ᴇᴅᴜᴄᴀɴᴅᴏ ᴀʟ ᴘʀíɴᴄɪᴘᴇ ~ᴊɪᴋᴏᴏk~

ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 27

Camino de un lado a otro, buscando cordura. La llamada con el castaño lo tuvo entre irritado, enojado y completamente furioso ¿Como puede ser posible que pasara eso ya estando en un mundo tan desarrollado en tecnología? Era completamente estúpido. Luego de terminar la llamada con Jungkook el llamo a Eir, el cazador, confiaba que con sus sentidos agudos y con su amplia vocación de rastreador, podrían dar con la ubicación de el amigo de su omega, esta era su única y ultima opción para ayudar a Jungkook.

—  Rey Park, el señor Jen Eir ya llego– miro a el hombre que acababa de hablarle.

— Dile que pase- le ordeno.

El beta dio una reverencia para luego salir.

El tenia una idea en mente, no seria fácil pero valdría la pena intentarlo.

El alfa Eir entro a la sala seguido de su fiel ayudante, Henson, este ya no tenia marca alguna del combate que habían tenido antes con las omegas, al parecer ya sano.

—Rey Park – ambos hicieron una reverencia por respeto.

— Cazador Eir, solicito su ayuda en asuntos personales – fue directo al punto– necesito que rastreen una pista para encontrar a un omega que desapareció.

Los dos alfas lo miraron entre sorprendidos y algo confusos.

— ¿Acaso el príncipe Jeon desapareció?– exclamó sorprendido Eir.

— No, no es el, gracias a la diosa, es el amigo de mi omega, su nombre es Seokjin, espero contar con sus servicios.

Los dos hombres se miraron pero luego le asintieron e inclinaron en muestra de respeto.

— haremos lo que sea necesario Rey Park -

— Espero su ayuda – camino al otro lado de la habitación para tomar su saco, con el en manos, se lo puso y miro a Jen Eir – que esperamos.

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Jimin se encontraba en él automóvil junto con Eir y Henson, la tención se podia sentir en él aire.

Estaban de camino a el parque ecológico del que le hablo Jungkook. Jimin estaba muy nervioso, solo tenia la esperanza de que pudieran encontrar a el amigo de su omega.

— Ya llegamos señor Park – la voz de Mark lo saco de sus pensamientos.

Miro adelante y vio él portón de la entrada, ahí estaban Jungkook y sus amigos.

— Vamos Mark – ambos salieron del automóvil.

Él camino decidido, vio como Jungkook lo miraba y luego ponia una sonrisa en su rostro, algo dentro suyo se movia como loco ante él simple gesto de sonreir de Jungkook.

— ¡Jimin! – exclamo el castaño para luego ir a abrazarlo.

Jimin gustoso resivio en sus brazos a Jungkook, ambos se abrazaron por unos segundos y cuando se apartaron, se  miraron a los ojos, estaban apunto de fundirse en un beso pero la tos ahogada de Yoongi los interrumpió.

— No estamos para cariñitos Jeon – lo regaño.

Jungkook puso los ojos en blanco, su amigo era un agua fiestas.

— ¿Qué haces aqui Jimin? – le pregunto.

Jimin por su lado estaba mas absordo en sentir las caricias que Jungkook le daba en la espalda, era algo muy relajante.