Capitulo 25

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- Se me van a calmar todos - Antonio exclamó molesto, tomando a la niña desesperada de los brazos de su hijo. Estaba llorando muy fuerte - Fuera de aquí, y no vuelven hasta que se puedan comportar como adultos - todos salieron de la habitación mientras el abuelo arrullaba a la niña otra vez al sueño. Rebeka se levantó del suelo con dolor pero la adrenalina al máximo, y al llegar a la planta baja continúo peleando.

- Estás muy equivocado si piensas que te la puedes llevar así como así. Es mi hija, mía y solo mía, no tienes ningún derecho sobre ella.

- Aunque te gustaría, no la has hecho sola. Voy a hablar con un abogado y vamos a resolver esto por la via legal.

- Lo que menos te conviene es ir a un juzgado Ander - la chica lo miró con burla - Muy siglo xxi y todo lo que quieras, pero ningún juez se va a poner de tu lado.

- Qué estás diciendo Rebeka? Espero que no sea lo que me imagino - Omar se indignó.

- Pues sí, Cari - lo dijo con burla acercándose mucho a Ander - Ningún juez le va a dar lado a un par de Maricones

- Hija de puta - Ander se exaltó por el comentario tan lleno de odio e intolerancia que acababa de lanzar la chica, había sido la cereza del pastel. Oficialmente su paciencia y cordura se acababan de ir por el caño.

La tomó por el cuello y la acorraló contra la pared con violencia, haciendo que la chica se golpeara con la columna que estaba ahí, golpeándose la parte izquierda de la cara

- Ander! Déjala ahora mismo - su madre gritó horrorizada. El chico la soltó al darse cuenta de la acción que había llevado a cabo

- Anda, hijo de puta, menudo maricon que eres que le pegas a una mujer - aunque se sobaba su cuello con fuerza la chica lanzaba insultos para el rizado.

- Eres una puta drogadicta depresiva, eso tampoco le va a gustar a ningún juez - Ander dijo en voz baja. La paciencia de la ojiazul también llegó a su límite, y se acercó a él para darle un cabezazo que parecía haberle roto la nariz.

- Rebeka joder, eres una loca - Omar la tomó finalmente por la cintura, mientras que Azucena se colocaba enfrente de su hijo viendo su nariz con cuidado. No entendía en qué momento habían llegado a este grado de violencia, que sin duda no era bueno para nadie.

- Dios mío que les pasa, si ya no son adolescentes para resolverlo todo a golpes - continúo como si fueran sus alumnos de nuevo - Ninguno de los dos puede hacerse cargo de la niña si lo primero que piensan para resolver sus problemas son las cañas. Que no me creo su nivel de inmadurez. No es un perrito que se pueden llevar de un lado a otro. Es un ser humano, con sentimientos, lo que hagan ahora les va a afectar toda la vida, no la oyen? Llorando desesperada... Pobre cría, si le han tocado unos gilipollas por padres...

- No me puedes decir eso madre, estaría con ella de no ser por ésta - dijo señalando con desprecio a Rebeka

- Le vas hablando con respeto Ander, que es la madre de tu hija, y eso no lo puedes cambiar aunque quisieras - la pelinegra se asombró que la señora la defendiera, si siempre la ha odiado - Miren nada más a dónde han llegado - Rebeka miró a Ander que tenía la nariz sangrando y se sintió fatal, que clase de ejemplo le estaba dando a su hija? Se deslizó hasta caer sentada en el suelo frío con dolor y reflexionó.
Por su parte el rizado también vio a la chica, que tenía marcas de sus dedos en el cuello, no había medido su fuerza, y el golpe que se había dado en la columna se comenzaba a manifestar en forma de moretón en su mejilla. Se avergonzó inmediatamente, se había convertido en una bestia irreconocible, que le hizo daño a una mujer.

La habitación se quedó en silencio después de la llamada de atención de Azucena. Omar se acercó a Ander mientras que la señora iba por hielo para ponerle en la nariz. Rebeka observó todo desde su lugar en el suelo, hacia  años que este sentimiento no la atacaba, desde que había nacido su hija no sentía más ansiedad, pero en ese momento se dió cuenta de lo sola que realmente estaba. Nadie se preocupaba realmente por ella.

 Élite ANDER Y REBEKA FRIENDSHIPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora