Seven nights with you | jjk + ksj

Capítulo XI

Gracias a la escenita con Jungkook; que ya contaba con miles de vistas en YouTube, había pasado de ser una estudiante promedio a ser una celebridad pornográfica categoría uno en redes sociales. Inclusive habían personas que me reconocían en la calle. Que decir de mis compañeros de la oficina, del bar, de la universidad; hasta Lucy me llamó escandalizada, después de olvidarse de mí casi por un mes completo.

Se empezaban a ser habituales las bromas de Yoongi con respecto a mi supuesto noviazgo con Jungkook. Puedo decir de que mi jefe ahora me veía como material con alto potencial para grabar porno; después de haberle comido la boca mi novio de esa manera, en vivo y frente a un público de miles de personas. Osó presentarme un amigo suyo que se dedicaba al negocio.Claro que lo hacía solo para molestarme, pero igual se estaba volviendo insoportable.

Cada día era más estresante tener que cargar con las consecuencias de la mentira inventada por el maldito loco de Jungkook. Nunca debí permitir que llegara hasta este punto. A pesar de que ambos nos esforzamos por desmentirla, ya era demasiado tarde y ni se molestaban en tomarnos en serio.

Hoy, presentaba mi último examen. Diciéndole adiós a el tan catastrófico semestre; que se había encargado de pasarme la cuenta, no por las notas, ni las materias, sino por todo lo que me había pasado en el plano personal. Mente positiva y muchas ganas. Me lo repetía constantemente, respirando profundo y tomando grandes bocanadas de aire antes de entrar al salón.

En fin, toda esta semana ha sido de lo peor. Por la presión de los exámenes me notaba intranquila e irritada casi todo el tiempo, ni siquiera fui a trabajar al bufete, no tenía cabeza para nada más. John lo entendió y me dió la semana libre. Quería concentrarme y estar totalmente entregada a mi carrera; la cual solo me hacía ilusión para restregar en la cara de mis padres que no los necesitaba ni un poco.

El examen estuvo un poco tedioso y bastante largo, pero segura estaba de que obtuve una nota decente. Aunque de camino a casa me empezaba a carcomer la iseguridad y el miedo de que no haber acertado alguna de las respuestas, a pesar de haber revisado y quedar satisfecha. Supongo que en época de exámenes todos los estudiantes pasamos por esto.

Entraba en el edificio y subía las escaleras aún revisando algunas respuestas en el libro. Absorta entre las páginas y el contenido, con la esperanza de no haber hecho nada mal. En un abrir y cerrar de ojos mi libro rodaba escalera abajo. Alguien sujetaba fuerte mi sudadera, casi ahorcándome, con el objetivo de que no corriera con la misma suerte de mi libro. Una vez habiendo recuperado el equilibro, sentía el agarre en mi sudadera, arrugando la tela en un puño.

- ¿Dean?- pregunté con el ceño fruncido.

- ¿Estás bien?

Asentía con la cabeza a la par que me fijaba en Yoongi, quien se encontraba justo detrás de mi salvador. Podía ver perfectamente como me sonreía ladino, agitando una mano en el aire para saludar.

- Hola Yoongi- correspondí su saludo mientras veía a Dean bajar las escaleras en busca del libro.

- ¿Sara tienes algo que hacer esta noche?- Se rascó la nuca y me alcanzó el libro- Estaremos dando una fiesta. Por fin firmamos contrato con la disquera.

- ¡Felicidades! Me alegro mucho por ustedes chicos.- le regalé una sonrisa.

- No hace falta la dirección. Seguro irás con tu novio, él sabe dónde es. - soltó Yoongi colocando sus manos en los bolsillos.

Lo fulminé con la mirada mientras pasaba de largo y reía bajito. Me quería ahorrar las explicaciones, pero era inadmisible que Dean creyera que ese troglodita y yo estábamos relacionados, y menos de esa manera.