Atrapadas en el Armario.

5.3K 326 110
                                    

-Increíble - musité molesta -todos se han ido, y esta cosa no abre, es viernes, ¿sabes lo que eso significa?

-¿Qué?-respondió con indiferencia.

-Qué nos quedaremos aquí atrapadas todo el fin de semana, tú -la señalé - y yo.

-Ya cállate, deja de lloriquear.

Se levantó del piso y se dirigió a la puerta.

-Muévete no lo sabes hacer.

-Aggh- me quité.

-Debes empujar más fuerte - pronunció forcejeando la puerta.

-No veo que la puerta se abra mágicamente- me burlé.

-Como sea.

-¿No haras nada? ¿Solo te rendirás?- posé mis brazos a mis costados.

-Ya cállate Vega, me haces perder la poca paciencia que tengo.

-Jade, no lo entiendes, nos quedaremos aquí encerradas solo porque a ti te encanta traerme hasta aquí, solo porque no te gusta que nadie te vea llorando o haciendo berrinches, eres patética e inmadura - resoplé.

-Como sea.

Esto me estaba haciendo enloquecer estábamos encerradas en el armario del conserje, nadie nos encontraria, moriría de desesperación, hambre y pipí, así de joven, y nadie encontraria nuestros cuerpos hasta tres días después, cuando ya estuvieran putrefactos e irreconocibles.

-Tori, Tori, Tori- Gritó Jade.

-¿Qué? - contesté espantada.

-Deja de caminar, me estas mareando.

-Lo siento, pero no tengo nada mejor que hacer - me revolví el cabello.

-Puedes, sentarte, eso es mejor que hacer una zanja en el piso.

-Tal vez así pueda escapar de ti - le saqué la lengua.

-Creeme que es lo que más deseo.

Seguí caminando por un rato, mientras ella se encargaba de destrozar cosas con sus tijeras.

-Muy bien - se paro - ¿Qué te sucede? - tomó de mis hombros para detenerme.

-Yo... Yo... Nada - no quería que se burlara- ¿porqué me pasaría algo?

La verdad era que estaba cayendo en crisis, sentía que este era un espacio demasiado reducido y aunque podía estar un momento aquí adentro el imaginar que podía ser que pasaran horas antes de que pudiéramos salir me ponía muy nerviosa, y es que sinceramente tengo un pavor a los espacios cerrados y reducidos desde niña porque soy...

-Claustrofobica- solté al fin en un hilo de voz, comenzaba a sofocarme.

-¿Qué dices? - me miró atenta.

-Que... Que... Tengo pavor a estar en este lugar, aquí encerrada, sin ninguna ventana, ni espacio para respirar, Jade, se acaba el aire, me ahogo, moriré aquí - me agarré la cabeza.

-Tori, Tori... Shhhh... Ey cálmate - tomó mis manos - mírame, vamos a salir, tranquila- me miró a los ojos mientras sujetaba mis manos.

Comencé a sentir calma entre su mirada, algo extraño si teníamos en  cuenta que era Jade la persona que tenía enfrente.

-Vamos, respira - animó- hagámoslo juntas.

Comenzó a respirar profundo a lo que después de unos segundos le seguí, nuestras respiraciones se combinaban pero no era denso el ambiente sino reconfortante, después de unos minutos me tranquilicé y ella soltó delicadamente mis manos.

One Shots JoriDonde viven las historias. Descúbrelo ahora