Capitulo 14

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-Pobre chica.

Adrien se recostó contra el marco de la puerta, le dio una mirada de soslayo a Marinette y luego observó como la camilla que pasaba a través del comedor. En cámara lenta, vio como una pequeña gota de sangre cayó directo hacia la alfombra.

Arrugó su nariz, iba a tener que limpiar eso más tarde.

-Supongo que nunca sabes las batallas de las personas que tienen en su interior.

Felix se acercó a ambos, con el ceño levemente fruncido. Parecía enfadado, como si algo realmente lo estuviera molestando.

Las personas de la secundaria no dejaban de cuchichear mirando hacia el cadáver siendo alzado a la camioneta.

-Wow, esas son realmente buenas condolencias-Le dijo Felix, con brusquedad.

Marinette se encogió de hombros.

-No te preocupes-Le dijo Adrien a su hermano, mientras se acercaba a Marinette. Clavó su vista en ella-A ella no le afecta, ni siquiera se siente triste.

La rodeó, Marinette lo siguió con una mirada penetrante. Apretó levemente sus labios pero luego soltó un leve suspiro.

Verónica se había suicidado, tirándose del segundo piso. La caída había sido mortal, sufrido un derrame cerebral a medida que perdía sangre. Su cuerpo fue hallado por una chica llamada Sabrina.

El césped verde ahora era rojo.

Hubieron pequeños sollozos a medida que la policía ordenó que todos desalojaran el lugar. La mayor atención policial se centró en el segundo piso, en donde se creía que Verónica había saltado.

La sorpresa de Marinette fue evidente cuando había decidido tomar una larga siesta, pero su habitación estaba cubierta con una cinta amarilla y habían tres personas uniformadas revisando su ventana.

Una de esas personas era Nathaniel. Se acercó hacia ella con paso firme y una expresión de sospecha.

-¿Mi habitación se convirtió en una escena del crimen?

Marinette sabía que esa no era la mejor manera de saludar, pero la idea de que habitación sea el centro de investigación de las personas no le agradaba ni un poco.

Nathaniel estrechó sus ojos, inclinando su cabeza un poco.

-¿Escena del crimen?-Repitió-¿Tienes razones para creer que es un crimen?

Marinette se cruzó de brazos.

-Nunca dije eso, solo quiero saber si debo dormir con una cinta amarilla alrededor de mi cama esta noche-Dijo, como si eso disminuyera el impacto de sus palabras-¿Sabía que hay menos dos piso más en esta casa con ventanas?

Nathaniel la miró por unos largos segundos, como si estuviera tratando de descifrar.

-Bueno si una chica se suicidó en mi habitación, lo último que diría sería quiero dormir-Nathaniel se encogió de hombros-Eso es frío.

Si había más espacio para joderlo todo aún más, Marinette se dio cuenta de que ella lo había llenado. Para su suerte, ella sabía arreglar ese tipo de cosas.

-¿No es lo mejor un poco de descanso luego de tanta tormenta?-Mordió su labio inferior, con una expresión de inocencia-Solo digo.

Nathaniel puso sus manos sobre su cinturón, prestando atención a cada detalle de Marinette.

-Esta bien, tienes un buen punto allí-Hizo una seña con su cabeza hacia atrás-Debo volver al trabajo. Adiós, Marinette.

-Adiós, oficial.

Los ojos de Adrien se llenaron de una capa cristalina mientras hablaba con un oficial de policía, diminutas gotas transparentes cayeron a través de sus mejillas.

Años de práctica y experiencia.

-Entonces ¿Dónde estaba cuando sucedió esto?-Dijo el hombre con sobrepeso, sosteniendo un bolígrafo y un bloc de hojas.

Adrien sorbió su nariz.

-Fui a buscar provisiones para la fiesta con una amiga-Limpió la comisura de sus ojos con su suéter-Oficial, me gustaría donar fondos para la familia de Verónica, o la persona que esté a cargo de ella.

El oficial asintió, anotando algunas cosas mientras miraba con aburrimiento hacia Adrien.

Adrien vio que su hermano estaba a punto de salir de la casa, apretó sus labios cuando recordó que no estaba solo. Sus lágrimas volvieron a aparecer.

-Disculpe, señor.

Adrien atravesó la puerta que daba al jardín poco iluminado, quería cortar la cabeza de su gemelo, quemarla y poner sus cenizas en una fogata.

-¿Qué demonios crees que estás haciendo?-Preguntó Adrien, cerrando la puerta con fuerza-Además de huir como siempre.

Felix pasó una mano por su cabello, tirando de sus mechones rebeldes hacia atrás. Miró a su gemelo con una furia palpitante.

-Se lo que estas pensando, idiota. No lo hice-Felix lo apuntó, con sus ojos encendidos como llamas-No sé qué mierda pasó.

Adrien explotó.

-¡Claramente algo pasó!

Felix si es que tenía paciencia, estaba perdiendo lo último que le quedaba al ser acusado de algo que aunque era difícil de creer, no había hecho.

-Bueno no fui yo, la dejé en mi habitación por un maldito segundo y cuando volví ya no estaba-Alzó un dedo apuntándolo-Si estás tratando de pasarme la culpa de tus desastre...

Fue interrumpido por una carcajada seca, lejos de ser divertida. Adrien lo miró con entretenimiento.

-Soy lo suficiente, como para arreglar mis desastres antes de incluso llamarlo de esa forma.

Adrien realmente no le importaba si su hermano había asesinado a alguien o no, pero odiaba el hecho de entrar en el ojo público por razones equivocadas.

Arreglar y limpiar la imagen que iban a tener desde ese momento le iba a tomar trabajo. Trabajo que no tenía ganas de hacer.

-Todos creen que se suicidó-Dijo Felix monótono-Nada más hay que mantenerlo de esa forma.

-¿Por qué estamos incluso pensando que no se suicidó?-Adrien tiró la comisura de sus labios hacia abajo-Yo estaba ocupado, tú también. Tal vez realmente estaba deprimida y estamos creando todo este drama en vano.

Felix rodó sus ojos, negando un poco.

-Esas cosas simplemente no suceden de esta forma-Murmuró, pasando la lengua por el interior de su mejilla-Soy más experto en mujeres que tú. Créeme, de lo único que hablaba era de las pruebas de modelaje que iba tener la semana que viene.

-¿Sabes que esto no se trata de ser experto en mujeres?-Adrien alzó sus hombros-Es decir, solamente ser experto en personas. Tal vez interpretaste las señales equivocadas.

Felix rodeó el cuerpo de su hermano, chocando levemente su hombro y haciendo una mueca de fastidio.

-¿Esta es tu forma de salir del armario?-Preguntó sarcástico-Porque no veo a que viene el tema.

Adrien rodó sus ojos, cruzándose de brazos.

-No dije eso, solamente creo que es estúpido catalogar a las personas por su género-Miró a su hermano con repulsión-Además, yo no soy quien habló de preferencias personales.

-¡Porque son dos cosas completamente distintas!-Exclamó Felix, tirando sus manos al aire-Lo que sea, me voy. Esta charla no tiene sentido.

Adrien no lo veía de esa forma, al menos él realmente no elegía el destino de las personas en base a su género, solamente porque eran... personas. Un rasgo más de su apatía por el mundo.

저주받은 쌍둥이  ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora