Entre rejas (+18)

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            -Va a ser más pronto de lo que crees, Luhan.

El mensaje de Jongdae, cara a cara, hace que el chino se tense momentáneamente, más intenta ocultarlo para no verse débil. Por fin tiene las noticias que tanto ha buscado, gracias a la droga que Jongdae le ha entregado al topo. Las noticias, sin embargo, no son nada buenas.

-Especifica -Ordena con cierta impaciencia. No quiere hacerla ver, pero ahí está.

-Me ha dicho que ya lo tienen todo listo y actuaran en cualquier momento -Le relata -No sabe cuándo será, pero pueden ser horas o días. No le hecha más de dos días -Sigue, haciendo que Luhan frunza el ceño -Me ha dicho que son muchos y tienen todo bien planeado. Me ha mandado un consejo para ti.

-¿Qué consejo?

-Vigila tus espaldas. -Dice -Porque no será un ataque valiente. Van a por ti y quieren acabar contigo sea como sea. Usarán el método que mejor les convenga y no tienen límite. Con tal de fastidiar a Yixing, harán contigo cualquier cosa.

Quiere reír. Es divertido, en cierto punto, como los enemigos de su hermano lo odian tanto por motivos económicos. Yixing, en apenas unos años, ha robado muchos territorios gracias a su carisma y su fuerza. Los miembros de su mafia son muchos, y todos buenos. Si bien no puede controlarlos a todos, y siempre están los idiotas que, por chulos, duran poco, casi todos son gente valiosa. Además, la mentalidad de Yixing hace que todos los que lo conozcan, a pesar del miedo, lo adoren como si se tratara de un dios. Es por eso que Luhan nunca será capaz de alcanzar el ideal que es su hermano.

Pero por ese mismo ideal, muchos lo odian. Son muchas las personas que se han cambiado de mafia o han preferido prestar sus servicios a Yixing que a otras tantas. Su influencia, hasta hace unos años, era puramente china, más ahora se ha extendido a Corea del sur. Esa influencia coreana no ha gustado nada a las mafias de por aquí, de ahí que prácticamente los miembros de esas mafias se hayan unido contra él.

Si bien en la cárcel hay más miembros de la mafia de Yixing, no son verdaderamente importantes o conocidos. Luhan ha visto a Jackson, un experto ladrón cuyo nombre no es conocido, más sus robos lo son. También ha visto a viejos amigos de la infancia que se mantienen en perfil bajo, como Zhoumi. Ninguno de ellos es tan importante como él, El Ciervo.

-Gracias por la información, Jongdae -Le agradece. Él solo se encoje de hombros, quitándole importancia.

Da igual lo que intenten, Luhan se encargará de hacerle fama a su leyenda. Piensa demostrar que, más que el hermano de, es alguien que merece la fama que tiene. No por nada tiene más de cuarenta muertes que manchan sus pálidas manos.

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Pero Luhan no necesita esperar demasiado para que ataquen. Gracias a la advertencia de Jongdae, se ha estado manteniendo en alerta, y le ha servido para ver los movimientos sospechosos. Se ha estado manteniendo al lado de sus dos compañeros de celda que, aunque no hacen mucho y son bastante débiles, confía en ellos para avisarle si algo sucede y él no se da cuenta. Sí ve como se mantienen en alerta, aunque manteniendo un perfil bajo. Es mejor que nadie sospeche que saben del ataque.

Pero todo lo malo llega, y sucede por fin.

Aprovechando un momento donde los policías están ocupados en otras tareas, Luhan observa cómo, al moverse él, se mueven varios más. No han sido demasiado discretos, puesto que ve como Jackson se levanta para seguirles y Zhoumi le sigue. Que ellos dos se pongan en alerta hace que otros tantos chinos miembros de la mafia de Yixing se alcen también. Si algo le pasa a Luhan, ellos le protegerán.