30

4.6K 627 519
                                    

Jóvenes restregando sus cuerpos con otros sin importarles nada. Solo se dejaban llevar por el alcohol y esas sustancias que te hacían feliz a un nivel inimaginable, pero solo por unas horas.

Había un pequeño grupo de adolescentes en una parte del local, todos conversaban y algunos recién compartían un momento juntos. Al parecer Seungmin conocía a media discoteca, saludaba a cada chico o chica que se cruzaba en frente de ellos.

Los habían dejado entrar debido a que el de cabellos morados conocía a Jackson Wang, quien era el hijo del dueño del local. Ventajas de tener buenos contactos.

-¡Hey! ¡Soobin!

El de cabellos grises se acercó al escuchar ser nombrado. Saludó a los que estaban sentados en los muebles y tomó uno de los tragos de la mesa. Notó a cierto castaño con el cual se había divertido un poco hace unas semanas, pero tenía algo diferente. Casi se podía sentir por completo el aroma de Hyunjin en él.

-Si quieren beber algo, hablen con el chico de pelo azul y díganle que invita dim sum.

-¿Dim sum?

-Es el código. -dijo guiñando un ojo.

Luego de eso, Jackson se fue con otro grupo de amigos. Iba de un lado a otro saludando a personas mientras tomaba tragos diferentes con ellos y probablemente buscando a alguien con quien divertirse.

En la mesa había un chico mucho más pequeño que todos quien era cuidado por Beomgyu como si fuera su hermanito.

-Hyuka, no tomes eso.

-Déjalo tomar, así aprende. -dijo Taehyun, pasándole una copa a su menor.-Pero solo uno, ¿eh?

Felix propuso ir a bailar a lo cual ni uno negó. Se movían al compás de la música y poco a poco, el grupo se iba volviendo más chiquito ya que encontraban a un nuevo acompañante para divertirse.

Habían bebido un poco de más, pero aún se sentían conscientes de lo que hacían así que por ahora todo estaba en orden.

"Jeongin, no tomes mucho"

-Sí, dame de ese.

El castaño regresó a la pista de baile con sus amigos y una copa en mano que contenía un líquido azul con un rosado fuerte de acompañamiento. Los jóvenes se sentían libres y emocionados.

Un poco de diversión no les vendría mal antes de entrar a la universidad.

─★ vampire ! ˎ´-

Un pelinegro se encontraba en la sala principal de la mansión un poco ansioso. Solo es una discoteca, ¿qué puede pasar? Jeongin sabe cuidarse y también tiene a sus amigos. Nada malo va a pasar, pero si reconozco el olor de un vampiro en él, juro que lo busco y lo mato.

Y así un montón de pensamientos similares pasaban por la mente del vampiro. Primero se repetía que todo estaba bien, pero en menos de un segundo podía plantear todo un asesinato a cualquiera que le haya dirigido la palabra a Jeongin o incluso solo si lo hubiera mirado de casualidad.

-Hey... ¡Hyunjin!

-¿Qué pasa?

Minho suspiró y dirigió su mirada a Chris, quien también se encontraba un poco perdido.

-¿Y a ustedes que murciélago les mordió?

Ambos chicos parpadearon y miraron a su amigo. Uno de ellos pensaba en su chico de olor a fresas de sonrisa tierna y el otro en su chico, si es que aún se podía decir así, de olor a vainilla con lindas pecas en sus mejillas formando constelaciones.

vampire; hyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora