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Esa mañana, Kihyun se despertó de un sobresalto y quedó sentado en la cama, sus ojos mirando a su alrededor con confusión y dificultad, el sueño pesaba aún sobre sus párpados. Sus brazos descansaban sobre su regazo, una de sus manos se elevó hasta su cabello y rascó allí sin mucho cuidado, despeinando aún más las oscuras hebras.

"Lo he soñado otra vez…" pensó, dejando salir un profundo suspiro, "Changkyun se despide de mí, yo corro por alcanzarlo pero no lo consigo y de nuevo… me encuentro solo", sintió presión en el pecho de solo imaginarse que pasara de verdad.

Sacudiendo la cabeza, frustrado de repente, se quitó las mantas de encima y salió de la cama von dirección al cuarto de baño, se daría una ducha esperando que eso le quite la tensa sensación que el sueño le había dejado en su cuerpo. Pero era inútil y lo sabía… Ese nuevo miedo le atormentaba últimamente.

"Ya estuviste varios años sin él, diviértete lo que queda de tiempo a su lado y cuando regrese a los Estados Unidos vuelves a tu vida de nuevo… es solo diversión, no te hagas falsas ilusiones", era verdad se dijo mentalmente, Changkyun tenía su vida en USA y él pertenecía a esta pequeña ciudad donde vivió toda su vida. Fueron, son y serán siempre diferentes…

Resignado, se preparó para comenzar un nuevo día de su rutinaria vida y finalmente, como siempre, se encaminó hasta su amada librería. Por la tarde debía encontrarse con el menor en su estudio y terminar uno de sus últimos bocetos, su corazón se agitó nada más pensar en el cobrizo de bonita sonrisa, "traidor" pensó con enojo, ya abriendo la puerta del local.

———


Cariño, solo llamaba para recordarte que deberías pasarte por la exposición la semana que viene, es momento de comenzar con los detalles, ¿Si? — La calida y serena voz de la castaña resonó del otro lado del telefono, Changkyun asintió como si en realidad la tuviera en frente y pudiera verle.

La muestra de sus obras cada vez estaba más cerca, y sus nervios y preocupaciones aumentaban a cada hora que pasaba, pero estaba feliz con esto, por que era una gran oportunidad para él.

— Gracias Dodó — Respondió con una pequeña sonrisa tirando de sus comisuras, mentiría si dijera que no estaba emocionado por todo — ¿Cuándo debería ir? ¿Algún día en particular?

La sintió hacer un ruidito dubitativo, como si lo pensara por un instante antes de responderle adecuadamente — Bueno, tu amigo comenzará a instalar sus cosas el martes por la mañana, probablemente para el miercoles estaría bien, ¿Que te parece? — Ella también se notaba interesada en todo eso, y era algo que el menor agradecía mucho.

Changkyun miró brevemente el sacó de paño negro que cargaba en su mano libre, dejándolo colgado en el mismo lugar de donde lo había sacado anteriormente, "demasiado básico" pensó disconforme para luego retomar la conversación — Me parece bien, por la tarde estaré un poco ocupado pero pasaré en la mañana, ¿Está bien?

Una breve risita del otro lado del celular provocó que sus mejillas ardieran involuntariamente, menos mal que no podía verle por que no soportaría su astuta mirada — Por supuesto que estarás ocupado, bien cariño… nos vemos el miercoles entonces, adiós y cuidate.

Luego de despedirse brevemente, Changkyun guardó el aparato en el bolsillo trasero de su jean celeste lavado y continúo mirando a su alrededor por un saco que fuera de su estilo pero a la vez no tanto… quería verse bien pero presentable.

Frunció el ceño pensando el por que se preocupaba por eso, ciertamente hacía mucho que no le interesaba la moda en tendencia, simplemente vestía como le agradaba y ya, pero ahora… bueno, él quería verse bien y ya.

 Not Mine || Changki Donde viven las historias. Descúbrelo ahora