La General y La Princesa mayor [GL]

Capítulo 117: ¿Cómo distinguir entre hombres y mujeres?

Dicho esto, Xiang Jingyi palmeó el hombro de Lin Feixing sin nada más que decir.

Lin Wanyue finalmente puso sus propias emociones bajo control después de un buen rato, luego habló:

-Da-ge, tengo una solicitud.

-Dilo.

-Si el Comandante en Jefe… ¿podría Da-ge preservar la propiedad del Gran General en la ciudad capital?

-¿Xing-di desea usarlo en el futuro?

-No, solo para conservarlo, o sellarlo por completo. ¿Da-ge tiene alguna forma?

-Esto no es algo difícil, déjamelo a mí.

-Muchas gracias a da-ge.

Lin Wanyue fue a saludar a Li Shen, luego se fue después de despedirse. En el camino de regreso a la propiedad, mientras Lin Wanyue miraba el enjambre de tráfico en las calles de la capital, le resultó difícil reprimir el dolor en su corazón.

De repente se dio cuenta de que la gente a su lado siempre la abandonaba.

Su amada familia y todo el pueblo fueron los primeros en irse. Sus raíces, todas sus conexiones; todo se cortó en una mañana. Desde ese día en adelante, sin importar cuán vasto fuera el mundo, había perdido su hogar para siempre.
Pasó por todo tipo de dificultades para llegar sola a la frontera norte. Se arriesgó a ser condenada a muerte vistiéndose como un hombre para alistarse en el ejército. Ella había vivido con cautela, negándose a interactuar con los demás, todos excepto Lin Yu. Más tarde, recibió el favor del Comandante en Jefe Li Mu. Eventualmente comenzó a ver a Lin Yu como su propio hermano menor, mientras que Li Mu se convirtió en alguien que era como un padre para ella.

Entonces, ella también tuvo su propia casa. Su vida parecía encaminarse hacia una dirección positiva. Lin Wanyue vivió en tierra firme en ese período de tiempo, y también estaba feliz. Aunque las batallas ocurrían con frecuencia, ella había encontrado apoyo para su alma. Volvió a tener raíces. Volvió a tener familia...

Pero Lin Yu murió. La única amiga que había hecho como Lin Wanyue murió después de eso. Y ahora la vida del Comandante en Jefe pendía de un hilo... alguien importante para ella se marchaba una vez más.

La espalda de Lin Wanyue comenzó a encorvarse. Montado en el lomo del caballo, sosteniendo las riendas en sus manos, una mirada perdida apareció en sus ojos. Ella murmuró: "-¿Soy alguien que trae desgracia?"

De tener a perder. La estabilidad que finalmente había ganado, volver a perderla...

Lin Wanyue cayó en trance. Para cuando regresó a la finca de la Princesa Mayor como si hubiera perdido su alma, el cielo ya se había oscurecido.

Una vez que los sirvientes de la finca vieron que el Fuma había regresado, caminaron en dos filas detrás de Lin Feixing para iluminar su camino.

Un sirviente ya le había informado a Li Xian sobre el regreso de Fuma.

Lin Wanyue vió la luz de las linternas para caminar tranquilamente por un camino empedrado.

De repente, Lin Wanyue sintió que su entorno era mucho más brillante a la vez. Levantó la cabeza para ver que Li Xian estaba a poca distancia de ella. Dos filas de doncellas de palacio estaban detrás de ella con linternas que iluminaban el camino bajo sus pies.

Lin Wanyue permaneció en silencio mientras miraba a Li Xian. Li Xian se acercó tranquilamente, luego se detuvo a un paso de Lin Feixing. Ella llamó:

-Fuma.

La oscuridad de la noche tenía un poder único. Podría hacer que una persona afligida se volviera más frágil y también podría hacer que alguien tímido se volviera más valiente.