Clase 4

13 - "Libros antiguos"

Terminamos de comer tranquilamente. Poco a poco el patio se va llenando de más gente, que camina hacia sus clubs.

Miramos a los miembros del club de baloncesto entrar al gimnasio, y de pronto notamos que Alan se acerca a nosotros y se sienta.

- ¿Que tal tu búsqueda de los móviles? - Dice Mack con un tono vacilón.

- Que graciosa... No sé cómo estáis tan tranquilos cuando nos han robado a todos.- Responde Alan más serio y frustrado.

- Yo tampoco me fío de nada de esto, pero tampoco podemos hacer nada.- Dice Mack mientras se apoya en el tronco del árbol en el que estábamos con las manos detrás de la cabeza.

De repente una voz suena por los altavoces de todo el instituto.

- Hoy a las 16:00 de la tarde, después de la hora de comer, reunión importante en el escenario de teatro. Todos el alumnado y profesorado debe asistir.- Dice la voz de los altavoces.

- Ese es mi padre... Quizás hayan encontrado a el culpable.- Dice Luke.

- ¡SI! !Por fin!- Exclama Alan con una sonrisa y emoción.

Pasan unas horas. Terminamos de comer y todos vamos hacia el teatro, como dijo el director por los altavoces antes.

Al entrar ya hay varios alumnos sentados en las butacas, en el escenario está colocado un atril con un micrófono, y a los lados hay algunos profesores.

Me siento con Luke, Alan y Mack en unas butacas de las cuarta fila.

Unos minutos después de sentarnos el director sube al escenario y se coloca detrás del atril para empezar a hablar.

- Buenos días a todos los alumnos y alumnas, y al profesorado. Hemos sido informados de un supuesto robo de todos los teléfonos móviles del edificio. Actualmente estamos trabajando para encontralos todos, está tarde todas las habitaciones serán revisar para encontrar al culpable, así que a partir de ahora hasta después de la cena no podrán entrar a dichas habitaciones.- Dice el director con expresión seria y voz tranquila. Hace una pequeña pausa y continua hablando.- Pedimos sinceras disculpas a todo el alumnado por las molestias. Estaremos observando las cámaras y otros tipos de sistemas de seguridad para encontrar al culpable lo antes posible. Hasta entonces los ordenadores de la biblioteca estarán disponibles con red wifi cuando está esté abierta. Dicho esto, pueden ir a sus clubes, o a donde quisieran ir, excepto las habitaciones.

El director vuelve a bajar del escenario seguido del resto del profesorado. Todos los alumnos salimos también de la habitación, mientras se escucha a la gente hablar sobre el discurso del director y el robo.

- Joder... Pensaba que ya habían encontrado los móviles...- Se queja Alan.- ¿Por que no miran las cámaras, encuentran al culpable y ya?

- Había una profesora paseando por los pasillos en la madrugada¿No se dio cuenta del robo, ni vio a nadie?- Dice Mack.- Nada me cuadra...-

- Si vieron a alguien... Os vieron a vosotros.- Dice Luke bajando la mirada.

- No creo que piensen que fuimos nosotras¿Verdad?- Digo algo asustada por que nos echen la culpa.

- Si sois vosotros las del robo, os odiare por quitarme el móvil, pero os admiraria por hacer algo así sin que os pillen.- Dice Alan mientras se ríe imaginando la situación.

- Muy gracioso Alan, pero te vi mejores cosas que hacer que robar cientos de teléfonos en una noche.- Dice Mack cruzándose de brazos.

Ya que no podemos ir a nuestras habitaciones por que las están revisando, caminamos dando vueltas por el patio.

-¿Vamos a dar vueltas y ya esta?- Dice Alan.

- ¿Puedes dejar de quejarte?- Dice Mack.

- Podemos ir a la biblioteca, los ordenadores están libres con wifi...- Digo intentando calmar la situación.

- Probablemente estén ya ocupados, pero podemos ir a ver.- Añade Luke.

Decidimos hacer eso. Caminamos hacia la biblioteca, es la primera vez que entro a esta y la verdad me impresionó.

Era una habitación grande y bastante bien iluminada. Había muchas estanterías con libros de todo tipo, algunas mesas vacías para leer o hacer deberes, y otras con ordenadores. Al fondo hay un mostrador en el que hay una bibliotecaria ordenando algunos libros.

Nos acercamos a las mesas de los ordenadores, hay bastante gente pero conseguimos un ordenador para nosotros.

Ya que solo hay una silla por ordenador, Alan llega el primero y se sienta en esta, el resto nos ponemos a su al rededor para ver.

- Y bien, ¿Que queréis hacer?- Pregunta Alan mientras abre el navegador.

- Hemos venido aqui siguiéndote, pensábamos que tú tendrías alguna idea...- Digo mientras miro a Luke y Mack.

- Entonces... ¡SERGI! ¿Juegas?- Dice Alan dirigiéndose hacia unos niños que están en otro ordenador cerca nuestro. Esos niños asienten y ambos entran a un juego online desde el navegador.

- Voy a jugar yo por que he pillado la silla, pero os explico cómo va.- Dice Alan mientras se gira para mirarnos.- Es muy simple, todos tenemos un personaje, y unas armas, consiste en abatir a los demás, y el último que queda gana. Como es la primera vez que jugamos aquí no tengo armas buenas, pero ellos están igual, así que no debe ser tan difícil.-

Empieza la partida, Alan nos ofreció ayudarle, pero lo vemos tan concentrado que ninguno de los tres nos atrevemos a decir nada. Alan gana está primera partida, pero no contesto con esto, juegan unas partidas más.

Después de unas horas todos los que estaban jugando se juntan en una mesa a hacer un recuento de partidas ganadas.

- ¡VAMOS! ¡Yo he ganado más! - Exclama Alan. Se oye a la bibliotecaria mandarnos callar desde la otra punta de la biblioteca.

Antes de salir de la biblioteca doy una vuelta por las estanterías. Veo varios tipos de libros, fantasía, terror, misterio... Pero es especial me llama la atención una sección de libros antiguos. Cojo uno de estos de su estantería, la tapa es de un color granate oscuro, y las cientos de páginas de este ya están de un color amarillento, algunas hasta tienen algunas manchas color café.

Ojeo algunas páginas pero no consigo entender de qué va este. Me planteo durante unos segundos coger este para descubrir la historia del libro, ya si quiera tiene un título. Pero al final acabo dejándolo de nuevo en la estantería y salgo con Luke, Alan y Mack de la biblioteca.

En el camino de vuelta a el patio, aquella estantería de libros antiguos no deja de dar vueltas en mi cabeza. No suelo interesarme por libros de ese tipo, pero hoy realmente tengo curiosidad.