Epílogo

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Luego de que Gia despertará las cosas cambiaron un poco para empezar.

Tristan y Gia decidieron comprar una casa a nombre de ambos en un lujoso condominio privado. Ahí en esa preciosa casa comenzaría su nueva vida. La casa era de dos plantas. Contaba con diez habitaciones con baños propios en el piso de arriba, y en el primer piso contaba con cuatro salas, un área de comedor, dos despachos, un cuarto de cine, un cuarto de juegos para adulto, la cocina, un cuarto de lavado, dos habitaciones, un baño, un garaje para cinco autos. En la parte de atrás una piscina y una caseta. La casa de ensueño.

Ian e Izzy también se fueron a vivir juntos a una casa exactamente igual, con la diferencia de que la de ellos no tenía piscina. También vivían en un condominio privado y lujoso. Ian compró la casa y como regalo la colocó a nombre de su novia.

West e Isobel también se fueron a vivir a un condominio privado y lujoso, la diferencia de esta casa era que en vez de tener diez habitaciones en el segundo piso tenía solo ocho. Y contaba con un solo despacho en el primer piso, y en vez de piscina tenia una hermosa vista natural.

Esto pasó en los dos últimos meses de embarazo de Gia, ella ya tenía nueve meses de embarazo y estaba pronta a dar a luz a su pequeño hijo.

El penthouse decidieron venderlo, era momento de que cada quien volara hacía un nido diferente.

Con la dedicación de West el edificio que será su bufete estaba listo y terminado. Constaba de un edificio de ocho pisos y en cada piso había oficinas de abogados, pero diferentes.

En el primer piso estaba la recepción por supuesto, y la cafetería, en el segundo piso estaban las oficinas de los abogados familiares, en el tercer piso estaban los abogadas de demandas, en el cuarto piso estaban los abogados de investigación, en el quinto piso estaban los abogados que se encargaba de los problemas de violencia, en el sexto piso estaban los abogados de trabajo, en el séptimo piso estaban los abogados del estado y en el último piso estaban las oficinas de los dueños y jefes. Gia, West e Izzy. Ellos se encargaban de cualquier caso, aparte de que ellos elegía que abogado tomaría X o Y caso. Aparte de que estaba la sala de juntas. En cada piso había dos baños, referente a cada sexo, incluso en el último piso, puesto que ellos tenían secretarias o asistentes personales y tenían un baño para ellas. Ya que ellos tenían baño personal.

Su apertura e inauguración sería en unas cuantas horas y Gia estaba preparándose, Tristan ya estaba listo y estaba sentado en la cama esperando que su futura esposa acabará. Pero a Gia se le estaba complicando por el gran vientre que tenía.

- ¿Me ayudas con los tacones? -mientras se giraba a ver al padre de su hijo, que la veía con una hermosa sonrisa.

- Por supuesto amor -respondió éste. Espero que Gia estuviera sentada en la cama para agacharse y colocarle lenta y delicadamente los tacones.

- Gracias mi amor -dijo ella para luego dejar un pequeño beso en sus labios.

- Eres sin duda la mujer más hermosa, te amo -dijo él mientras acariciaba su tan grande vientre.

- Yo también te amo -respondió ella.

***

Estaban todos en la sala de la recepción del edificio disfrutando de buena música, buena comida, buena vibra. Había periodistas de diferentes noticias, fotógrafos, paparazzis. Querían capturar cada momento de aquella celebración.

La noticia de que el magnate en los negocios Tristan Lombardi se casaba dio de que hablar por todo un mes completo. Muchas envidiaron a Gia, muchos lo envidiaron a él.

Y ahora la noticia de la inauguración de este bufete también dio de que hablar por este último mes. Muchos abogados recién nombrados y desempleados pidieron empleo en aquel lugar. Empleo que fue otorgado, claro no sin antes investigarlos. Querían estar seguros y confiados de sus trabajadores.

- Muchas gracias a todos por venir -dice West que estaba posicionado en el pequeño e improvisado escenario, con Gia e Izzy a cada lado. - Es un honor para nosotros, este siempre fue nuestro sueño. Crear un bufete bajo nuestro mando total, que sea nuestro. El bufete que heredare de mis padres, pasará a ser una sede de éste -Termina diciendo y todos aplauden. Los padres de ellos estaban muy orgullosos de los logros de sus hijos.

Cuando estaban bajando Gia se quedo parada un momento y todos pensaron que diría algo, más no fue así. Ella al sentir un fuerte dolor en el vientre, se inclino hacía el frente y soltó un grito de dolor.

West que en ese momento estaba más cerca que Tristan se acerco a ella.

- ¿Estas bien Gia? -preguntó claramente preocupado.

- Llegó la hora -susurro y cuando Tristan y su padre llegaron a ella lo dio. - El bebé va a nacer.

Terminó diciendo y luego de eso todos se pusieron en movimientos para rápidamente llegar a la clínica donde traería a su pequeño al mundo.

***

Doce horas en labor de parto y ya su pequeño hijo había nacido, estaban ambos felices abrazados, mientras veían con un inmenso amor a su hijo.

- Felicidades -se escuchó una voz desde la puerta, ellos levantaron la cabeza y vieron como entraron todos sus familiares.

- Es muy hermoso -dijo Rebeka cuando se acerco un poco a ver al bebé.

- Felicidades a los dos -dijo Terrance padre de Tristan.

Éste y su esposa estaban orgullosos de su hijo, orgullosos de ver en el gran hombre que se había convertido.

- ¿Cómo se llamará? -preguntó Ian mientras abrazaba por la espalda a su novia.

Ellos se vieron a los ojos y sonrieron para luego ver a sus familiares y contestar la pregunta. Anunciando así el nombre que ellos habían elegido para su hijo.

- Thiago Geraldo Lombardi Rinaldi.




La diré que aún no hemos llegado a su fin, faltan los extras. No me decidía si los haría pero mi gran socia Jisa Gabriela me ayudo y me motivo a que si hiciera extras.

Así que como regalo les daré cuatro extras que serán narrados por Tristan y Gia.

Amante Millonario (✔)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora