capitulo 19: Luz

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Adara.

Desde esa noche que soñé suelo tener insomnio, nadie lo sabe... ni Drac, tengo miedo de que piensen que deben ponerme más protección y eso significa subir de piso... realmente no lo quiero, prefiero fingir.

Decido por primera vez luego de una semana ir a visitar a el Sr. Surrens, confío en él, seguro podrá ayudarme sin juzgar.

Al llegar tocó la puerta con precaución y luego de unos minutos esta se abre dejando a mi vista al hombre con su típico traje gris, luciendo elegante junto a esa sonrisa amable que siempre brindaba a cualquier interno.

— Srta. Spiel, ¿qué la trae por aquí? ¿Alguna incomodidad?.

Niego mirándolo—No exactamente doctor, pero es algo delicado...

—Tranquila entiendo, pasa y ponte cómoda, tomare tu expediente y podremos comenzar la sesión de hoy—anuncia dejándome pasar y él caminando hacia una parte de la habitación—.

Tomo lugar en uno de los sillones que la habitación brindaba para esperar a que Surrens este frente a mí.

—Bien Adara, cuéntame que revolotea por esa mente traviesa—Sonríe tomando asiento junto a un cuaderno en su mano—.

—tuve un sueño, pero no cualquiera... hable con mi propia voz, creo que las pastillas que estoy tomando no son las exactas—le digo con cautela.—

El hombre me miró con una cara extrañada y dijo—Es imposible, yo mismo te recete esas pastillas, ¿puedo verlas?.

Sonrío tomando del bolsillo de mi chaqueta el pequeño tarro con pastillas, se las tiendo y el las toma.

—No veo nada fuera de lo común Ada, hasta tiene mi firma y todo, las pastillas también tienen su marca...—observa el doctor para luego mirarme—No hay nada raro aquí...—

Miente.

No es momento Wiz, no te metas ahora.

Al menos me llamas por mi nombre.

—Adara...¿estas bien?—dice Surrens pasando su mano por delante de mis ojos haciendo que deje de escuchar a Wiz—.

Se lo que estás pensando, ni siquiera lo..

—Se llama Wiz, me lo dijo en el sueño, me mostró a Drac muerto...—Digo rapidamente y con algo de desesperación—.

Pero si eres bien idiota.

¡ya callate!

El doctor Surrens me mira con preocupación y comienza a anotar algo en su cuaderno, al notar eso niego rápidamente para que sin despedirme comience a correr fuera de su despacho. No me llevarán, no lo permitiré.

Mientras corría mire hacia atrás para asegurar que nadie me seguía pero al hacer esto choco contra alguien.

—Mierda Adara, ¿qué no ves por donde caminas?—Dice Lena tocando su cabeza —.

—Yo... lo siento, no quise... lo siento.

Ella niega y me mira—¿estas bien? Estas rara.

Niego rápidamente—No estoy bien, pero hablemos de otra cosa, no se... cuéntame de ti, algo, lo que sea.

Necesitaba calmarme rapido y perder de vista a Surrens.

Lena me mira confundida y toma mi mano para comenzar a caminar— mi vida no es interesante, todo siempre fue igual desde que mamá y papá murieron.—se encoge de hombros—Cuando Drac comenzó a tener episodios de estrés postraumático mi bipolaridad aumentó a tal grado de hacerlo constante.—

Haz cambiar a la ruleta rusa.

¿Porque ruleta rusa?

Porque nunca sabes que va a pasar una vez que comiences a jugar.

—Sonrio asintiendo y miro a Lena— Tus padres seguro se lo merecían.

Los ojos de Lena pasan a llenarse de furia y a continuación me empuja contra la pared.

Muy bien Ada, sigue así .

—¡No tienes derecho a opinar sobre la muerte de mis padres, maldita perra Esquizofrénica!—dice en un fuerte tono señalándome con su dedo indice—.

Comienzo a reír fuerte y sin poder evitarlo mi boca habla por si sola—Ay Lena... que temperamento, deberías dejar de consumir—le doy una sonrisa totalmente falsa—.

De pronto se escuchan voces al final del pasillo y Lena se queda estática—Alguien está en problemas...

—Callate Adara.

—Oh no cariño, soy Wiz, es un completo y total gusto, ahora si me permites nos vamos.

Sonrió victoriosa comenzando a caminar para donde es la habitación de Killian.

Adara Bonita, acabas de decir que te llamas Wiz... te lo dije, somos una y juntas somos totalmente imparables.

Al escuchar lo que dice me doy cuenta lo que acababa de hacer y me doy vuelta para volver pero ya estaba muy lejos.

¿Qué acabo de hacer? Lo siento Lena... Dios Lo lamento mucho.

Una lágrima resbala por mi mejilla y al llegar, toco la puerta de Killian el cual apenas abre me tiro a sus brazos.

—Soy un monstruo Kill—digo entre sollozos—

El sin pensarlo me rodea con sus brazos, abrazándome fuerte y niega—No linda, no eres un monstruo.

—No deberías amarme.

—Claro que debo amarte, eres la niña más hermosa y bondadosa de este mundo, mi pequeño Pilar,—Dice mi hermano acariciando mi espalda con un tono suave—.

—Pero ella me está controlando...—susurro con miedo entrando a la habitación aún abrazada a él —.

Asiente suavemente—Lo sé, muy pocas veces tu mirada no es la misma y me doy cuenta, porque te conozco, porque te amo y no dejaré de hacerlo solo porque ella te controle.

Suspiro mirándolo y observo un pequeño anillo de metal que se encontraba en su mesa de luz.

Al final de cuentas se que no estoy sola, kill siempre estará ahí, como lo prometimos desde pequeños. Porque el es mi luz, de esas que brilla con más fuerza cuando la Oscuridad cree ganar.

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En mi opinión este es un capítulo que deja bastante por hablar, wiz esta tomando el control y ya hace de las suyas con adara.

Espero que les haya gustado, no se olviden de votar y comentar.

Los quieroo.

psicosis del amor ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora