Una Navidad glacial
-¡Que bien que al final te quedes con nosotros las navidades! -exclamaba la señora Weasley-. Ya veras, te lo vas a pasar super bien.
Esa misma mañana había recibido una carta del poderosísimo director Albus Dumbledore obligándome amablemente que pasara las vacaciones en la Madriguera. Como lo veía, no era una petición que pudiera elegir rechazar.
-Estoy impaciente -dije serena, sería de mala educación que descubriera que ir allí no estaba en mis planes.
-Ginny cariño -la llamó su madre-. ¿Puedes enseñarle donde a Lily tu habitación?
Los ojos de pelirroja brillaron.
-Por supuesto -sonrió-. Ven Lily, es arriba.
La seguí por las escaleras hasta una pequeña habitación con dos camas, un armario y una ventana. No era demasiado, pero era agradable.
-No sabes lo que me gusta tenerte a ti como compañera de cuarto -me admitió la pelirroja estirándose en su cama-. Si hubiera que tener que aguantar a Flegggrrrr -le dio un escalofrío-. Iugh... No, mucho mejor que no.
-Parece que vuestra relación sigue igual de tensa que siempre -me apoye en la pared con los brazos cruzados.
-No lo sabes tu bien -asomó George la cabeza por la puerta.
-Yo creo que en realidad se odian en plan hermandad -apareció Fred por el otro lado-. Pronto estarán compartiendo hasta la ropa interior.
-¿QUE? -se alarmó Ginny-. Ni de broma. No la voy a considerar nunca a la francesita refinada una hermana -negó-. No señor, no, nunca.
-Mira que mona -dijo lleno de ternura Fred.
-Solo falta que lo confunda con Ron -juntó las manos George y se las llevó al pecho dramáticamente.
-No me habléis de ese idiota -refunfuñó Ginny-. Si no fuera que mamá dice que si que es mi hermano, yo misma lo negaría.
-¿Que ha hecho esta vez? -preguntó curioso Fred dejando un poco a parte la broma.
-¿Aún no os habéis enterado? -en la cara de la pelirroja, apareció una sonrisa maliciosa-. Que raro que Ro-Ro no haya ido contando por ahí nada de su nueva novia -hizo énfasis en esa última palabra.
Los dos hermanos se miraron entre si, y sonrieron con burla.
-¿Quien es la desafortunada? -preguntaron los dos a la vez como si fueran angelitos.
-Lavender Brown -contestó la otra como si nada.
Fred metió una mano en el bolsillo de su pantalón y le lanzó un caramelo a su hermana que lo atrapo en el aire.
-Un placer hacer negocios con usted -dijo haciendo una extraña reverencia.
El fue el primero en irse, mientras que George quedaba mirando extraño la dirección por la que había desaparecido su hermano. Giró el rostro hacia mi con el ceño fruncido, y cuando se dio cuenta de que lo estaba mirando, relajó la cara y se metió la mano en el bolsillo.
-No te pongas celosa -me tiró un caramelo-. Sabes que cuando quieras tienes caramelos.
Y después de eso, el otro hermano se fue un poco tenso detrás de Fred.
-¿Te has peleado con ellos? -me preguntó.
Fruncí el ceño.
-No entiendo tu pregunta -dije sincera-. ¿Por qué debería haberme peleado con ellos?
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Lilianne y el Príncipe Mestizo
FanficY es justamente este año, en el que todo el mundo sabe que el Rey ha vuelto y ha estallado la burbuja de felicidad que les envolvía. Supongo que deberé ayudar a que Harry no muera pero que la familia de Malfoy tampoco. ¿Se puede saber cua...