—No está durmiendo, está hibernando.
—Es que te digo que lo único que hace es comer, cagar y dormir— Yoongi empieza a quejarse mientras lo acobija—no sé si quieras dormir un rato igual.
Quisiera, pero sueño no tengo y dormir en habitaciones de hotel no es exactamente atractivo para mi.
—¿Qué harás tú?
—Iré a dar una vuelta— suspira, rodea la cama y toma mi muñeca, llevándome con él fuera de la habitación— ven conmigo.
Escucho el coro de ángeles a mi espalda, este es un evento el cual recordar, la primera vez que Min Yoongi me toca— cuando me hizo el tatuaje no cuenta, eran fines profesionales— me pide que vaya con él, entro en mi faceta bobalicona y me atrevo a admitir que lo acompaño al fin del mundo si quiere.
El agarre en mi muñeca se desvanece poco a poco, veo la espalda de Yoongi cubierta en aquella clásica camiseta negra y luego mis dedos buscan los suyos, con miedo a que esto se vuelva raro e incómodo, entrelazo ambas manos, espero su reacción y grande es el alivio cuando aprieta nuestro agarre, baja la cabeza, sonriendo un poco.
Yoongi es... difícil de entender en ciertas ocasiones, un momento está coqueteandome y al siguiente parece arrepentirse de ello, así que la mayor parte del tiempo no sé cómo actuar con él, pues pienso que tal vez le gusto un poco, pero luego como que no.
Entonces no sé.
—Entonces... ¿Melínoe no participa más en estas cosas?— niega.
—Solo en categorías dónde no interfiere con los nuevos, pero si soy honesto, me da mucha pereza tener que venir hasta aquí solo para participar, así que técnicamente no hago nada.
—No me sorprende, viniendo de ti ya nada puede hacerlo.— abandonamos el hotel, tengo que llamar a Jungkook a las cuatro, se demora en despertar.
Tengo que bañarme otra vez y cambiar estos shorts por unos pantalones, en la noche si hace frío, no planeo congelarme las piernas, lo bueno de esta prenda es que es de tiro alto y se alcanza a notar el tatuaje que Yoongi me hizo, la mitad de este al menos, así que mientras caminamos entre toda la multitud y él me cuenta sobre los que reconoce, el tatuaje capta algunas miradas reconociendo el autor.
Además traigo al artista tomando mi mano y sonriéndome cada vez que suelto alguna ocurrencia o le digo que no entiendo.
—¡Eh! ¡Yoongi!— una chica grita su nombre, sale de la exposición de X&O's.
Yoongi se queja por lo bajo y me mantiene cerca, volteandose a saludar.
—Cuanto tiempo sin verte.— me mira, luego pasa de mi y continúa— sigues con ese color de cabello, no cambias.
—Pronto se irá, un gusto verte Jonseon.
—¿Y quién es tu amiga?— ah, desgraciada, me usa para mantenerlo aquí, hace un segundo me ignoró— nunca vienes acompañado.
—Pues porque rara vez vengo— se me escapa una sonrisa burlona, bajo la mirada al suelo y así me quedo hasta calmarme— supongo que participarán.
Sonríe.
—Claro, mis chicas están más que listas—observo detrás de ella, dos mujeres miran hacia acá— este año no hay tantos novatos, así que hay más oportunidades de ganar.
Lo dudo.
—Lo dudo, también compite Rabbit's y ellos son tu dolor de cabeza— eso le descopone un poco la sonrisa— no te confíes mucho y diviértete.
Nos despedimos, ya a una distancia buena de ella, me permito reír.
—Eres un desgraciado.
—Solo un poco, ella me desagrada bastante.
—Tu pareces agradarle muchísimo— hace mueca de asco, cambio el tema y pregunto para saciar mi genuina curiosidad— háblame de Rabbit's.
Gruñe, pero no con molestia, de hecho parece emocionado.
—Son buenísimos— comienza, eso ya es un halago enorme— son cuatro hombres, talentosos, cada uno tiene una técnica distinta, el porqué me agradan tanto es que además de ser buenos en esto, son carismáticos, no hay una pizca de soberbia en ellos, son muy payasos.
—¿Son amigos?— niega.
—No los considero amigos, pero si hablamos bastante y me agradan, deberían estar por algún lado cerca— suelta mi mano, rodea mis hombros en su lugar— por allí, te agradarán.
Rodeo su cintura y celebro en mi interior, caminamos un buen rato buscando a estos famosos chicos de los que tan bien habla mientras miro de vez en cuando la hora, no se me puede pasar llamar a Jungkook.
Identifico el puesto de ellos cuándo hay un logo de un conejo medio cute, medio demoníaco comiéndose a otro conejo. Me espanto.
—Siempre les he dicho que parece logo de carnicería, pero no me escuchan.
Entramos, Yoongi intenta gritar un saludo, pero la imagen que nos recibe deja atónito a cualquiera.
Hay un televisor.
Y están viendo Titanic.
Cantando My heart will go on desafinadamente.
En eso, uno de ellos pregunta.
—¿Porqué Rose es tan hija de puta?
—Porque sabe que está buena y se aprovecha de eso para embobar a Jack, además tiene dinero y todos sabemos que Jack es más pobre que la vida amorosa de Félix— que maravillosa conclusión— y Félix sabe que tengo razón.
—Vete a la mierda, Chris.
Me reí, delatando nuestra presencia.
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Mint and Tattoos»MYG
Hayran KurguMin Yoongi se ha dedicado al arte de los tatuajes desde los quince años, cuándo él y su mejor amigo se hicieron su primer tatuaje juntos- de manera ilegal, por supuesto- descubrió su enorme gusto por ellos, así que decidió hacer de ese gusto, un neg...