- ¿Estás bien, Doblas?- El azabache corrió hasta el lado del hibrido al percatarse de que se encontraba tirado en el piso luego de que una bola de nieve le diera en la cara.
- No pasa nada - Rubén aceptó su mano para ponerse de pie - Solo estoy algo cansado y eso me tiene distraído - Se estaba acostumbrando a la calidez de las manos de Vegetta.
Era 20 de diciembre, la nieve había llegado unos días atrás, sorprendiendo a todo Karmaland con los bellos paisajes que se generaban con la mezcla del brillante color blanco.
Nuestros héroes, habían aprovechado estos días para divertirse entre la nieve como niños e iniciar una guerra de bolas de nieve en el pueblo para el entretenimiento de todos.
-¿Te quedaste despierto hasta tarde?- preguntó cruzándose de brazos.
Asintió bostezando.
-No me gusta que duermas tan tarde- dijo colocando las manos sobre las mejillas del híbrido, quien se sintió cómodo ante el calor que transmitía a través de sus guantes.
- Lo siento, no se volverá a repetir, mi amor - Vegetta solo soltó una leve risa ante el apodo.
- Así me gusta - le guiño el ojo antes de regresar donde los demás y seguir jugando con ellos.
El castaño se acercó a un árbol para sentarse y recargarse en el tronco de este, se sacó la mochila de la espalda y rebuscó entre sus cosas.
Su estómago le gritaba por comida.
Sacó una lonchera morada, regalo de Vegetta para que siempre llevara comida con él.
Al abrirla, el aroma de 3 deliciosos sándwiches de carne inundaron sus fosas nasales y se formaba agua en su boca.
De 3 mordiscos se acabó el primero.
Bostezo
No conforme, de otros dos mordiscos se acabó el segundo.
Bostezo
De un solo bocado se acabó el tercero, pero el hambre seguía.
Volvió a bostezar mientras estiraba sus brazos, quería dormir, pero una voz llamo su atención.
- Joven Doblas - Ruben se incorporó rápidamente al escucharle. Reconocería esa voz donde sea que se encuentre.
- Maestro Merlon - saludó rápidamente, la formalidad entre ellos siempre fue más por el código de héroe, a Rubén nunca le gustó llamarle maestro - ¿Necesita algo?-.
El anciano negó suavemente- Pareces cansado- comenzó a caminar lentamente, seguido del híbrido- Tu aura parece distinta-.
-¿Mi aura?- preguntó confundido.
Se giró y le miro a los ojos- Un aura azul oscura, que pierde su brillo y luce cansada-.
-¿Disculpe?-.
-Estas soñando, Rubén. Despierta- el híbrido le miro confundido, de la nada, todo comenzó a tornarse oscuro.
Rubén
Rubius
Chiqui
Doblas
Doblas
Doblas
Despierta, por favor
Las voces se iban escuchando más claramente, bueno, la voz de Vegetta.
Abrió sus párpados lentamente, encontrándose con un preocupado azabache mirándolo.
- ¿Qué pasó? - logró murmurar, tratando de incorporarse.
-Gracias Dioses- susurró Vegetta, todos miraban atentos la escena.
- Que pasa que Auron te ha lanzado una bola de nieve directo en el rostro y te has caído - hablo Luzu, quien era abrazado por el mencionado, mientras evitaba reírse.
- Y no despertabas, llevas horas dormido - continúo Vegetta - temíamos que te hubieras golpeado muy fuerte la cabeza al caer-.
El híbrido se llevó las manos a la su cabello para sentir un vendaje sobre esta, se levantó con la ayuda del azabache.
- Vamos, te acompaño a tu casa - el híbrido asintió agradecido. Vegetta siempre estaba ahí para cuidarlo.
Se despidieron de sus amigos y comenzaron a caminar hacia la cabaña de Rubén, quien no paraba de pensar en aquellas palabras.
Un aura azul oscura, que pierde su brillo y luce cansada
Nueva historia, que se estará publicando al mismo tiempo en Twitter☺️
13/12/21: EDITANDO!
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❝ HIBERNACIÓN ❞
FanfictionEl invierno ha llegado a Karmaland, todo es nieve y diversión para todos. Excepto para Rubius, que cada día parece más cansado y somnoliento; hasta que en la cena de navidad, cae en un profundo sueño. Sus compañeros deberán ayudarlo. EDITANDO El dib...