Capitulo 30

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Los sentidos de Jeon se encontraban perdidos, débiles, él se sentía débil, su cabeza dolía y sus ojos pesaban. Poco a poco con esa sensación de mareo abrió los ojos, estaba en un lugar totalmente desconocido.

Las paredes eran grises con humedad en ellas, todo parecía estar en mal estado, estaba en medio de la habitación. Trato de mover sus manos y pies, pero sintió una presión en ellos, los observo dándose cuenta que estaban amarrados a la silla. Suspiro y dejo caer su cabeza, estaba muy mal.

— Vaya, vaya, el gran Jeon despierta, no sabía que capturarte sería tan fácil. — Se escuchó una voz, JeongGuk trato de alzar su vista, pero no encontró nada, no había nadie en su campo de visión. — Déjame reírme, porque protegiste muy bien a tu familia, pero no te protegiste bien a ti. — Rió, y de repente esa risa se le hizo tan conocido. ¿Pero de donde? — Realmente tú familia no me importa, tú prometido es muy bonito, la niña más chica es demaciado tierna he inocente y la grande tiene más tú carácter. Déjame decirte que estoy orgullosa,   criaste a Lisa mejor de lo que esperé.

Los pasos se hicieron presentes en la habitación, cada vez más cerca, cada vez más fuertes, hasta que la chica de detuvo enfrente de él. Estaba totalmente vestida de negro,  junto con una máscara que tapaba solo su boca.

— ¿Qué clase de mentiras les dijiste? — se agachó para quedar en la vista de JeongGuk, quien tenía la cabeza gacha — ¿Cómo fue que Lisa llegó a tus manos? Dime, ¿Qué fue lo que le dijiste a tu querida madre?

Sonrió, Jeon solo movía su cabeza, se sentía muy drogado. La chica se levantó y agarró sus cabellos jalandolos hacia atrás.

— ¿QUÉ MIERDA LES DIJISTE? — Gritó enojada — ¿LES DIJISTE QUE TE LA ROBASTE? ¿TUVISTE EL CORAJE PARA DECIRLES QUE TE ROBASTE UNA NIÑA?

JeongGuk aún no podía abrir sus ojos perfectamente, todo era borroso y solo escuchabas eco a esas palabras.

— No... No se de qué hablas. — Susurro casi inaudible, pero la chica logró escucharlo.

Sonrió y luego soltó una risa fingida, soltó bruscamente los cabellos de JeongGuk, haciendo que su cabeza hiciera un movimiento brusco, sin decir nada coloco su cabeza sobre su propio hombro, descansando del movimiento.

— ¿No sabes de lo que habló? — Tomo asiento con una sonrisa siniestra, llena de maldad y rencor. — Déjame recordarte la memoria, JeongGukie.

Comenzó a jugar con un cuchillo que estaba cerca de ella, JeongGuk poco a poco comenzó a ver más claro, logrando distinguir de quién se trataba.

— MinHa. — Susurro. La chica lo miro unos segundos sin ninguna expresión y después sonrió.

— La misma, vamos a recordar tu pasado, JeongGuk. — Sonrió. — Lisa es mi hija, por lo tanto es secuestro.

JeongGuk negó varias veces, tratando de soltarse pero era imposible.

— No, no es secuestro, deja de decir estupideces. — Soltó con odio. Tenerla de nuevo frente a frente le hacía recordar tantas cosas y solo hacia que le diera dolor de cabeza.

— ¿Qué no lo es? Te llevaste a mi hija recién nacida de mis brazos, para mí eso es secuestro. — Dijo fingiendo inocencia, mientras que JeongGuk la miraba con asco en sus ojos.

— ¿Sabes cuanto tiempo llevas conmigo? — Pregunto con una sonrisa — Realmente me sorprende que tu cuerpo soporte tan bien las drogas, pensé que te mataría de una sobre dosis. Pero duermes mucho con esos tranquilizantes, así que los use a mi favor.

Estaba totalmente loca, siempre lo estuvo, siempre tuvo esa obsesión al dolor, a las drogas, al alcohol y a las fiestas con orgías.

— Llevas nada más y nada menos que un mes aquí, creo que el golpe fue el que te dejo inconscientemente. —  pareció pensarlo con falda inocencia, haciendo pucheros que solo le daban asco — No sabía que un golpe y drogas te dejarían inconscientemente un mes.

Rió, realmente parecía divertirse con toda esta situación. Qué para los de afuera era preocupante, ya que llevaban un mes sin saber nada de Jeon.

— Estás loca, MinHa. — Escupió JeongGuk.

— Ou, JeongGuk, me duelen tus palabras — Fingió tristeza — Bueno, para que veas que soy buena gente estuve observando cómo está tu familia, Taehyung está muy preocupado, va más veces a revición de lo que debería, Lisa está bastante mal y ChanMi llora siempre, tus hermanos te están buscando por cielo, mar y tierra, pero no en una bodega, error. — volvió a reír— Bueno, tu mamá también llora mucho, Dios, tu familia es tan dramática. — Bufo irritada — Y... ¿Quién me falta?. — Pareció pensarlo un poco, hasta que logro saber — Tus amigos también te están buscando. Déjame recordarte que basura de seguridad tienes.

JeongGuk solo podía escuchar lo que decía, tratando de no perder y control y que la loca le hiciera algo, tenía que regresar a salvo por su familia.

— No te preocupes por tu empresa, aunque tu papá está muy preocupado se está encargando. — Suspiró — En realidad te extrañe, al fin de cuentas eras mi mejor amigo, ¿Verdad? — No espero a tener respuesta del hombre y siguió Hablando — Oh, JeongGukie, ¿Sabías que vas a tener dos bebés en lugar de uno?

Sonrió feliz la chica, se levantó rápido de su asiento y fue corriendo por un sobre, que contenía los ultrasonidos y estudios de Taehyung. Se los mostró a JeongGuk, quien miro atentamente todo, viendo a sus dos pequeños hijos, y deseó que eso se lo hubiera dicho Taehyung, no esa loca.

— Sabía que te preocupas mucho por ellos entonces, tuve que investigarlos y infiltrarme para tenerte calmado. — Dejo los papeles en una mesita— Taehyung ya está en su quinto mes de embarazo, tal vez y puedas saber el sexo de los bebés.

JeongGuk miraba atentamente a MinHa, su bipolaridad siempre fue un problema, por eso mismo le quitó a Lisa cuando eran más jóvenes, estaba seguro que podía matarla como lo hizo su hermana. Cuando Jeon se llevó a Lisa fue pensando en que no quería que acaba como la hermana de esa loca, quien fue asesinada por ella misma.

— ¿Qué es lo que quieres de mí? — Susurro débil.

— Pues... No lo sé, estaba pensando en que podrías darme un buen sexo, pero después me dio asco, tal vez... Podrías ser mi amigo, te diré todo lo que me pasa y me darás una solución. — Sonrió satisfecha por su idea.

— ¿Y es necesario que me tengas amarrado? — movió de nuevo sus brazos.

— No lo es, pero se que eres más fuerte que yo, no me voy a arriesgar, ¿Además sabías que soy una asesina?

Joder, solo quería a Taehyung, acomodarlo entre sus brazos y darle mismos, sentir su olor y calor serca. Escuchar a sus hijas jugar y reír. Quería volver a casa.

We Want a Family, Dad » KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora