W O R T H L E S S

#Expediente 04: Caso grave.

Capitulo largo.

FLASH BACK

Siempre me han dicho que mi percepción de la amistad o del amor, esta mal.
Enserio lo esta?
No era la vida completamente subjetiva? Sobre la amistad, amor, humor tu decidías como aplicarla, como vivir la.

Por eso cuando descubrí mi quirk, a los 5 años, no pude estar mas feliz.
Acompañar a mis amigos, seres queridos donde sea, "camuflada" de distintas personas.
Era genial, ni siquiera la persona en cuestión se daba cuenta.
Siempre me mostré algo estúpida, poco atenta, como quieras llamarlo.

La gente alejándome, por tener un quirk de "villana" algunas personas siendo de una forma "educada mente" para que no me de cuenta.
Se sentían incómodos conmigo, asustados.
Aun así, tenia sangre de todas las familias, seres queridos de ellos, que fui recolectando en pequeños frascos que habían en el laboratorio del colegio, que robe cuando terminaban las clases.
Antes de rebelar mi quirk, claro así cuando ellos se intentaban alejar, yo estaba mas cerca de lo que pensaban.
Cuando se dieron cuenta de que yo siempre estuve con ellos, a los 7 años, no se lo tomaron bien.
Me golpearon, me maltrataron, me cortaron.
Eso probablemente fue lo que mas me marco.
Los cortes, en todas partes del cuerpo, se sentía muy doloroso.
Me gustaba.
Creí que era una manera de demostrarme afecto, cariño.
Esa era su forma de hacerlo.
Nunca lo vi de otra forma.

Mis padres tenían problemas, los escuchaba gritarse entre ellos todas las noches, discutir del trabajo, familia, amigos...
Puede que esa sea una manera de dar cariño, no lo se.
Pero luego algo ocurrió.
Madre murió.
La persona con la que siempre discutía, peleaba ect. Pero que al mismo tiempo era su "ancla" de su salud mental, desapareció.
Eso digo un psicólogo, luego hablare de ello.
No se si el la mato, sinceramente no es muy relevante, lo único que se que se quedo solo conmigo, no recibió mucho cariño "real", yo solo lo veía con pena.

Muchas veces ni nos hablábamos, llegaba del colegio y lo veía borracho en la mesa.
Después de eso, al ver mis cortes hechos por mis compañeros de colegio, decidió unirse al juego.
Sus cortes eran los que mas dolían, por lo que supuse que eran los que mas contenían amor.
Siempre iba orgullosa, mostrando los cortes siendo grandes o pequeños, era cariño maldita sea, como no se daban cuenta?
Eso me gustaba creer.
Que todos estaban equivocados, y yo encerrándome en mi burbuja imaginaria, pensando que todo estará bien, que todos me quieren, y así lo demuestran.

Hasta cuando se me ocurrió una buena idea.
Bueno, al principio lo parecía.

A los 9 años.

Fui al colegio con una navaja, una bonita navaja con el mango de madera naranja, contorneada de metal donde mas arriba podía pulsar un botón para que la hoja, rápidamente se habrá.
La encontré en en el cajón de mi padre, de hecho con ella era que el me cortaba.

-Recuerdos buenos~- Cante contenta entrando a la sala, y viendo como todos mis amigos se me quedaron viendo, con sonrisas algo tensas, sabiendo lo que harían esta tarde conmigo, en el baño, como todos los días.

Las clases terminaron, llegaron mis amigos mas fuertes, uno en cada lado, sujetando mis brazos, llevándome al baño donde me esperaban mis otros amigos, con un cuchillo de cocina, en total eran 6 contando los dos que me llevaron.

-Así que estas lista?- dijo mi mejor amiga, llamada Naria, una chica, algo pequeña con ojos amarillos y pelo verde eléctrico, mirándome con malicia.

Yo sonreí y le asentí, esto era placer.

Al parecer mi reacción les gusto tanto, que los dos que me trajeron me tomaron de los brazos, sujetándome, para que ella me diera un puñetazo en el estomago, haciendo que inconscientemente me arrolladora mientras me intentaba sujetar de algo, sintiendo dolor.