❄️🐻SIETE🐻❄️

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— ¿Rubius? — pregunto Fargan, con su voz humana, al ver como llevaba callado un par de minutos.

— Es...- dijo sin mirarle — Cosa de osos — encogió sus hombros mientras se levantaba rápidamente, tendiéndole una mano al híbrido de búho para ayudarlo a ponerse de pie — Vamos, que los demás deben estar preocupados — Fargan asintió.

— En esto tienes razón, todos estamos preocupados por ti, compañero — respondía mientras abría la puerta, encontrándose con sus compañeros en la sala, observándolos en silencio, el cual rompió Rubius.

— ¿Alguien ira al pueblo? — pregunto con calma.

— Auron y yo tenemos planeado ir — dijo Luzu, mirando al del piercing, quien solo respondió guiñándole el ojo.

— ¡Iré con ustedes! — dijo rápidamente, acomodando su gorro — Necesito hablar con Merlon —

— Eh Rubius- Vegetta le tomo la mano rápidamente al ver como se dirigía a la puerta, intentando irse — Merlon se fue a una misión —.

Rubius entristeció al instante — ¿No les dijo a donde iría? Solo faltan 3 días para navidad — sentía una pequeña presión en su pecho al mismo tiempo que un nudo se formaba en su garganta.

— Tranquilo, chiqui — abrazo a Rubius, haciendo que ocultase su rostro en su pecho — Él volverá a tiempo, sabes que nunca te dejaría solo en una fecha tan dura para ti — susurro.

Al escuchar los sollozos del híbrido, Luzu se acerco a la pareja uniéndose a su abrazo, acto que repitieron el resto de sus compañeros.

Sabían que la infancia de Rubius fue dura, Merlon lo presento al pueblo como su hijo, nadie dudo de su palabra ya que son los dos únicos híbridos de oso en el pueblo, Merlon lo había encontrado en fechas navideñas, siendo él su único apoyo y refugio del peligro que le asechaba.

Días después, un 25 de diciembre, los cazadores dieron con su paradero, intentando llevárselo para comerciar con su piel. Merlon le salvo y defendió de aquellos malhechores, pero el trauma y el miedo habían marcado al cachorro, de ahí surgió la idea de entrenar jóvenes para proteger a aquellos que no se pueden defender solos, incluyendo a Rubius en ese entrenamiento, un día las palabras de Merlon quedaron grabadas en su cabeza y nunca las ha olvidado:

Deja que tu parte híbrida sea tu fortaleza, no tu perdición.

Cada 25 de diciembre, Merlon y Rubius la pasaban juntos como padre e hijo, una relación que se fue fortaleciendo cada año, llegando al punto en que el héroe estuviese llorando su ausencia.

Se fueron separando lentamente de aquel abrazo, todos tenían obligaciones y tareas que cumplir, era cansado, pero no se quejaban. Ayudar al pueblo les llenaba de gozo.

— Bueno, guys — Luzu fue el primero en romper el silencio — Debemos volver a nuestros deberes — miro hacia Rubius quien aun permanecía en brazos de Vegetta — Rabis, te quedaras con Vegetta hasta que un médico venga a revisarte. No queremos arriesgarnos a que algo te pase —.

Rubius iba a hablar con la intención de reclamar, pero fue interrumpido — No es una pregunta, calvo — dijo Auron — ¿Sabes lo que nos haría Merlon si algo te vuelve a pasar? —.

— ¿Matarlos, no? —.

— Exactamente  — respondió Alex rápidamente — Y según el viejo dice que no tiene favoritos —.

— A ti te tiene en una foto enorme con un marco de oro y a nosotros no tiene en foto tamaño infantil pegadas con cinta en su pared — todos rieron al unisono, era un momento realmente muy bonito, tal como deberían ser los próximos meses...

Los siguientes días fueron bastante tranquilos para todos. Rubius y Vegetta oficializaron su relación, el doctor del pueblo reviso al chico, todo estaba en perfecto estado con él, bueno casi todo...

Las largas siestas que tomaba el híbrido no era medio normal, o al menos eso tenia preocupado al azabache.

— ¿Estas preparado para mañana? — Luzu y Rubius hablaban tranquilamente por teléfono.

— Realmente nadie se espera lo que pasará mañana, Luzu —.

hice una encuesta en Twitter y salió actualizar hibernación, so acá tiene nuevo capítulo☺️

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uwu

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