me miró con una sonrisa de complicidad al igual que Tae, quien dio un mordisco victorioso a un tomate de su ensalada

Fue en ese momento que recordé que no siempre, los pensamientos de Nam eran realmente los míos, a pesar de que habían cosas en las que estaba completamente de acuerdo, siempre había una opinión suya de la que yo discrepaba, pero no me atrevía a hablar para no quedar mal con él (en serio que me estimaba muy poco como para poner sus pensamientos por sobre los míos).

Tal vez fue desde ese almuerzo que yo decidí darme tiempo para pensar bien en lo que yo creía y en lo que honestamente opinaba, también puedo decir que descubrí que mis padres notaban que concordaba con todas las ideas de Nam y eso me ayudó a llegar a la conclusión de que tal vez mi amor discreto (que más bien era un extraño tipo de obsesión) por él no había sido tan discreto como yo pensaba.

- vivimos en una época de descarte -añadió mi papá- los jóvenes prefieren votar y olvidar todo lo que les cause problemas, en lugar de aceptarlo y endulzar esos retos que al final de cuentas te hacen sentir orgulloso -dijo y suspiró- creo que si el aborto fuera legal muchas de las personas que conocemos no existirían, tu hermana por ejemplo -me miró papá

Aquello que había dicho papá me recordaba a una conversación que una vez tuve con Tae, él había pasado con las justas un examen y lo veía con una tranquilidad envidiable y como siempre, mi curiosidad no hizo que esperara y le pregunté "¿cómo puedes estar tan fresco cuando casi pasaste arañando? " se rio de mi pregunta y simplemente levantó los hombros "si sufriera por cada cosa mala que me pasa en la vida, viviría como un amargado Liz -me enseñó su lección- esto solo es una nota y una pequeña caída que al final me servirá para aprender, todo sucede por algo ¿no te parece? " me gustaba que hablara de ese modo, me inspiraba bastante y en realidad era gracias a él que ya no me sintiera tan presionada con la universidad ni con mi vida.

Nam asintió con la cabeza dando fin a su idea que por primera vez no fue apoyada por mi- si lo pensamos de ese modo es cierto -dijo

Esa pequeña plática había ayudado a que el ambiente se sintiera tranquilo, después de eso todo resultaba muchísimo más natural y papá y Nam dejaron de mirar extraño a Tae, quien seguía actuando como un chico muy educado y propio, pero para mi sorpresa ya sentía que mi amigo estaba ahí y no un robot.