Hope

05

La puerta se abrió abruptamente  causando que la castaña golpeara la frente que la Doctora alejándose.
-Mierda- Alex presiono su frente mientras Robín corría a su lado.
-¡Lexi! ¡Despertaste! ¿Te sientes bien? ¿Como esta tu suero?- Ignoro a la castaña quien también presionaba su frente ahora roja y totalmente incomoda.
-Estoy bien Robín- Murmuro levantando su mano libre para ser presionada por su mejor amiga.
-Mas te vale recuperarte idiota- Beso su frente sonriendo -Me diste un susto de muerte cuando llegaste toda ensangrentada, tuve que rogarle a Foreman que me permitiera estar en tu cirugia- Hizo un puchero y acaricio su mano -Por cierto Eliza esta aquí llego ayer en la mañana, tuve que obligarla a que se vaya a descansar a tu departamento o le saldrían raíces aquí- Rio y observo a Sam -A quien no pude convencer es a la señorita Arias- Alex frunció el seño observándola.
-¿Hace cuanto estas aquí?
-78 horas si mi memoria no me falla- Respondió la morena observando sus maquinas.
-No podía irme si sabia que estabas aquí- Mordió su labio y Alex tomo su mano.
-¿Y Rubi?- Sam negó.
-Se quedo conmigo un tiempo pero insistí en que se quede con Lena y Liv, por cierto ellas querrán saber que ya despertaste- Tomo su teléfono y sonrió antes de salir de la habitación.
-¡Aucht!- Grito Alex cuando Robín pellizco sus piernas.
-¡¿Quieres decirme en que carajos pensabas?! ¡¿Por que demonios te interpones en el camino de las balas?!- Volvió a pellizcarla con fuerza.
-¡Ay! ¡Basta!- Ordeno moviendo sus piernas lentamente -Lo siento ¿Si? No pensé, simplemente actué, no planeaba terminar así, no planee nada en absoluto- La morena dejo de pellizcarla y tomo asiento frente a la cama.
-Casi muero al verte así, no quiero verte en ese estado nunca, tienes prohibido volver a aparecer así ¿Entendido?-Alex quiso quejarse pero abandono la idea cuando la Doctora parecía volver a pellizcarla.
-¡Bien! No lo hare otra vez- Intento cubrir sus piernas con las mantas.
-Eso quería escuchar- Saco su teléfono y parecía intentar sacarse una foto -¡Hola Eliza! Mira a quien tengo aquí- Apunto la pantalla a Alex quien sonrió al ver en la pantalla a su madre.
-"¡Alex! ¿Como estas mi niña?" Veía la pantalla borrosa aunque supo identificar como su voz se cortaba.
-Estoy bien mamá, lamento haberte preocupado- Intento sonreír.
"Estaré allí en un segundo pequeña, voy a cuidarte"
-Te amo madre- Sonrió finalmente.
"Te amo cariño"- Finalizo la llamada.
-
-¿Entonces ella ya esta despierta?- Lena sostenía su teléfono -Eso es genial Sam, iremos en unas horas, también te quiero- Colgó y Liv la observaba ansiosa.
-¿Ella esta bien? ¿Despertó?- Frunció el ceño preocupada, sentía su corazón acelerarse con cada minuto.
-Ella acaba de despertar y esta bien cariño- Sus hombros se relajaron visiblemente.
-¿Podemos ir a verla?- Lena se sorprendió, su hija estaba realmente preocupada por aquella Doctora.
-Creo que es mejor dejarla descansar, encontraremos un día para visitarla, no hay tanta prisa- Sonrió tomando su mano.
-Necesito verla ahora, no he dormido bien desde lo que sucedió, necesito asegurarme- Era casi una suplica.
-¿Por que tan preocupada?- Lena sabia que aquella mujer había salvado la vida de su hija, pero Liv parecía demasiado desesperada por ella.
-Salvo mi vida mamá, es lo menos que puedo hacer por ella- Frunció el ceño.
-Lo entiendo cariño, ve a cambiarte, le diré a los guardias que preparen la camioneta- Liv asintió y prácticamente corrió a su habitación.
Por alguna razón que aun no comprendía no había hablado de sus pesadillas donde la sangre corría por sus dedos mientras sostenía a aquella mujer, aunque solo era una imitación de la realidad, ya que cuando la sostenía la mujer llevaba un uniforme negro, el cabello rojo y corto, recordaba sus detalles, era en lo único que podía concentrarse para evitar ver la sangre.
-
-Mama estoy bien- Sonreía la doctora mientras su mejilla era besada muchas veces.
-Necesito asegurarme- Murmuro abrazando sus hombros -Mi pobre bebe, los nervios no me dejaban descansar- Unió sus frentes.
-Lamento preocuparte madre- Sonrió besando sus manos.
-Nada de eso cariño, me contaron lo que hiciste, estoy orgullosa de ti- Las mejillas de Alex se sonrojaron y la puerta se volvió a abrir.
-Lo siento, después de llamar a Lena fui a buscar café- Le entrego uno a Eliza y sonrió.
