Capitulo 40

459 21 1
                                    

-La desaparición de Elizabeth, la hija de los integrantes de la banda de momento, One Direction, está alterando a las fans de todo el mundo. Como sabemos, las últimas noticias que se tuvieron de ella fueron hace exactamente tres meses cuando ella salió a sacar la basura. Luego de eso nadie volvió a verla, solo se encontraron las muletas que utilizaba. Sabemos que Harry Styles ha recibido una llamada en la que se le pidió una suma impagable de dinero....

El hombre apagó el televisor. A la chica le caían las lágrimas por el rostro. Quería que él la dejara ir. Había oído todo desde la habitación contigua.
El rubio se acercó a ella clavando sus enormes ojos marrones en los de ella. 
La puerta se abrió de golpe y él volteó. La chica quería gritar, pero estaba amordazada y atada a una columna sentada en el piso de ese horrible sotano. Luke apareció con un arma en la mano.
-Soltala.- masculló.
-¿Cómo lo supiste?- preguntó el rubio incrédulo.
-Te conozco, tío, sabía que escondías algo. Soltala ahora. Ella no te hizo nada.- gritó.
-No vas a dispararme, somos familia.
-No, vos no sos familia para mí.- rugió él.
Elizabeth trató de soltarse con las pocas fuerzas que le quedaban. Luke se acercó a ella e intentó soltarla. Un disparo se escuchó.
Ella gritó con todas sus fuerzas.
-Tenes razón, ya no somos familia.- dijo el tipo rubio y salió del lugar.
Elizabeth sacó las manos de su espalda, Luke había cortado las sogas.  Temblaba, se acercó a su amigo y lo abrazó con fuerza.
-Vas a estar bien.- dijo ella casi en un susurro.- Vas a estar bien.
Luke negó.
-Estás en un sotano, en las afueras de Londres, hacia el norte.- dijo él con dificultad. La sangre brotaba de su estómago.- Tenes que salir de acá.
-No voy a dejarte.- dijo ella entre lágrimas desesperada.
-Tenes que irte, por favor.- pidió él.
Ella se quedó con él.
-Te quiero.- le dijo y ella sintió como él ya no vivía.
-No.- gritó.- No, Luke, no.
No importó cuánto intentó, él no iba a volver. Tomó el celular de él y le marcó a Harry.
-Harry, por favor atendé.- suplicó.
Uno, dos, tres tonos.
-¿Hola?
-Papá,- dijo ella rápidamente.- estoy en un sotano a las afueras de Londres, al norte.- dijo repitiendo las palabras de Luke.- Luke está muerto.
-¿Elizabeth?- preguntó él incrédulo.
-Por favor.- suplicó ella.- Estoy en un sotano en las afueras de Londres...
La chica se calló de pronto.
-Maldita.- se escuchó que gritó un hombre.
-En las afueras de Londres al norte.- gritó ella antes de que la comunicación se cortara.
El hombre la subió a un auto y la recostó en el asiento trasero inconciente. Arrancó a toda velocidad.
Al poco tiempo empezó la persecución, él sabía que esto pasaría, sabía que debería haber huído dejándola ahí, pero no contaba con que ella hiciera esa llamada. Que estúpido había sido.
La chica despertó, no estaba atada y él no lo había notado. Se movió lentamente procurando no llamar la atención y quitó el seguro de la puerta, podía oír las sirenas y era conciente de la velocidad a la que iban pero no podía quedarse ahí, él iba a matarla.
Antes de que él pudiera reaccionar, ella abrió la puerta y saltó cayendo en el pasto pero golpeándose fuertemente de todas formas.
Los autos siguieron con la persecución, salvo uno que se detuvo para tomarla.
Cinco hombres entraron corriendo al hospital, antes de dejar verla les dieron las recomendaciones que debían seguir. Todo había pasado muy rápido. La suerte había jugado a favor de ella que no se había roto ni un solo hueso, a pesar de que, gracias a los golpes de él y a los que se hizo al saltar de ese coche, tenía varias lastimaduras, moratones y cortadas.
Salió de la sala y corrió rápidamente a brazos de sus padres. Todos lloraban.

-Nuestra chica direction ya está en casa con sus papás y su novio. Fue encontrada por un amigo suyo que, antes de morir, le reveló donde se hallaban para que ella pudiera pedir ayuda....

Zayn apagó el televisor y la abrazó suavemente. Los demás preparaban la comida según las recomendaciones ya que la salud de ella estaba muy mal debido a la falta de alimento que el hombre le daba en proporciones muy escasas. Ella se dejó arrastrar por sus brazos. Con lágrimas en los ojos, lo miró y le tocó el rostro con las manos temblorosas.
-¿Puedo besarte?- preguntó ella y a él le dolió que lo hiciera. Claro que podía besarlo, ¿Por qué hacía falta que lo preguntara?
Sin responder, Zayn se le acercó y la besó suavemente, sintiendo, después de tanto tiempo, el sabor de sus labios y el calor de sus abrazos.
-No sabes cuánta falta me hiciste.- dijo.
-Ya estás acá.- murmuró él acariciándole la mejilla.- Ya estás acá otra vez.
Volvieron a besarse.
-Está la comida.- dijo Liam suavemente entrando en el lugar.
Ambos se levantaron, ella se acercó a su padre y le dedicó una pequeña sonrisa mientras lo abrazaba por la cintura. Él no notó que la debilidad de ella había estado a punto de hacerla caer.
Se sentaron en la mesa, fue una cena silenciosa, nadie decía nada. La miraban, como si fuera a desvanecerse, como si solo fuera un sueño.
Esa noche todos se acostaron temprano exhaustos. Sabían que ella estaba cansada y no quería hablar sobre lo que había pasado todavía.
Cerca de las tres de la mañana Harry despertó y volteó para abrazar su almohada como solía hacer desde que ella había desaparecido, se topó con el pequeño cuerpecito de su hija. Inconcientemente, sonrió y la tapó para luego rodearla con su brazo para pegarla a él. No era un sueño, ella estaba ahí. La chica que había llegado a su vida para iluminar cada uno de sus días había vuelto, su pequeña hija había vuelto y él no iba a permitir que nada volviera a pasarle.

InvisibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora