30 NOCHES DE TERROR

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El mundo se llenó de pánico por unos misteriosos correos que estaban llegando atravez de internet a cada cuenta personal, los primeros correos comenzaron a llegar al Oriente del mundo, paises como, sur Corea, Irán, Iraq, Armenia, y Japón, en este último fue identificado como la hora cero, al parecer el correo llegó a una niña de tan solo trece años y esta murió de manera misteriosa al siguiente día, luego se extendió por todo  Japón, tanto los correos como los casos de las personas fallecidas, aumentaron cada día que pasaba, y de esta manera comenzaron a alcanzar los países cercanos. Hasta que se extendió a todo el mundo.

Los correos no pudieron ser rastreado, en ningún momento, y a pesar de que las defensas tecnológicas de cada país hicieron lo necesario ninguno pudo dar con el lugar de origen,  y mucho menos dar explicaciones de las maneras en las que más personas fallecían, algunas de las que recibían el correo morían en accidentes, infartos, nada fuera de lo común, parecía como si la muerte las avisara en que momento vendría por ellos, pero en otros casos la gente fallecía de la nada, y estos eran los casos más difíciles de asimilar, porque  sus caras reflejan demasiado terror en el momento de morir, y sucedía en el transcurso de la noche, desde niños hasta ancianos, de todas las edades, las muertes diarias superaban más de las doscientas personas, por ciudad y eso que varios casos se encubrian y se hacían pasar por enfermedades comunes, hace unos pocos meses, entre unos seis comenzaron a llegar a compañeros de la preparatoria, y día tras día nuestro salón comenzó a quedar muy vacío, poco tiempo después llegó a nuestra familia, para un diciembre el correo le llego a mi abuela y a un tio al mismo tiempo, fue algo aterrador toda la familia entro en pánico, y al día siguiente mientras se trasladaban mi abuela y mi tío a nuestra casa para refugiarse y esperar el siguiente dia pata poder burlar la muerte, pero en el trayecto un camión arrolló  en el transporte en que venían ellos dos, lo más curioso es que en el accidente ellos fueron los únicos en perder la vida, todos aprendimos a vivir con ese dolor y el mundo entero aprendió a vivir con esos correos misteriosos, pidiéndole a Dios cada día que ese correo  infernal nunca llegara a nosotros.

Pero por más plegarias que la familia levantó al cielo, hace tres horas recibí mi correo, no podía creerlo, trate de eliminarlo antes de leerlo,  pensé que si no podía leer podría escapar, atrasar la muerte o quizas no morir, no pude hacer nada, el contenido del correo era corto decía, PONTE EN PAZ CONTIGO MISMO, CON TU FAMILIA, CON DIOS, Y NO TRATES DE CORRER, NI DE ESCAPAR, NI DE ESCONDERTE DE MI, EN CUALQUIER LUGAR TE PUEDO ENCONTRAR, JUSTO AHORA TE OBSERVO MIENTRAS LEES ESTE CORREO. Y el titulo era aún más corto:  LLEGO TU HORA.