Cruel Maldad © (+18)

Capitulo 8

Después de recuperar el aliento y respirar con normalidad o mejor dicho después de ver el cielo tocar las estrellas y volver de golpe a mi infierno, decido que es tiempo de irme así que me levanto y busco mi ropa ya que salió volando no se a donde, prenda que voy encontrando me voy colocando bajo la atenta mirada del demonio que reposa todavía en la cama deslumbrando me con el cuerpo que se carga el maldito demonio. Cuando voy a mis tacones decide hablar..

-¿Porque te vistes tan pronto?-me dice viendo como me coloco mis tacones.

-Porque ya es tiempo de irme no ves -contesto borde.

-Bueno yo quería repetir pero será para la próxima vez -si claro en tus sueños tal vez demonio

-No te niego que lo que hiciste me gusto -y veo como sonríe con arrogancia -Pero lastima porque ya no te volverás a comer esto, muchos quieren comerme pero pocos pueden tenerme. Señale mi cuerpo y veo como su sonrisa se borra.

¡JA! toma esto Demonio

-Eso lo veremos porque serás Mía las veces que quiera.

-Eso es lo que crees y ten claro que para mi solo fuiste una noche loca -vi la molestia en sus ojos con esa masacra cubriendo su rostro -Y no tengo ninguna necesidad de volvernos a encontrar -lo mire con superioridad y cerré la puerta tras de mi, me fui como la cabrona que soy.

Mentí porque después de lo que sentí con ese encuentro ¡Puf! claro que repito pero esta claro que no le iba a decir eso yo soy la cazadora no la presa y me lo comeré cuando yo quiera no cuando a el se le antoje, así que dejemos haber que es capas de hacer por volver a probar todo esto, porque ni el me conoce ni yo ah el así que dudo que lo vuelva haber a menos que quiera hacer negocios con el pero no seria por medio de mi por que todavía no me puedo dejar ver por lo que realmente soy.

Mayor mente los hombre son los que dejan a las mujeres luego de su encuentro sexual, dejan a la mujer sufriendo en la soledad de una habitación deseando pasar la noche junto a el abrazados toda la noche mientas el te hace cariñitos en la cabeza y te abraza como si tuviera miedo de perderte mientras tu tienes tu cabeza en su pecho hasta caer en los brazos de morfeo todo un cuento de hadas.

En algún tiempo de mi vida si estuve anhelando esos momentos con un hombre que me amara, tener un familia dormir todas la noches con el y sentir que era mi ancla para siempre estar firme, que estuviera con migo en las buenas en las malas y en la peores, que me rescatara del castillo donde me tenia prisionera el dragón malvado pero lastimosamente ese príncipe azul nunca llego y la princesas indefensa tuvo que ser su propia heroína y se convirtió en una Reina Malvada que no se deja pisotear por nada ni nadie que esa batalla la supero ahora es mas fuerte que nunca y dispuesta a luchar para ganar la guerra con ese dragón no va huir de el sino que darle su estocada final y así de una vez por todas tener su final feliz.

Pero no crean que un final feliz con un príncipe azul ¡No! para una Reina como yo lo soy, no a nacido el hombre que este dispuesto a quemarse en mi infierno y la sobreviva a el porque cunado eso pase estaría dispuesta a abrir mi corazón y permitirlo reinar con migo en el.

Mientras eso sucede seguiré con mi vida libertina y llena de morbo por el motivo que no creo en el amor cuando creí en el nunca llego y pues no me hace falta ahora y el amor que tengo en mi, mi familia y mis tres amigas incondicionales que desde el momento que nos conocimos nos identificamos todas y cada una de nosotras vivíamos un infierno pero fuimos mas inteligentes y en lugar de seguir sufriendo en el...

Convertimos el Infierno en nuestro hogar y ahora Reinamos en el y de ahí nadie nos quitara del Trono.

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Estoy llegando a la oficina para empezar mi jornada de trabajo lo primero que hago es revisar la agenda par empezar a confirmar las citas del estupendo y carismático jefe que tengo notase el sarcasmo. Ayer luego de salir de la habitación del demonio no encontré a mis amigas donde las deje antes de irme pues lo mas probable que tuvieron una loche loca como la mía pero bueno luego escuchare sus historias, así que decidí que era tiempo de ir a casa y bueno aquí me encuentro desvelada y en el trabajo de porquería que tengo aquí pero todo por una buena causa.

Milagrosamente hoy no me ah molestado el señor gruñón al parecer hoy anda de buen humor seguramente paso una buena noche como yo pero que pesadilla quien tenga que aguantar a ese hombre engreído y amargado aunque de cierta manera se parece al Señor A pero se que no pueden ser la misma persona son muy distintos y a la ves iguales.

Me encuentro en mi oficina concentrada terminando de hacer unos informes cuando tocan la puerta así que doy permiso que pasen, es Lesly quien viene con una ramo de rosas azules bellísimas me dice que son para mí y se marcha, me levanto de mi silla y le echo un vistazo y en medio encuentro una tarjeta tengo curiosidad de que dice así que la saco de su sobre, abro la tarjeta y leo:

Hecho de menos tus manos recorriendo mi cuerpo. Tu jugosa boca saciando mi sed. Tus dientes marcando mi piel. Tu cuerpo recibiendo todo el placer que puede ofrecer el mío.
Si por desearte locamente, sentir su cuerpo, tu sexo...
Me condenó al infierno estoy dispuesto a eso y mucho más por arder junto a ti.

Atte: Sr.A