One-shots•Teen Wolf

39.Ethan Steiner

—Lydia, por favor— junté mis manos dándole una expresión de cachorrito que podía convencer a todo el mundo cada vez que quería algo.

—Bien, lo intentaré— se levantó de la mesa soltando un bufido enojada y fue hacia la mesa de los gemelos que se encontraba a unos cuantos metros de nosotras.

Mi amiga rubio fresa les sonrió cuando se sentó junto a Aiden y él la miraba con un pequeño brillo en sus ojos, los tres siguieron conversando y decidí desviar la mirada hacia los chicos que recién llegaban a mi lado.

—Hey, Lynn— sonreí al ver a mi dúo de chicos favoritos y ambos se sentaron a ambos lados de mi cuerpo —¿Tienes hambre?— asentí y Scott me dio un sándwich de jamón y queso y lo tomé en mis manos.

—Gracias, Scotty— besé su mejilla satisfecha, moría de hambre, pero había mucha fila para la comida y no quería hacerla, y por suerte, ya no tenía que pasar hambre —Eres el mejor de todos los amigos en este mundo tan cruel— recargué mi cabeza de su hombro y escuché un puchero de parte del castaño.

—¡Oye!— se cruzó de brazos haciendo que se vea muy tierno y me extendió una manzana y un poco de jugo de naranja en su bandeja —Yo también te había traído algo y así me lo pagas— solté una carcajada por lo infantil que podía ser Stiles en algunas ocasiones.

—Gracias, lunares— removí su cabello con una sonrisa en el rostro y soltó otro puchero, le di un fugaz beso en la mejilla dejándole un poco de baba sobre ella —¿Eso querías?— solté una risa al ver su mueca de asco y se limpió la baba con la manga de su chamarra —Ahí está tu recompensa. Gracias por preocuparse por mí, chicos— ambos recargaron sus cabezas de mis hombros y reí mientras me comía el sándwich.

La curiosidad comenzaba a matarme y volví mi vista hacia la mesa en la que la rubio fresa había ido por mí y los tres se levantaron de la mesa para luego irse, solté un suspiro lleno de tristeza y seguí comiendo.

La verdad era que Ethan comenzaba a gustarme y le dije a Lydia que me diera una pequeña ayuda con él, sabía que no era...heterosexual, pero yo podía hacerlo cambiar de opinión sobre eso...o eso espero hacer. Le rogué a Lydia que me diera una cita con Ethan así sea como amigos y al parecer no mencionaron nada sobre mí.

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—¿Quieres que te lleve?— asentí con la mirada en el suelo, había estado distraída el resto del día pensando si Lydia hizo lo que le dije y desde el almuerzo no ha cruzado ni una palabra conmigo sobre eso —Vamos, Lynn. No puedes seguirte lastimando de esa forma— se detuvo y choqué con su cuerpo debido a que iba delante de mí.

—Tiene razón. Ethan está del lado de los chicos malos— colocó su mano sobre mi hombro y me armé de valor para verlos a ambos a los ojos.

—Sé que no es malo, Scott— acomodé la mochila en mi hombro —Aiden es el chico que le mete esas cosas crueles en la cabeza. Si conocieras a Ethan como yo...sabrías que es el chico más dulce de toda la escuela y no lastimaría a una mosca— miraba a un punto fijo recordando los pequeños momentos que tuvimos Ethan y yo cuando se portaba genial conmigo.

—Te olvidas la parte en la que le gusta Danny— mi nube de fantasía se rompió al igual que mi corazón y ladee una sonrisa —¿Estás segura de eso?— asentí y seguí caminando delante de los chicos y ambos soltaron un suspiro.

—Muy bien— fruncí el ceño confundida y detuve mi caminar para mirarlos —No puedo seguirte ocultando esto, Lynn— se llevó su mano despeinando sus cabellos y suspiro algo frustrado.

—¿De qué estás hablando, Scott?— ambos intercambiaron miradas llenas de complicidad, Stiles negaba con su cabeza mientras que Scott fruncía los labios...¿qué demonios está pasando? —¿Qué me están ocultando, chicos?— me acerqué hacia ellos y miré a ambos a los ojos muy intrigada —Saben que odio que me oculten cosas, díganlo de una vez— los fulminé con la mirada a ambos y cerraron los ojos mientras tomaban aire.