Los años pasan... y no nos podemos alejar de Derek Hale, espero que nuevamente se unan conmigo para vivir otra historia más con Derek, conociendo ya mi forma de narrar las historias medio que apegandome a los sucesos de la serie, pero implementando mis cambios con la intervención de la personaje, en este caso Leah, que vamos a notar mucho más diferente a Hely y Lux, capaz un poco más madura.
Sinopsis:
Cazamos a los que nos cazan. Ese es el lema de mi familia o convengamos lo que queda de ella, gran parte había muerto en Beacon Hills por no seguir el código que nos mantuvo vivos durante años.
Soy Livna Argent, la única que queda de mi familia, dado que nos propusimos algo que para mí ahora parece imposible o así lucía.
Las personas cazábamos son una peligrosa manada de alfas, dejan un rastro de sangre a donde sea que vayan y ya perdimos a todos los cazadores aliados, ya sea por muerte o miedo.
Ahora estoy yo sola, emprendiendo mi camino hacia Beacon Hills donde seré recibida por lo que queda de mi familia a trabajar como maestra de historia, mientras en la noche rastreo lo último de información que obtuve sobre los alfas y era que hace unos meses habían emprendido camino a el pueblo que había arrastrado a mi familia a su destrucción.
Lo que no contaba en esta misión era toparme con lo fraternal que eran los nuevo Argent con los hombres lobos, aunque siguiera el código a mi manera yo no iba a fraternizar de la misma forma, o eso era lo que yo creía hasta que lo vi.
Derek Hale, el nuevo alfa del pueblo y una de las razones por las que la manda de alfas se había trasladado. Aunque evite su mirada y luche con todas mis fuerzas no romper mis propias reglas, termine enamorándome de ese hombre de ojos verdes y mirada triste.