ᴍᴜʏ ᴅɪꜰᴇʀᴇɴᴛᴇꜱ ~ᴛʀᴜᴇᴘʟɪᴋ~

₂₁

Manuel
Sábado 16:30
Me dirigía hacia la dirección que me había mandado mateo, tenia planeado llegar aproximadamente a las 17:00 o cerca a el lugar del que le había hablado, llevaba comida y bebidas para una especie de merienda, y después quedarnos a ver el atardecer.
Estaba a una cuadra de distancia de mateo y lo pude ver jugando con sus dedos, mirando el piso y con su pie pateando una piedra, adorable.
Su apariencia era mejor a la que había tenido el ultimo tiempo en el colegio, tenia puesto un buzo blanco que le quedaba grande y unas bermudas de jean negro.
Cuando estaba a unos pasos de el se dio cuenta de mi presencia, levanto su cabeza y me dedico una sonrisa que me saco todo el estrés que tenia encima. Se paro y me dio un corto abrazo.

Mateo: hola- sonrió de costado

Manuel: hola- le devolví la sonrisa- vamos?

Mateo: vamos- dijo siguiendo mis pasos- a donde se supone que vamos? me vas a secuestrar- dijo bromeando mientras reía

Manuel: mmm hoy no, capaz otro día pinta- dije jodiendo

Seguimos el camino entre charlas extensas sobre sus sentimientos, me interese mucho al saber que estaba intentando cambiar y que se estaba sintiendo mucho mejor, me puso feliz saber eso.
Llegamos al lugar, era un edificio abandonado frente a una especie de laguna, adentro estaba oscuro pero eso no era importante ya que el plan era estar en la terraza.
Entramos y yo ya me sabia como dirigirme pero obviamente mateo no y la oscuridad no lo ayudaba.

Mateo: no veo una chota boludo- dijo mientras estiraba los brazos intentando no chocar con nada.

Manuel: veni- dije riendo mientras agarraba su mano.

Ese tacto fue tan calido, entrelazamos nuestros dedos y yo lo guíe por las escaleras aun con nuestras manos agarradas.
Una vez llegamos arriba y la claridad nos invadió mateo miro nuestras manos entrelazadas con una sonrisita que me causo mucha ternura, pero decidí soltar su mano y acomodar todo para sentarnos ahí. Mateo miraba todo con curiosidad y ese brillo en sus ojos, parecía un nene.

Mateo: alta paz esto, podemos escaparnos y ver los amanuceres- dijo riendo por la ultima palabra

Manuel: los que?- dije mirandolo con una sonrisa divertida y el ceño fruncido por no haber entendido lo ultimo.

Mateo: amanuceres en vez de amaneceres amanuceres, por manu de manuel, captas?, soy un capo inventando palabras- dijo riendo de forma divertida, contagiandomela.

Manuel: mm me parece interesante esa palabra, yo prefiero ver los ateordeceres- dije divertido mientras lo miraba

Mateo: como? ate que?- dijo confundido

Manuel: ateordeceres, no sos el único que sabe inventar palabritas- dije mientras le guiñaba el ojo.

Mateo: fa sos re copion wacho, amanuceres esta mejor.

Manuel: si vos decisss

Mateo: si, yo digo- dijo mientras me sacaba la lengua, tenia 5 años

Manuel: tenes 5 años

Mateo: de que te quejas wacho atrevido- dijo mientras me pegaba en el hombro

Manuel: bue que golpes wachin, queres que nos caguemos palo? te hago pollo- dije riendo

Mateo: soy mas fuerte que vos, vos no podes levantar una bolsa de papas, tarado- dijo haciendome fuck you y mirandome divertido.

Manuel: ah no?- dije mientras me paraba bajo la atenta mirada de mateo

Mateo: nop- dijo riendo y mirando para el otro lado

Tome a mateo por la cintura y lo cargue a mi hombro

Mateo: soltameee- dijo gritando y pateando el aire.

Manuel: pensé que las bolsas de papas eran mas livianas que vos pero parece que no- dije yendo de un lado a otro con el cargado en mi hombro.

omnisciente
La escena se había vuelto ternura en su máxima expresión, mateo reía debido a las cosquillas que le proporcionaba manuel, quien todavía no había bajado al morocho de su hombro. Mateo pataleando, riendo y suplicando para que lo baje de su hombro era simplemente adorable y manuel no borraba esa tonta sonrisa de su cara, sin dudas hace tiempo no la pasaba así con alguien.
Los jóvenes podían llegar a tratarse como amigos de hace años y a ninguno le iba a incomodar, era raro pero sentían esa confianza entre ellos aunque seria lógico que ni siquiera exista, la conexión que tenían ellos era especial, podían pasar horas y horas hablando con la mayor confianza del mundo o también podían mantener ese silencio cómodo y calido que no lograban mantener con los demás.

Después de estar unos minutos se sentaron dispuestos a seguir una charla, bromearon y comieron lo que manuel había traído, era un ambiente tan hermoso que aunque estén en el lugar mas horrible podían transformarlo en uno hermoso solo con la presencia de los dos, juntos.

Llegaba el atardecer, sin dudas lo mejor del día para ambos, ese amor por el cielo y los colores impredecibles que podía llegar a tener en esa hora era algo que a manuel y mateo les fascinaba, disfrutaban de verlo, era pura paz.
Se encontraban sentados uno al lado del otro, muy cerca, observando el cielo esconderse y las nubes tornandose entre naranjas y rosas, la laguna ahí le daba el toque. Manuel observo como mateo disfrutaba del paisaje, como cerraba y abría sus ojos con lentitud, esa imagen emanaba paz y sin dudas eso era de lo mas lindo para manuel. Observo sus manos tan cerca y la fugaz idea de entrelazarlas llego inmediatamente, lo dudo unos minutos. Finalmente acerco un poco mas su mano y acaricio suavemente, mateo observo la mano de manuel acariciando la suya y luego lo miro a el, le dedico una sonrisa y un asentimiento, como si pudiera leer la mente de el castaño y saber las dudas sobre si entrelazarlas o no.
Entrelazo sus manos y se dirigieron una sonrisa y luego dirigieron su vista a el paisaje. Pasaron el resto de los minutos en silencio, dirigiéndose miradas y sonrisas, observando sus manos y sintiendo esa paz y calor en el pecho, sin dudas era un recuerdo que iban a guardar con mucho amor.
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me sarpe un toque con las palabras, perdón sjfksn