Sinvergüenza || 2Jae ||

Capitulo 17

El señor Im había citado a su hijo mayor a una comida para informarle acerca de algo de suma importancia, pero este ni sus luces daba. Miro al señor Wang y al hijo menor de este para decirle que su hijo ya venía. Se levantó y salió de aquel cuarto.

- Im Jaebum, ya me vas a oir-

- Ya estoy aqui, perdón.

El padre de Jaebum entre cerro sus ojos y para después soltar un suspiro, y asi entrar con su hijo en aquel cuarto.

Cuando Jaebum tan solo puso un pie en aquel cuarto su lobo despertó y hablo de inmediato. Omega, mi Omega, que bello. Jaebum se congeló por un momento al oir aquello, para después ver directamente a aquel chiquillo de cabellos oscuros que por igual manera lo veía.

Alfa, Alfa o dios que guapo, hagamos la follacion.Youngjae se atragantó al oir a su Omega y empezó a toser.

- ¿Estas bien?- pregunto el señor Wang a su hijo.

El menor solo asintió ante lo dicho.

Cuando todos se encontraban sentandos, el señor Im tocio llamando la atención de todos los presentes.

- Usted se estarán preguntando por que están aquí- se dirio a los dos menores, los cuales asintieron.- El señor Wang y yo hemos decidido que para el bienestar y el crecimiento de nuestras familias en todas las formas posibles nuestro hijos, ustedes, se tendrán que casar.

- ¿¡Que!? ¡Papá!- gritó Youngjae- Yo no me puedo casar.-

Jaebum escucho atento a lo que decía aquel Omega, para después hablar.- Yo también me opongo, padre, yo no pienso compartir mi vida con este Omega que es un mocoso aún.-

-¿Mocoso?- gruño Youngjae- ¡Yo no soy ningún mocoso!-

- Aja lo que digas niño.- dirigió de nuevo su vista a su padre ignorando por completo a un Omega que le gruñia. - Padre, enserio que me niego a este compromiso.-

Los dos mayores suspiraron, para después levantarse de sus asientos y mirar directamente a sus hijos. - Quieran o no se casarán- dijeron los dos- Dentro de una semana será el matrimonio.- dicho eso, salieron de aquella habitación dejando a sus dos hijos impactados por aquello.

- ¿Q- que? No... ¡Papá!- gritó el peli-negro menor.

Jaebum se recargo en su asiento, mientras daba una larga pero larga respiración para luego soltar todo el aire. Poso su vista en aquel mocoso, quien se mantenía con la vista gacha y con ligero puchero en los labios; una sonrisa se formó en sus labios, al recordar a alguien...

- ¿De que te ríes? Maldito perro.- dijo Youngjae mirandolo con el ceño fruncido.

Jaebum rio con cierto enojo al oir eso-¿Cómo me dijiste? Mocoso.-

- P-E-R-R-O- y al terminar de decir aquello sonrió.

- Oh tienes una boca tan socia.

-¿Que dijiste?- el menor fruncio el ceño.

- No lo oiste.- dijo con cierta burla-  dije que si ahora mismo fueras mi esposo te enseñaria a que esa boquita se ocupará de otra cosa y no de hablar mal de mi.- le miro de pies a cabeza para regalarle una gran sonrisa.

Si, enseñame todo papi. Youngjae abrió sus ojos como dos platos al comprender que quería hacerle ese Alfa que se había vuelto su prometido de uno día para otro. Trago saliva y negó varias veces seguidas; que le pasaba a ese perro y a su omega que caía encantado hacia el.

- Eres un maldito pervertido.- se levantó de su silla y camino hacían la salida del cuarto para irse de aquel lugar, pero antes de que llegará Jaebum lo jalo haciendo que se sentará en las piernas de este.- ¿Q-que haces?- el mayor llevo su nariz al cuello ajeno oliendo aquel aroma que desprendía el Omega.

- Tu hueles bien.- deslizó su nariz por el cuello ajeno, haciendo que Youngjae se encogiera en su lugar. - Y, ¿Sabrás bien?- soplo en el oído del menor haciendo que este diera un brinco y negara con los ojos cerrados.

- ¡No me casare con un pervertido!- le dio un fuerte codazo al Alfa el cual lo soltó de inmediato y este aprovecho para levantarse del regazo del Alfa - ¡No me vuelvas a tocar! ¡Maldito perro pervertido!- gruño al decir aquello.

Jaebum se sorprendió al ver que aquel mocoso todavía se reveló ante el, pero por igual se rio al notar cierto sonrojo en el menor y Youngjae al ver que sólo se burló el mayor de el, chillo para después salir a toda prisa de aquella habitación.

Esa boda sobre su cadáver se llevaría a cabo.

- Ese mocoso, creció bien.

Es lindo, muy lindo nuestro Omega. Dijo el lobo viviendo de un lado a otro su cola.

- No es nada lindo y no es mi Omega.- dijo levantándose de su asiento para ir también a detener esa loca idea de su padre.

El ya tenía a un Omega que había empezado a cortejar, pero porque sus manos picaban... al querer sentir de nuevo a aquel mocoso.

🌸🌸🌸

Un mes, casi dos, en donde la familia Im al igual que la Wang no sabía nada de Youngjae y de los cachorros.

Jaebum seguía sumido en una depresión, aún que ya había retomado algunos trabajos de la compañía al querer ocupar su cabeza en otra cosa, pero dicho trabajo lo hacía desde su casa al no querer salir a otro lado y ver a la gente .

- Hyung, no vas a cortar tu cabello- dijo un Jinyoung con diversión.

- Y tu no vas a dejar de fastidiarme, por que no vas con Tuan, de seguro el si te aguanta por que yo no.

- No quiero ahora, mi conejito oh- tapo de inmediato su boca y miro a su hermano mayor con cierto miedo.

Jaebum al oir conejito era como recibir un golpe realmente fuerte, su rostro se convirtió en una triste expresión, mientras cerraba los ojos para olvidar todo.

- Perdón, mejor si me voy...- dicho eso salió de la pequeña oficina que tenía su hermano en la casa.

- Youngjae... maldición ¿Dónde estás?- aquella pregunta se la había preguntado una y otra vez, desde el día que subo que su esposo se había ido. Pero tan solo no había recibido respuesta alguna.

Tecleo varias cosas en su computadora con rapidez; no era posible que nadie, pero absolutamente nadie, supiera el paradero de Youngjae, era como si la tierra se lo hubiera tragado sin dejar rastro alguno.

Jaebum necesitaba saber donde estaba y pedirle perdón de todas las formas posibles hasta que le perdonará.

También tenía que buscarlo de inmediato, el no quería estar alejado de el cuando sus hijos nacieran. Jaebum no quería que Youngjae estuviera sólo en ese momento.

Sonrió al obtener la direción de la nana de Youngjae, ella podría ayudarlo o eso esperaba... Aquella nana era la única esperanza, de que Jaebum encontrará a su esposo e hijos.

- Te encontraré conejito y nunca te dejaré ir de nuevo.