Traté de portarme lo más neutral que pude, no sabía cuánto tiempo lo lograría, cuando se fueron Tom me abrazo, pero solo le di un beso y puse de pretexto que debía ir al baño y fui directo a mi cuarto, cerré la puerta y no pude más que tirarme a la cama llorar, odiaba estar así, odiaba a Esteban, él sabía lo que provocaría, hablo con toda la intención de herirme y el maldito lo había logrado. Él sabía bien cuánto lloré, cuanto sufrí, cuanto tiempo sentí que no valía ya nada porque no podía embarazarme de nuevo, él me ayudó a superar eso y ahora venía y abría esa herida otra vez. Escuche que tocaron la puerta y rápidamente me fui a esconder al baño, al cerrar escuche pasos que se dirigían hasta mí, traté de controlar mis sollozos y tratar de estar lo más tranquila que pudiera.
Tom: Montserrat, nena, ábreme por favor... necesito saber que estás bien... estoy contigo, déjame estar a tu lado.
Me quité de la puerta tapándome la boca, abrí la regadera para tratar de esconder con el ruido del agua cayendo, los sollozos que no podía controlar, pegué mi frente a la pared y de pronto estaba hincada en el piso sintiendo un gran dolor en el pecho. La puerta se abrió y sentí su mirada sobre mí, se acercó a cerrar la regadera, puso su mano en mi espalda, tomó mi cara, se veía triste y angustiado y yo solo pude echarme a sus brazos.
Me sentó en sus piernas, yo escondí la cara en su cuello, él acariciaba mi espalda y mi cabello, no me decía nada, pero no hacía falta, el hecho que estuviera así conmigo era suficiente.
Montse: ¿Qué le hice? ¿por qué me odia tanto? Yo no fui la que tiro todo a la basura ¿por qué lo hace?
Tom: Tranquila mi niña, no hiciste nada, tú eres perfecta, él es un idiota.
Montse: ¿Y si de verdad ya no sirvo y no puedo tener más hijos?
Tom: No digas eso, no eres una máquina que se descompone, eres una mujer hermosa y valiente
Montse: Pero Tom, un día vas a querer hijos y, aunque es muy hermoso, no es lo mismo adoptar que ver como se forma desde cero un ser que es mitad tú
Tom: Existe la inseminación, la renta de vientres, los tratamientos de fertilidad, y si aún nada de eso funciona...
Montse: Me dejarás y buscaras quien si te de un hijo.
Tom: Siempre he soñado con una familia, llegar a casa, ser recibido con un beso del amor de mi vida, con un abrazo de un pequeño maravillosos.
Montse: Pero si yo no puedo, no te quiero quitar esa ilusión.
Tom: ¿Sabes una cosa? Mi sueño ya se cumplió
Montse: ¿Qué? ¿Cómo? Quieres decir que...
Tom: Así es, esa familia son Ángel y tú, no sabes lo maravilloso, la calidez que ustedes le brindan a mi vida y a mi corazón, rezo todos los días porque me ames como yo te amo, porque quiero tenerlos en mi vida por siempre.
Lloré de nuevo, pero ahora era porque era tan hermoso lo que acababa de escuchar, lo abrasé, le dije que lo amaba y que esperaba nunca separarme de él. Limpio mis lágrimas y me dio un beso suave, nos paramos y regresamos a la cama.
Montse: Siento que estallará mi cabeza.
Tom: Descansa, es lógico, lloraste mucho, recuéstate iré a prepararte algo y a buscar una pastilla para dolor.
Montse: No como crees, yo iré a preparar algo de comer.
Tom: No señorita, usted necesita descansar. Mi amor, quiero hacerlo, no soy más un invitado, somos pareja, te amo y quiero consentirte.
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Déjate amar
FanfictionElla una mujer casada que creía tener la vida perfecta,que creía estar con su verdadero amor. La vida le haría una jugada inesperada que comenzó con la aparición de aquel hombre de ojos azules.