Me sorprendió su petición, no sabía cómo reaccionar, no sabía si sería capaz de solo dormir a su lado. Él noto mi indecisión, tomo mis manos, acaricio mí mejilla y me sonrió de la manera más tierna posible.
Tom: Te lo juro que solo quiero dormir a tu lado. Bueno en realidad... quisiera volver a repetir algunas cosas, pero sé que no se puede. Solo quiero abrazarte y que tu cara sea lo primero que vea mañana antes de irme.
Me veía y me sonreía, me transmitía tantas cosas, no pude negarme, le dije que sí y en ese mismo instante me abrazo.
Montse: ¿A qué hora debes irte mañana?
Tom: A las 6:00a.m
Montse: ¿Seguro que no quieres que te acompañemos?
Tom: Pierde cuidado, con que me dejes dormir contigo basta.
Montse: Pues en ese caso, vamos a prepararnos para descansar. Me iré a dar un baño.
Tom: Yo también, y prepararé mis cosas de una vez. Te espero entonces.
Se metió a su habitación y yo fui a dar un vistazo a Ángel que ya dormía como un bebé, me fui a mi cuarto y me metí a la regadera, habían pasado tantas cosas en los últimos días, había sido un sube y baja de emociones. Salí, me puse un pijama ligero y fui con Tom.
Al abrirme llevaba puesto unos boxer y una camiseta blancos, aún tenía el cabello algo mojado, se veía tan guapo, sonreí y el me hizo un ademán con la mano para que entrara.
Montse: Dame esa toalla y ven, tienes muy mojado ese cabello, no puedes dormir así, te hará daño.
Tom: Hehehe ten, gracias por preocuparte.
Montse: Tú has hecho mucho más por mí, esto no es nada.
Se sentó en una silla y comencé a secar su cabello, cuando terminé tome un cepillo y comencé a peinarlo, era tan suave.
Tom: Vas a hacer que me duerma.
Montse: Jajaja entonces dejaré de hacerlo porque no creo que pueda cargarte a la cama.
Tom: Muy probablemente no, pero yo sí a ti.
Se levantó de un salto de la silla, me tomó en sus brazos y me arrojó a la cama, subió a ella y comenzó a hacerme cosquillas.
Montse: Ya por favor para, no quiero golpearte para ya jajaja.
Tom: ¿Serias capas de golpearme?
Montse: No, pero es reflejo involuntario.
Tom: Eso lo tengo que comprobar.
Siguió su asalto de cosquillas, yo me retorcía y le pedía, bueno, le imploraba que se detuviera, pero no lo hacía, de repente comencé a llorar y seguía pidiéndole que parará. Cuando vio mi cara roja y con lágrimas se detuvo y su cara cambio totalmente.
Tom: Perdón de verdad perdóname ¿Te lastimé? Soy un idiota.
Montse: No te preocupes, siempre me pasa cuando me hacen muchas cosquillas.
Tom: De verdad perdón, me jure no hacerte llorar y mírate, entiendo si después de esto quieres irte.
Montse: No, de verdad no pasa nada, enserio estoy bien. Solo la próxima, para cuándo te lo pida jaja.
Me miraba con preocupación y culpa, fui a limpiarme la cara y cuando regrese estaba sentado en la cama con la cabeza agachada. Tenía que hacer algo para hacerlo sentir mejor, me acerque, lo hice que me abrazara y le sonreí.
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Déjate amar
FanfictionElla una mujer casada que creía tener la vida perfecta,que creía estar con su verdadero amor. La vida le haría una jugada inesperada que comenzó con la aparición de aquel hombre de ojos azules.