Ahora mismo se encontraba un pequeño conejito hincado en el suelo mientras lloraba.- Ya no quiero, odio esto.- su garganta dolía a horrores y por igual su estómago. Hace un par de días habían empezado sus náuseas matutinas.
- Ya mocoso deja de llorar- dijo Jaebum sobando su espalda.
- T-todo es tu culpa- dijo entre sollozos.
- Si, si lo que digas.
- P-pero aún así quiero a tus minis tu- dijo limpiando sus lágrimas.
El mayor sólo volteó los ojos quien entendía al menor, ahora era más bipolar que nunca; por favor matenme, pensó Jaebum. Ya ni quería pensar en los meses restantes del embarazo y más si los síntomas se iban a multiplicar por dos.
Si, el pequeño conejito estaba esperando dos bebés o dos minis Jaebum como decía Youngjae.
El mayor ayudó a que se levantará su esposo, para después llevarlo al lavabo en donde lavo su boca y cara. Para después regresar de nuevo a la cama.
Jaebum se acostó a un lado del menor dándole pequeñas caricias en su pancita, pero Youngjae le apartó la mano para levantarse de la cama.
- ¿Adonde vas? Acuestate, no quiero que estés vomitando como la niña poseída en la película del exorcista.
- Voy a mi nido, quiero estar ahí y no me digas así maldito Alfa.- soltó un chillido bajo, ya que le seguía doliendo su garganta y estómago. - Ojalá fuéramos caballitos de mar, para que tu lleves a tus minis.- Dicho eso Youngjae salió del cuarto azotado la puerta, por su parte Jaebum dio un suspiro largo pasando su mano por su rostro.
- Uno... dos... tres.- Sonrió y la puerta fue abierta de nuevo.
- No vas a ir conmigo...- dijo el menor mientras asomaba su cabeza por la puerta.
- Ya voy.- dicho eso se levantó de la cama, para asi salir del cuarto e ir con su esposo al nido.
Era en ese momento en que Jaebum se preguntaba; ¿Por qué? El recordaba perfectamente que utilizó preservativos... Ahora, ya no creía en ese 99% de seguridad, ya que el 1% se había convertido en sus dos bebés.
🌸🌸🌸
Movió de un lado a otro su cuello, mientras sentía como tronaban sus huesos.
- Estas muy estresado estos días Jaebum.
Si fíjate que estamos cuidando a nuestro bello Omega que tiene a nuestros bebés.
- Bueno ya sabes, trabajo.
Tribiji- el lobo giro los ojos para después acostarse a dormir, no quería saber nada de ese Omega lobo.
Yoo sonrió para después acercarse a su pareja y así sentarse en sus piernas - Yo puedo quitarte ese estrés- dicho eso unió sus labios en un beso lento.
Im Jaebum no correspondió aquel beso, haciendo que Yoo se separará de el.
- ¿Que sucede?
- Tenemos que hablar d-
- ¿De que? De ese mocoso, yo no quiero hablar de ese maldito Omega.
- Lo embarace.
Yoo fruncio en ceño - ¿¡Que!? ¡Por que carajos! ¡Yo soy tu Omega! ¡A mi me estas cortejando!- Jaebum no contestó, sólo veía a su pareja caminar de un lado a otro en la habitación.- Tu me dijiste que sólo esperará un año y te divorciarias de el, para que te casaras conmigo.-
- Si, lo se...- froto su mano en su cuello- Fue un error, a mi Omega se le vin-
-¿Mi Omega? ¡Desde cuando lo llamas así!- gritó sumante enojado.- ¡Yo soy tu Omega! ¡El no lo es!-
Jaebum parpadeo varias veces; enserio, había llamo a si al mocoso... lo había proclamado suyo.
- Dices que fue un error, ¿No?- dijo aún enojado- Entonces, hay que hacer que lo pierda o has que lo aborte.-
Y aquello fue la gota que derramó el vaso.
Jaebum fruncio el ceño y su lobo que se había dormido despertó de inmediato poniéndose en modo de ataque; le querían hacer daño a su Omega y a sus cachorros, eso sobre su cadaver.
-¿¡Qué dijiste!?- soltó un gruñido que hizo que el Omega callera al suelo mientras temblaba. Jaebum se hacerco a grandes e imponentes pasos a Yoo para agarrarlo de su camisa.-¡Ni si te ocurra tocarle un pelo, por que te mato!- grito haciendo que el Omega chillara.- Por cierto, esto es mío.- y de un tirón le arrebató el collar de cortejo; que hace un año atrás le había dado. Solto a Yoo, el cual cayó de nuevo al piso para asi salir de aquella habitación de hotel.
Im se sentía enojado, muy enojado e inquieto, sus manos picaban y por alguna razon solo quería tocar a Youngjae; a su esposo y Omega.
🌸🌸🌸
El peli-azul se encontraba con su suegra y cuñado en la mesa del comedor, ya que la primera les estaba enseñando a cómo tejer.
Youngjae se encontraba prestando atención a todo lo que decía su suegra, ya que le quería hacer unas sabanitas a sus bebés. Mientras el estaba emocionado, la puerta de la casa fue abierta de un golpe, el menor fruncio el ceño y no le tomo importancia; era ese Alfa molesto el que decía ser su esposo o el que casi siempre le llamaba mocoso.
Jaebum visualizo a su esposo sentado en una de las sillas de la mesa, junto a su madre y hermano. Se acercó al menor y lo rodeó con sus manos para susurarle en el oído - Quiero hacerte el amor.- Youngjae se sonrojo al escuhar aquello. Y sin previo aviso volteó el rostro de su esposo para asi ofrecerle un beso en los labios; el beso no fue tierno y ni lento, el beso fue rudo y necesitado.
Tanto Jinyoung como su madre se sorprendieron al ver esa posesividad que tenía Jaebum hacia YoungJae.
El menor gimio en el beso y con sus manos empujo al mayor, y al estar separados pudo notar esos ojos azules que lo hipnotizaban cada vez que los veía.
-¿Qué sucede conti...?- sin poder terminar de hablar, las feromonas de su esposo lo golpearon, sintiendo de inmediato su lubricación empezar a mojar su pantalón.
Jinyoung se tapa su nariz de inmediato, apestaba a feromonas de su hermano y cuñado por toda el maldito comedor. - ¡Si te lo vas a coger llevatelo ya maldito lobo en celo!- gritó el hermano menor de Jaebum. La madre de los dos, sólo miraba a sus hijos sin comprender; dado que era beta no sentía las feromonas o los olores que estos desprendía.
El Alfa alzó de un sólo a su esposo haciendo que este enrollara sus piernas en su cadera, para así llevarlo a su habitación. El menor hizo un puchero al ser alzado de esa manera, el quería seguir aprendiendo a tejer para sus bebés; le hizo ojitos de conejito deprimido a su suegra como pidiéndole ayuda, pero esta solo soltó un awww que lindo, para después mover su mano en forma de despedida.
- Alfa- el nombrado hizo un sonido para que supiera que le estaba prestando atención.- ¿Que me vas a hacer?-
- Te derrumbare y te llevaré a lo más profundo- sonrió, para despues susurrar en el oido de su esposo- Enloquecazmos toda la noche, conejito.-
El Omega tembló al oir eso pero de igual manera se excito, sus ojos cambiaron a su descriptible color rubi.
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Sinvergüenza || 2Jae ||
Random"Un matrimonio arreglado entre un Alfa y un Omega, ¿Que podría salir mal?"