Juegos Mentales

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Fueron en una especie de nave pequeña, donde cabían muchas personas. Wanda y Pietro eran los únicos humanos. Dos centinelas de Ultrón piloteaban la nave. El resto de robots estaban dentro de este Quinjet (parecido al de los Vengadores) mientras que algunos volaban alrededor de la nave. Los gemelos estaban un poco mareados ya que estaban sobrevolando las nubes y no sabían ni en dónde se encontraban.

Luego de unos treinta minutos, llegaron a África. El Quinjet descendió y se colocó dentro de una pequeña jungla. Mientras bajaban, se podía ver el cielo bastante anaranjado, a pesar de que era el mediodía.

Los centinelas de Ultrón, los gemelos y el robot líder bajaron del Quinjet en la jungla. Se dirigieron al extremo de esta donde terminaba y observaron el lugar. El calor era agobiante. Pietro se sacó su campera y se dejó una remera azul de mangas celeste, aunque mangas largas. Wanda dejó su chal rojo en el mismo lugar donde su hermano dejó su campera. Hasta se tuvo que atar su pelo en una cola de caballo.

El deshuesadero de barcos efectivamente se encontraba en una costa. Los barcos para desarmar estaban clavados en la arena y sostenidos por todos los extremos para que estos no cayeran.

- No es un deshuesadero normal - explicó Ultrón. - Fabrican armas ilegalmente. No sé si eso les interferirá en el plan a ustedes o...

- Está bien - se apresuró Pietro. - No hemos dormido nada. Voy a ir a por unos cafés.

Pietro corrió como una flecha por la carretera que se encontraba en el final de la arena y dirigía a la ciudad. Dejó una estela celeste por donde había pasado. Al minuto, regresó con dos cafés y le entregó uno de ellos a Wanda.

- ¿Los compraste? - le preguntó mientras miraba con desconfianza el café.

- Estamos en África, Wanda - se excusó - No hablo ni el mismo idioma ni tengo el dinero que se utiliza aquí.

- Cuando entren, necesito que ustedes negocien con Klaue - les interrumpió Ultrón cuando Wanda iba a regañar a su hermano. - Antes apaguen las luces del barco así no los ven.

- ¿En cuál de todos los barcos se encuentra? - preguntó Wanda, sin cuestionarlo de por qué no iba el mismo.

- El de allá. Lo reconocerán porque tiene escrito en la proa "Churchill, Great Britain"- les señaló un barco negro y rojo. - Yo los esperaré adentro también. Si no coopera, me conocerá.

Sin más, Pietro tomó a su hermana de la misma forma de siempre y corrió hasta el barco. Entraron por una puerta circular. Wanda conectó a su hermano telepáticamente para poder comunicarse y saber dónde iba a estar.

Pietro tomó una dirección distinta a la de su hermana. Ella localizó la mente de Ulysses Klaue, el cual estaba en una oficina que parecía una pecera sobre el resto de la planta del barco. Su hermano se dirigió primero a desconectar todas las luces.

Cuando hubo un apagón general en el interior del barco, Wanda corrió rápidamente a la oficina de Klaue. Atravesó el barco, el cual era lo suficientemente amplio para que una gran cantidad de personas trabajaran. El piso principal del barco solo servía para conectar con puentes tanto el babor como el estribor. Debajo de esos puentes de metal, todos los trabajadores creaban armas y por sobre todo bombas. Wanda tuvo un deja vu horrible. Caminó por el puente, mientras oía a muchas personas quejarse por el apagón. Seguramente había esclavos trabajando, porque la chica observó cómo maltrataban a un muchacho.

Al llegar a estribor, subió una escalera hacia el pasillo que contenía la puerta a la pecera de Klaue. Su hermano llegó justo cuando ella se detuvo en la puerta, la cual estaba abierta.

Klaue había tomado un arma y estaba apuntando al oscuro pasillo. Sin más, Pietro se lanzó sobre él justo en el momento en el que Klaue había disparado. Con su supervelocidad, le quitó el arma y el cartucho, depositándolos en el escritorio de Klaue. Incluso había sacado bala por bala y las dejó verticalmente haciendo una fila al lado del arma.

La Historia de Wanda MaximoffDonde viven las historias. Descúbrelo ahora