Ya tengo tres días de haber renunciado a la empresa de Naim y no se nada de el desde que estuvimos explotando su oficina.
La verdad es que no extraño trabajar ahí pero algunas veces si me hace falta los berrinches que hacía Naim cuando no tenía algo que el necesitaba pero eso ya está atrás.
En cuanto a Frank ahorita estoy estoy yendo a encontrarme con el ya que hoy empeorar a trabajar con el.
La meta aparte de matar al padre claro está no está, también es quedarme con todo lo que le pertenece al maldito viejo pedofilo.
Cada centavo irá a mi nombre y todos los prostíbulos serán desmantelados y todas esas mujeres serán libres.
No puedo cambiar lo que han pasado en esos lugares pero si puedo conseguir que tengan una mejor vida y que puedan salir adelante y superar todo lo que han vivido ahí adentro.
Aparco en el edificio donde trabaja Frank, ellos aparte del tráfico de trata de blancas también son nuestros rivales en el lavado de dinero.
Y es ahí donde yo ayudaré a Frank en las cuentas, ya que soy hija excepcional en los números yo le encargaré de ello como ayudante de Frank.
El todavía no me lo ah dicho pero se que ese será mi trabajo y esos es lo que yo pretendo que sea por qué será más fácil de poder adueñarme de ello.
Llegó a recepción y me presento con la recepcionista para que me deje pasar a la oficial de Frank, me ve con ojos de superioridad maldita perra no sabes con quién te quieres meter.
-Buenos días que se le ofrece -dice la recepcionista.
-Buenos días, me puede decir cuál es la oficina de mi novio, bueno mejor en que planta está la oficina de el presidente -actuó como una mujer ingenua.
-Su novio? -me mira con burla -primero tengo que anunciarla por qué sin cita no puede pasa -maldita quien se ah creído.
Le digo mi nombre y llama para ver si seré recibida y por la cara que puso que hasta se le borro la sonrisa me temo que ya sabe quién soy, luego de colgar me ve a mi.
-Frank es mi novio y pronto esté será mi lugar de trabajo, claro está que no como recepcionista pero si como contadora -le sonrió con arrogancia.
Me indica que planta es y ya sabiendo mas o menos llamo al elevador luego de unos minutos el elevador se abre dejándome así poder pasar.
Más les vale no meterse conmigo por qué puedo lucir santa pero en realidad soy una maldita diabla.
Llegó al piso donde me indico la recepcionista y al llegar todo es lujo al igual que la empresa de Naim solo que aquí no tanto como la de Naim.
Ya Giss olvida ese nombre por qué ya no lo veras nunca mas, sigo caminando hasta llegar donde está otra recepcionista o secretaria.
-Buenos días señorita Gissella el señor la está esperando, venga conmigo -dice amable la chica.
-Buenos días y muchas gracias -digo siguiendo la hasta la oficina de Frank.
Abre la puerta de la oficina y me deja pasar primero y luego de eso sierra la puerta detrás de mí y se va dejando aquí dentro.
Veo a un hombre guapo con la camisa hasta los codos y muy concentrado en su ordenador, se ve atractivo y más joven.
-Buenos días -digo fingiendo felicidad.
-Buenos días -dice Frank dejando lo que hacía para verme a mi y sonreírme este hombre está lleno de vida que solo sonriendo vive -te vez hermosa -dice viendo me de arriba a bajo.
ESTÁS LEYENDO
Cruel Maldad © (+18)
Romance-¿Porque te vistes tan pronto?-me dice viendo como me coloco mis tacones. -Porque ya es tiempo de irme no ves -contesto borde. -Bueno yo quería repetir pero sera para la próxima vez -si claro en tus sueños. -No te niego que lo que hiciste me gusto...