Pasión Gitana en las Arenas del Desierto Arabico (#2 Trilogía Pasión Y Cultura)

Capítulo 2

Sadiq 

Después de diecisiete horas por fin en tierra firme. Me registran y salgo por un taxista que me lleve a mi destino— ¿Buenas tardes puede indicarme donde puedo conseguir un taxis?. 

Cuando a señorita me indicó donde  tenía que tomar el taxis salí del aeropuerto. — por favor al hotel Melia Barcelona Sarria. –Luego de casi media  hora llegamos al hotel. Camino hacia recepción bajo la atenta mirada de muchos—  Buenas vengo por la reservación de Sadiq Emir Fearab.— Por su puesto —dice la mujer embobada mirándome  — Gracias— le dije cuando me extendió la tarjeta — puede solisitar me  para todo lo que desee.— dice coqueta. Pero que mujer mas descarada. Camino hacia el mi habitación temporal debo de realizar todo lo más  pronto posible para irme de este país. Voy a descansar.  No voy a nada solo quiero descansar. Y mi último pensamiento es mi amada patria Mi Amada Arabia.

Gypsy Zita

—¿Gypsy en que estás pensando tan concentrada?—Me giro para encontrarme con Bardel —No te sentí llegar amigo mío. — ¿Cómo lo vas hacer si estás concentrada pensando en quién sabe qué? — hablo con doble sentido, Reí por sus ocurrencias, por personas con Balder es que es que mis días en esta jaula de oro son más liviano.

—En nada y en todo. Vivir aquí se me está volviendo aburrido — Búscate ese amor que tanto hablaba tu madre. —Cuando menciona eso siento rabia —¿Que amor? Mi madre pasó su vida mendigando amor al dueño del circo, que solo la utilizaba para su propio beneficio y placer. Y por si fuera poco le da un regalo, porque déjame decirte que una hija a ese ser tan déspota que tengo por padre es un regalo.

— Tranquilízate Gypsy — dice con esa calma que lo caracteriza — Perdón, no tienes la culpa de mis males, nunca voy a encontrar ese dichoso amor, aparte de que estoy en una jaula de oro, mi tío Conballo vive acosándome y alejando a todo aquel que pueda estar interesado en mí.

—Tu tío es un cerdo, mirá que acosarte, siendo la hija de su hermano esto es el final. Deberías de acusarlo con el jefe. — ¿Crees que no lo he hecho?.

—Ese desgraciado me acuso que estaba coqueteando un hombre al cual ni conocía.

—Vamos ánimo sé que llegara ese hombre que te va hacer dejar de pensar como piensas. —Dice dejándome piedra. Balder está heredando los dones de su madre, aunque a él no le guste, puede leer los huesos y ver cosas.

— ¿Viste algo Balder?

—No, ¿Qué te hace pensar que vi algo? — dice tan seguro que si no fuera porque lo conozco diría que no sabe nada — Sé que el don de tu madre pronto te reclamará, ¿Qué fue lo que viste?

—Gypsy...

—Sé que si ves algo no puedes decírmelo, son as reglas a menos que consultes con mi consentimientos — Basta Gypsy sabes perfectamente que no creo en esas cosas. Si tanto funcionará mi madre se hubiera dado cuenta de que tu tío Conballo...

Se queda callado ese tema está prohibido. Hace años la madre de mi amigo fue hallada muerta, el ultimo que estuvo con ella fue mi tío eran pareja, pero era bien sabido que él no la quería, que solo estaba con ella por lo que ella podía general dinero. Se rumora que el la asesino. Balder siempre lo ha odiado por engañar a su madre con cualquiera jovencita y por golpearla por años.

—Está bien no te exaltes, pero sé que sabes algo que yo no. Vamos a ver que encontramos en el circo, total estamos en el circo de los amores perdidos.

Después de recorrer el circo en busca de algo que nunca encontramos nos encontramos con un puesto nuevo, de una ¿adivina? —No sabía que mi padre había aceptado a otra integrante en este circo— ¿Balder sabias que teníamos un nuevo puesto en el circo? — le pregunto señalando la carpa, con un extraño toque árabe y me encanta — No...— Dejo de escuchar a Balder y camino hacia aquella tienda como una polilla hacia la luz, es como si una fuerza me llevara hacia ella. Siento como me toman del brazo —¿Qué crees que haces Zita? — me interrumpe mi amigo