L I M E R E N C E [ Choi Beomgyu]

025

—¿Desde cuándo están juntos?—

—Ya van a ser dos semanas Gyu— Soobin mordía un pedazo de hot dog mientras los demás miraban los fuegos artificiales.

—Soy el último en enterarme—

—Lo siento, pero le prometí no contarle a nadie—

Lo miré con seriedad, mientras en mi interior maldecía una y otra vez.
Yo quería ser quien tomara la mano de Micha, yo quería ser quien la hiciera reír.

—¿Ya no te gusta verdad?— preguntó el pelinegro.

—Nunca dije que dejó de gustarme.—

—Pues deberías, tienes novia Gyu...Te dejé libre el camino pero no lo aprovechaste—

El pelinegro tomó un sorbo de su soda y habló mientras observaba a Hyebin.

—Ella te aprecia bastante, y se ven muy bien juntos. No le rompas el corazón. Eres mi mejor amigo, y no quiero que peleemos por cosas innecesarias—

¿Quien eres tú, y que le hiciste a Soobin?
Estaba totalmente diferente. ¿El amor le hizo bien?

—Beomgyu-shi— dijo la chica con piel de porcelana. —Me gustas— sus mejillas se tornaron de un color rosado.

—Vaya...Hyebin, yo...—me tomó desprevenido.

—Si no te gusto está bien, solo te pido que salgamos a una cita. Por favor—

—Oh, bueno. Está bien pero no quisiera que lo malinterpretes—

Hyebin había sido muy amable conmigo cuando me brindó ayuda para poder inscribirme en aquella escuela. Era tan dulce y tierna.
Todos tenían razón al llamarla muñeca de porcelana. Era muy hermosa, e igual de frágil que una muñeca.

Nos citamos en una cafetería, esa tarde fue maravillosa. Pero tenía que ser claro, yo ya tenía en mente a alguien, y no iba a dar vuelta atrás.

—Gracias por aceptar— dijo mientras daba un sorbo a su capuchino.

—Fue para agradecer tu amabilidad, gracias por invitarme, pero debo ser sincero. Hyebin, lo siento pero...—

La chica empezó a hacer presión cerca a su corazón, su muy particular reloj no paraba de sonar. Su expresión era de dolor, y su respiración era brusca.

—Saca unas pastillas de mi bolso— dijo desesperada.

Abrí aquel bolso y encontré una tableta.

—¡Traigame agua por favor!—grité a la mesera de aquella cafetería. Todas las personas dentro del establecimiento voltearon a vernos.

El vaso con agua llegó rápido, Hye ingirió aquella pastilla y con un gran trago de agua la pasó.

Su mano seguía haciendo presión, su expresión de dolor poco a poco desaparecía y su respiración se estabilizaba. Yo miraba atónito a la linda chica. No entendía que había sucedido.

La saqué de aquel lugar para tomar aire fresco. Sus ojos lucían rojos, y cristalizados.
Nos sentamos en la parada de autobús más cercana.

—Hye Bin ¿Qué..qué fue..?— me vi interrumpido por su voz.

—Lo siento— dijo con lágrimas cayendo de sus ojos. —Estoy enferma Beomgyu— cubrió su hermoso rostro con sus dos manos. —Sé que moriré pronto, pero yo solo quería tener una vida normal. Quería hacer cosas que chicas de mi edad hacen—

Me tomó por sorpresa tal noticia, nunca me lo hubiera imaginado. Hye rompió en llanto, su nariz estaba muy roja y sus sollozos cada vez eran más fuertes.

—No llores más, por favor— me acerqué a ella y esta me abrazó. Sentí sus lágrimas caer sobre mi chaqueta. Aquella dulce chica sin querer me había mostrado ese lado que nadie conocía.—Cuenta conmigo Hye Bin—

Gracias por los 2k 🤧❤️