3. Sorry

652 33 1
                                    

Jueves 10 del 06 del 2021, 7:50.

Valencia.

NATALIA.

-Julia: Que alguien apague esa alarma por favor —dijo medio gritando—.

Solo sus gritos ya me habían despertado de mi querido sueño. Apagué la alarma del móvil y me levanté para ir al baño. Julia se volvió a dormir y Alba seguía dormida hecha una bolita. Sonreí al ver su postura y no pude evitar coger el móvil para hacerla una foto y guardármela para la prosperidad. Me metí en el baño para lavarme la cara y al salir choqué con Alba.

-Alba: Uy, perdón, que recién despierta no veo nada.
-Natalia: Deberías ir al oftalmólogo.
-Alba: ¿A ti no te pasa?
-Natalia: Sí —dije riendo—.
-Alba: Ay, entonces pa' que me lo dices.
-Natalia: Anda, arréglate que habíamos quedado con Joan abajo.
-Alba: Cuando se quite la torre que intercepta el paso...
-Natalia: A ver, que tampoco soy tan alta —dije apoyándome en su cabeza y riéndome—.

-Julia: Ay chicas, los tonteos para luego —dijo revolviéndose en las sábanas—.

La miramos, dejé la puerta libre para que entrase y mientras me fui vistiendo con mucha calma. Fui al baño porque me había olvidado el peine, abrí la puerta sin previo aviso y adivinad qué vi: a una Alba con un pantalón negro tipo chándal y solo un sujetador negro.

-Natalia: Uy, uy, uy, lo siento —dije saliendo y cerrando la puerta—.

Escuché su risa, era tan diferente a las demás...

-Alba: ¿Querías algo?
-Natalia: Ehm, sí, el peine.
-Alba: Toma —dijo abriendo la puerta y saliendo como estaba antes y con el peine—.

Inmediatamente me tapé los ojos.

-Alba: No hace falta que te los tapes, porque si entramos pues no sé qué vamos a hacer... —dijo riendo—.
-Natalia: Ya bueno...

Quité mis manos para poder ver, Alba estaba sonriendo y yo hice el mismo gesto.

-Alba: Toma.
-Natalia: Gracias, y ahora date prisa que llegaremos tarde.
-Alba: Tranqui que yo me visto en cero coma.
-Natalia: Eso espero...

Esperé en el balconcito que había en la habitación con vistas al maravilloso mar de Valencia y mientras pensé en todo lo relacionado con lo que había pasado en estos últimos días. El agobio dominó mi cuerpo y maldecí no tener un cigarro para evitar que fueses a más.

-Alba: ¿Un cigarrito? —dijo ofreciéndome la cajetilla—.
-Natalia: Buah, muchas gracias, se me acabó cuando iba al casting. Supongo que tendré que comprar para devolvértelos.
-Alba: No hace falta, ya me los devolverás. Todo a su tiempo.
-Natalia: ¿Desde cuándo fumas? —pregunté cogiendo un cigarro y encendiéndolo—.
-Alba: Lo típico, los amigos que te incitan a hacerlo, pero no fumo mucho, solo en ocasiones estresantes como ya te dije.
-Natalia: Ya, ya.
-Alba: ¿Y tú? —preguntó desde dentro—.
-Natalia: Más o menos igual que tú, los amigos —dije dando una calada—.
-Alba: Pues apágalo o escóndelo que hay que ir recepción.
-Natalia: ¿Ya estás lista? —dije dando una última calada y apagándolo—.
-Alba: Sí, ya te dije que soy rápida.

Salimos, cerramos la puerta y fuimos a recepción. Allí vimos a Joan y Miki, creo...

-Joan: Buenos días señoritas, ¿qué tal habéis dormido?
-Alba: Bien.
-Joan: Este es Miki —dijo presentándonoslo—.
-Miki: Hola, encantado.

Empiezo a Caer | ALBALIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora