Capítulo 34

54 11 2
                                    

- no hay nada que hablar Tae -me precipité a hablar y él suspiró

- dios, no finjas sorpresa –hizo una mueca y presionó suavemente mis manos- sabes lo que siento por ti –soltó y yo me sentí nerviosa

Lo había tenido presente, como algo que mi mamá y mis amigas me repetían constantemente " él te ve de una manera diferente " pero no pretendía creer que fuera cierto, no sabía como reaccionar y precisamente tampoco yo había tomado el tiempo para pensar como me sentía respecto a él.

- no puedes decirme eso –murmuré sintiendo algo atorarse en mi garganta

Él negó con su cabeza y acarició suavemente mi mejilla provocando que una corriente recorriera mi cuerpo- Elizabeth, escúchame por favor –no dije nada y él prosiguió- me gustas y mucho, he esperado por ti y no me importa seguir haciéndolo porque me encantas –dijo y empecé a sentir una caldera de emociones fusionarse en mi estómago- no sé qué sientas por mí, pero sé que sin importar lo que digas, si deseas corresponderme o no, voy a seguir junto a ti ¿entiendes? –negué y lo miré

- ¿por qué me dices esto Tae? –sus ojos y los míos chocaron

- estoy enamorado de ti Liz

- no sé qué decirte –dije y bajé la cabeza

Su mano seguía acariciando con suavidad mi mejilla, no sabía qué hacer, tampoco sabía que sentía hacia él, era mi mejor amigo, mi mayor confidente y había estado siempre que lo necesitaba, pero después de sus palabras sentía que necesitaba recoger cada uno de mis pasos a su lado para estar segura de que solo era un hermano para mí y no destrozarle el corazón así de fácil.

Aunque mis pensamientos eran bastante borrosos porque sentía como todo mi cuerpo se llenaba de sensaciones que nunca antes habían estados presentes.

- no tienes que responder ahora Liz –me dijo soltando mi mejilla- no estás obligada a hacerlo, solo –suspiró- tenía que decírtelo –dijo y yo lo miré

¿cómo miraba a Tae?

¿qué significaba para mí? 

Sabía que era importante, pero no sabía si mi corazón estaba dispuesto a darle paso, no estaba segura de algo así, en realidad no estaba segura de nada.

- no sé qué siento por ti –le dije y él tomó mi mano para acariciarme cuidadosamente, su tacto me estaba poniendo nerviosa

- entonces, dame la oportunidad de cautivarte –dijo y sentí mi corazón estrujarse- seré lo que quieras, el príncipe de tus sueños, lo que siempre hayas soñado, seré lo que necesitas, seré todo para ti –negué confundida

- ya eres todo eso para mí –dije sintiéndome perdida

Nada me impedía estar con Tae, pero algo llegó a mi mente y fue la idea de estar a su lado, la simple idea de aceptar sus sentimientos y luego la de negarlos, estaba confundida, no entendía si mi corazón se aceleraba porque temía terminar con nuestra amistad o porque estaba emocionada de aceptar, mi corazón era un desastre y mi mente estaba en las mismas e incluso peor.

- ¿entonces? ¿qué nos detiene? -se acercó un poco más a mi

- necesito tiempo Tae –lo miré- no sé cómo me siento –él asintió con su cabeza y se levantó del sofá

Me agradeció por todo, tomó a Yeontan y se fue.

Me sentí extrañada por su abrupta forma de irse, pero no reaccioné inmediatamente gracias a la duda que seguía en mi cabeza 

¿qué significaba Tae para mí? 

¿realmente me sentía capaz de amarlo de ese modo y no como a un amigo?

¿realmente yo lo veía de ese modo?

¿qué es el amor?

Me volví a preguntar después de varios años.

Amor es lo que sienten mamá y papá el uno por el otro.

Amor es el que sienten Nam Joon e Isabelle por su hija.

Amor es el que siente Tae por mí, pero ¿qué es el amor para mí?

La palabra amor me recordaba al día en el que llamé a Tae y nos desvelamos porque intentaba subir mis ánimos por un desamor, me recordaba a nosotros escuchando canciones de jazz en mi habitación, me recordaba a las miles de tazas de café que comprábamos en la universidad, me recordaba a la navidad en que vino a casa solo para regalarme una pulsera que había terminado de hacer, me recordaba a las miles de veces en que me ofreció su hombro para llorar y yo agradecí eso, me recordaba a su voz cantando aquella noche helada que no quería regresar a casa.

Tal vez el amor era algo que también sentí durante algún tiempo, sabía que mi corazón se sentía satisfecho incluso con un mensaje de él, entonces pensé que debía plantearme por última vez.

¿qué es el amor?

El diccionario lo describe como un sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear

Tae me alegraba, muchísimo

Mamá se sentó junto a mí y me miró curiosa- hijita, hola –saludó preocupada, saludé a mamá algo perdida y ella tomó mi mano- ¿estás bien? –preguntó y yo asentí- bueno entonces anda a cambiarte antes de que venga tu papá, porque te ve en pijama y ya sabes cómo se pone él –asentí y subí corriendo a mi habitación todavía con mi cabeza perdida

Ya tenía una respuesta que darle a Tae ¿no? todo lo contrario, estaba más confundida que cuando se marchó.

Me cambié rápido de ropa y bajé nuevamente, mamá estaba en la cocina preparando el almuerzo y yo me senté frente al mesón- Tae vino hace un rato –le dije

Me miró sorprendida- ¿y lo dejaste pasar?

- la lluvia estaba muy fuerte y estaba empapado y traía a Tannie –me excusé y ella negó con la cabeza- bebimos chocolate caliente y vimos películas

- Elizabeth ¿cómo te parece que meterlo a –la interrumpí

- se me declaró –dije y ella me miró sin extrañarse- mamá, Tae está enamorado de mí

Mamá asintió y se acercó a mí- ¿qué le dijiste? –preguntó

- que necesitaba pensarlo

- ya –la fulminé con la mirada y ella rio- mi niña, no sé qué esperas que te diga, él es un buen chico -suspiró e hizo una mueca- estoy molesta porque lo hayas dejado entrar cuando no había nadie, pero fuera de eso me agrada bastante –dijo y tomó mi mano- ¿sientes algo por él?

- creo que sí, pero no lo sé –ella rio a carcajadas y yo reí bajo

- eres una chica complicada –se burló de mí y la miré con una sonrisa- yo veo que te gusta bastante –me dijo y mi sonrisa pasó a ser sorpresa- tus ojitos se te iluminan cuando estás con ese chico, te ves feliz y relajada, lo tratas con más amor que a nadie, lo cuidas y cuando te peleas con él parece que quisieras hacer berrinche –bromeó y yo reí algo apenada- es importante para ti y creo que no tienes que responderle hoy, debe sentirse agobiado por la simple idea de que se le declaró a la chica que le gusta, espera a que empiece el semestre, incluso así tendrás más tiempo para analizarlo mejor

- y apenas falta una semana para que empiece el semestre –dije animada- es cierto, mamá gracias

- ¿entonces si te gusta? –preguntó riendo y yo asentí

- tengo muchas cosas que pensar todavía

No es para Eliza® || KNJ | KTHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora