Una Esposa Para El Príncipe (Book#2).

Capítulo 07.

Luna de miel.

" Este el comienzo una larga vida juntos"

En el avión privado, Mia pudo estar mas tranquila acababa de llamar a su hija para saber como estada, después del atentado de Frank la tenia nerviosa, Matthew hablaba con el piloto.

-Disculpen la interrupción, Alteza tengo que decirle algo importante- dijo Román.

El piloto se retiro a la cabina para dejarlos hablar en privado.

-¿Qué paso? ¿Lo atraparon?

-Algo así, la policía lo persiguió hasta el acantilado hubo un enfrentamiento, Frank resulto muerto.

-¿Qué murió?- sorprendido con la noticia.

-Bueno aun no localizamos su cuerpo pero es lo mas seguro, ahora los guarda costa están en ese trabajo.

-Cuando lo encuentre, me informas.

-Lo haré, Alteza. Permiso- salio del avión.

Matthew regreso a la cabina donde estaba Mia sentada colocándose el cinturón de seguridad, se sentó a su lado.

-¿Desean algo de tomar?- les pregunto la azafata.

-No, gracias- respondió muy serio.

-¿Estas bien?- le pregunto Mia.- ¿se trata de Frank? ¿Cierto?

Matthew asintió aun serio.

-Román me acaba de informar que Frank murió por un enfrentamiento que tuvo con la policía.

-Por Dios- llevándose la mano a la boca sorprendida con la noticia- No se como Frank pudo llevar a esto, siento tanta pena por Denisse  y Francisco cuando se enteren.

-Frank estaba loco, creo que ahora vamos a estar mejor- abrazándola.

Horas después.

La noticia de la muerte de Frank, se regó por todos lados como la pólvora, hasta llego a los oídos de la princesa Helen.

-Así que murió- leyendo el periódico- Pobre sabrá Dios que le hizo Mia para que se volviera un demente.

-¿Crees que ella tuvo la culpa?- dijo su prima.

-Claro que si, esa Mia es una bruja no ves como tiene a Matt, totalmente embrujado. No me sorprendería si terminara como Frank.

-No digas eso ni en broma.

*

Mia se despertó se dio cuenta que aun estaban en el avión, llevaban casi 8 horas de vuelo.

-¿Dónde vamos?- le pregunto a su esposo, estaba sentado en la cama escribiendo en la laptop.

-Es una sorpresa- sonrío, apago la laptop se reunió con su esposa le dio un rico beso.

-Siento que vas a llevarme al otro lado del mundo- riéndose.

-Algo así, estoy seguro que te va a encantar- tocándole el cabello luego tocaron la puerta.

Matthew se levanto y abrió la puerta.

-Disculpe la interrupción, príncipe Matthew- dijo la azafata- el piloto ordena que tomen asiento y se pongan el cinturón de seguridad ya vamos aterrizar.

-Gracias- la chica le sonrío con timidez y se fue.

-De verdad tienes como una especie de imán para atraer a las mujeres.

-¿Por qué dices eso?- ambos se fueron a sus asientos.

-En la forma que la azafata te miraba y te sonreía en todo el vuelo.

-Estas celosa?- tratando de aguantar la risa.

-No- mintió cruzándose de brazos.

-Tonta, tu sabes que yo solo tengo ojos para ti, te amo no olvides- ayudándola a colocarse el cinturón de seguridad y luego a él.

-También te amo, pero que puedo decir mi esposo es bello, millonario y encantador ¿Qué mujer no le llamarías la atención? Hasta las ancianas te adoran.

Matthew se echo a reír.

-Lo único que me importa es que tú me ames- Mia apoyo su cabeza en su hombro.

-Siempre te amare, de eso no hay duda.

Por fin el avión aterrizo en algún lugar del mundo.

Cuando bajaron, había una limusina negra esperándolos.

-¿Dónde estamos? Aun no me ubico- mirando por la ventana.

-Te daré una pista, es un país famoso por sus góndolas- sabiendo que era una pista más que obvia.

-¿En serio? Estamos en Venecia, Italia- emocionada.

-Si- sonrío-  ¿te gusta pasaras tu luna de miel? Durante tres días.

-Claro que si- sonriendo- siempre había soñado... Espera ¿tres días?

-Si, después de Venecia te llevare a otros sitios,  Dubai, Grecia y Monaco.

-Casi me llevaras a recorrer el mundo.

-Desde luego, quiero que sea la mejor luna de miel, que tendrás en tu vida.

Matthew la llevo a lugares maravillosos y románticos, sin duda las dos semanas más excitante de su vida pero había llegado la hora de marcharse.

Estaban en Monaco, cuando Matthew recibió una llamada desde el palacio en Villa Hermosa.

-¿Qué sucedió?

-La prensa esta en el aeropuerto, esperando su regreso alteza. Quieren saber todo lo referente a la muerte de Frank- le dijo uno de sus jefes de seguridad.

-Me lo imaginaba, de todos modos no haré ningún comentario al respecto.

-Anoche fue el funeral, todo transcurrió con tranquilidad.

-Bien, aun así no quiero que despegan los ojos de mi hija.

-No se preocupe, Alteza. La infanta Julieta esta bajo estricta vigilancia.

- Bien, gracias.

Luego de colgar, entro a la habitación.

-A Julie le va a encantar los regalos que le compramos- metiendo la muñeca de porcelana con cuidado en la maleta.

-Seguro que si- abrazándola por la espalda y dándole un beso en el cuello- ¿la has pasado bien?

-Si, muchísimo. Deseo poder seguir viajando contigo pero ya quiero irme a casa.

-Yo igual, en ese momento me provoca besarte y hacerte...

-¡Basta!- apartándose de él pero riendo- no te cansas... Mejor vamos a empacar, pronto llegaran a buscar las maletas.

-Aguafiestas- riéndose también.

*

Denisse estaba en el cementerio aun llorando la perdida de su hijo, había sido un golpe muy duro para la familia.

-Aun no puedo creer lo que le paso a mi hijo que se volviera un monstruo aun no lo creo- secándose las lagrimas.

-Tranquila, mi amor. Al menos no podrá hacer mas daño, Frank estaba fuera de control y lo sabes- dijo Francisco con tristeza- es mejor irnos a casa no sigamos torturándonos- caminaron hacia su carro, sin saber que eran observados desde unos pocos metros.