🐾 Prefazione

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Kunugigaoka

Naomi salió del instituto acompañada por dos amigas, una a cada lado. Las tres hablaban animadamente cuando la joven se encontró con su novio en la entrada.

-¡Ken! - Exclamó sonriente. Se acercó animadamente y le dio un abrazo.

-H-Hola - murmuró Kaneki tímidamente.

-Haru, Koi, nos vemos mañana - se despidió con una sonrisa.

-Adiós, Naomi - dijeron ambas a la vez, haciendo una reverencia.

La chica se despidió de la misma forma y luego miró al chico.

-H-He venido por si querías que fuésemos al cine - propuso Kaneki. - Se que te gustan más las películas que los libros.

-Sí, me encantaría, Ken - sonrió entrelazando el brazo con el suyo. - ¿Vamos?

-Vale - contestó él, algo sonrojado.

Naomi y Kaneki llevaban saliendo medio año. Se habían conocido gracias a su amigo en común Hide. Naomi y él eran vecinos, así que decidió presentársela a su amigo.

No tenían mucho en común, ella era una niña pija y bien que iba a un instituto privado y tenía amigos similares a ella; mientras que Kaneki era un chico tranquilo y normal que iba a un instituto público y solo había tenido un amigo en toda su vida.


Noche

Kaneki acompañó a Naomi hasta su casa.

-Me lo he pasado muy bien, Ken - sonrió ella. - Gracias por invitarme.

-De nada, yo también me lo he pasado muy bien - contestó con una sonrisa.

Naomi se acercó hasta la puerta y abrió con sus llaves. Nada más sentirla, su perra Rose salió a buscarla.

-Hola, hola - saludó ella acariciándole el pelo.

-¿Naomi? - La llamó su padre, acercándose a la puerta.

-Hola, papá - saludó la chica.

-Señor Namikawa - dijo Kaneki haciendo una reverencia.

-Hola, Kaneki - saludó el hombre.

De pronto, una mujer joven y rubia se acercó a ellos.

-Reiji, yo me voy ya - dijo ella.

-Bien, ya nos veremos - se despidió el hombre.

La joven y Naomi hicieron una reverencia, despidiéndose la una de la otra. La mujer se fue.

Naomi giró y miró a su padre.

-Papá, ¿me dejas que me despida de él? - Pidió la chica.

-Claro, nos vemos dentro - dijo entrando de nuevo a la casa. - Rose, venga.

Naomi se giró, miró a Kaneki y le sonrió.

-¿Nos vemos mañana en el cumpleaños de Hide? - Preguntó él.

-Claro - asintió ella.

-Por cierto, ¿la de antes... era tu profesora de matemáticas? - Mencionó él.

-Es mi nueva madre - bromeó ella.

-Bueno, con la anterior duró dos semanas - rió Kaneki.

-Mejor, no me caía muy bien - sonrió la chica. - Nos vemos mañana, Ken.

-Sí, hasta mañana - contestó el chico.

Se miraron unos segundos y ella le dió un corto beso. Él se giró, sonrojado, y se fue a su casa, mientras que Naomi entró a la suya.


Minutos más tarde...

Kaneki llegó a su casa, se quitó los zapatos y la chaqueta. De pronto, escuchó su móvil sonar.

-Hide, hola - saludó él.

-Kaneki, corre, pon las noticias - pidió su amigo alarmado.

-Sí, sí, voy - accedió mientras encendía el televisor. - ¿Qué ha pasado?

-Tú pon las noticias - insistió Hide.

El chico buscó un canal de noticias y subió el volumen.

-El empresario Renji Namikawa ha sido detenido hace unos minutos por la CCG tras descubrir que su hija adoptiva era una ghoul - informó el presentador. - La joven de 16 años sigue en busca y captura.

-¿Na-Naomi es... un ghoul? - Murmuró Kaneki, dejando caer el teléfono.

YOUNGBLOOD 🐾 Ken Kaneki / Ayato KirishimaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora