One Shots Jori

Sin disfrazar la pasión

—¿No están emocionadas?— Cat exclamó con la tonta alegría que la caracteriza.

—Por supuesto que si— Vega le siguió el juego.

—No sean ridículas, es solo una fiesta.

—No seas amargada, Jade.

—Y ustedes bobas.

—No es cualquier fiesta.

—A ver, Cat según tu ¿cuál es la diferencia?

—Que habrá antifaces.

—Adiós perdedoras.

Me estaba cansando de la escuela, a cada rincón que iba se hablaba de esa tonta fiesta como si nunca antes hubieran asistido a una.

Caminé hacía mi casillero donde comencé a guardar mis libros de forma colérica, todos se encontraban entusiasmados por una tonta fiesta donde el plus sería usar antifaces, todo gracias a la nueva amiga de Tori de la cual no recuerdo su nombre.

—¿Qué te hizo tu casillero para que lo odies tanto?

—Cállate Beck— ni siquiera lo miré.

—¿Porqué estás molesta?

Su risilla de autosuficiencia me molestó aún más.

—Lárgate, Beck.

—¿Estas así por la fiesta?

—Ya deja de hablar sobre esa tonta fiesta.

—Si, es sobre la fiesta.

—Si, es sobre la maldita fiesta.

—Jade, deja que los estudiantes sean felices, además... Se que tu problema es Dayanna.

Alcé una ceja, ¿Quién era esa?... Ah, claro la tonta amiga de Vega.

—No— cerré de un golpe mi casillero— me da igual.

—No te agrada que haya entrado a nuestro grupo de amigos y tenga toda la atención, te conozco.

—Beck, Lárgate a acostarte con ella si eso quieres, déjame en paz.

—Ella se ganó el cariño de todos se merece toda esa atención.

—Bien, me largo— preferí hacer eso a seguir escuchándolo, se había vuelto insoportable desde hace unas semanas.

Preferi irme de una vez al salón, por lo menos ahí estaría sola, pero me equivoqué ahí estaba André.

—Hola, Jade— se estaba masajeando las sienes.

—¿Te duele la cabeza?

—Cat y Tori no dejaban de hablar de la fiesta, luego llegó esa chica amiga de Tori— sonreí, él tampoco mencionaba su nombre— y se volvieron insufribles.

—Te entiendo— me senté a su lado.

—Preferiría graparme las orejas a estarlas escuchando, me estresan.

—¿Y apenas te diste cuenta?

—Jade, esa chica se está robando a mi mejor amiga y la bondad de Cat.

—Oye— sujeté su brazo.

—Oigo.

—¿Y si arruinamos su fiesta?

—No lo lograríamos, trataste de arruinar la de Tori y fallaste, esa chica tiene a todos a sus pies.

—Tienes razón— no es fácil que me rinda pero mi cerebro estaba seco.