-Esta niña se ha comportado maravillosamente, no te ha dejado sola en ningún instante, estoy muy agradecida contigo Sam- La castaña se sonrojo tomando su café.
-Gracias Sam- Ella asintió en silencio.
-No hay de que- Murmuro mientras la puerta se abría.
-Doctora Danvers, la señorita Luthor y su hija se encuentran aquí- Sonrió la enfermera -Y solo pueden estar dos personas en la habitación.
-Déjelas pasar, Sam y yo terminaremos los cafés afuera- Beso la frente de Alex antes de retirarse.
-Te veo en un rato- Sam sonrió con sus mejillas sonrojadas.
De inmediato por la puerta aparecieron Liv y Lena, la mas joven camino lentamente mientras sus ojos se llenaban de lagrimas, Alex estaba conectada a varias maquinas, su piel aun estaba demasiado pálida y amarilla por las cirugías, estaba débil y aunque no lo dijera en voz alta todo su cuerpo dolía, la CEO había intentado evitar que Liv no visitara el hospital para ahorrarle tal imagen, pero una vez que la Doctora estuvo despierta, sabia que era inevitable.
-Ey- Sonrió Alex al verlas en silencio -¿Como te sientes?- Esas palabras fueron suficientes para que la castaña comenzara a llorar y se acercara a ella rápidamente y abrazándola con fuerza.
-Cariño despacio- Lena intentaba no sonar sorprendida.
-Esta bien, no me duele- Alex le sonrió y con esfuerzo acaricio la cabeza de la castaña.
-Lo siento, lo siento, te desobedecí, lo siento- Murmuro mientras escondía la cabeza en su cuello.
-Esta bien, no fue tu culpa, escúchame estoy bien- Sonrió.
-Lo lamento mucho- Levanto la cabeza y seco sus lagrimas con sus puños en un gesto demasiado adorable.
-No haz echo nada- Alex sonrió y observo la habitación antes de mover su mano hacia la pequeña bolsa que Robín le había traído -Aquí esta- Saco su mano y le entrego un pequeño anillo.
-El Mayarah- Susurro Liv sosteniendo el pequeño objeto en sus manos.
-¿Sabes que es?- Alex frunció el ceño pero la castaña no le prestaba atención.
-¿Liv?- Lena llamo su atención tocando su hombro.
-Lo siento, no lo conozco, no se de donde saque eso, tal vez lo vi en la escuela- Explico sin alejar la vista del anillo.
-Es tuyo si lo quieres- Alex le sonrió -¿Lo quieres?
-Gracias- Asintió, Alex tomo el anillo y lo coloco en su dedo anular causándole un escalofrió.
-¿Doctora Danvers?- Lena llamo su atención cruzando sus brazos.
-¿Si?- Frunció el ceño.
-Creo que es hora de que Liv y yo nos despidamos- Murmuro acercándose mas a su hija.
-¿Ahora mamá?- Liv refregó sus ojos ya secos.
-Si ahora, nos vamos- La castaña se separo de Alex sonriéndole mientras Lena se acercaba a ella -Gracias otra vez, por ayudarnos esa noche.
-Salvarnos- La interrumpió Liv.
-Si, salvarnos- Sonrió mientras Alex asentía.
-No fue nada, lo volvería a hacer- Lena sonrió tomando a Liv y marchándose rápidamente.
-¿Y? ¿Como la viste?- Sam jugaba con sus manos ansiosa.
-Liv espéranos en el auto- La castaña asintió y camino hacia el auto dejándolas solas -Es extraña- Sam frunció el ceño.
-¿A que te refieres?
-Bueno, empezando por el echo de que Livet se comportó muy cercana con ella, de que ella le regalo un anillo de oro y de que no ha echo otra cosa que comportarse de maneras cuestionables- Cruzo sus brazos molesta.
-¿Manera cuestionable?- Repitió confundida -Lena esa mujer salvo la vida de tu hija, tu y yo sabemos que si ella no hubiera intervenido, la dirección de esa bala era su cabeza- Lena cerro sus ojos, mientras mas pronto pueda olvidar ese detalle mas podría dormir por la noche.
-Sam... no se te hace un poco extraño el echo de que precisamente la noche donde ella aparece en la reunión privada, es en donde nos atacan y precisamente sea ella quien nos salva a nosotras- La castaña comenzó a reír sarcásticamente.
-No puedo creer lo que estas diciendo, esa mujer tuvo dos cirugías y 78 horas inconscientes para que tu estés diciendo estupideces.
-Solo digo que no me gusta que le regale cosas a mi hija- Suspiro intentando calmar a su amiga.
-Es tarde, le regalo un anillo y la vida- Gruño alejándose.
-Sam, espera no te vayas.
-No quiero oírte ahora mismo, pasare por Rubi a la escuela, no es necesario que pase contigo esta noche- Se alejo mas rápido dejando a la ojiverde sola.
-Mierda- Murmuro caminando hacia la parte detrás de la camioneta.
-¿Todo esta bien?- Liv tomo la mano tensa de su mano.
-Si... lo estoy- Sonrió a medias -Si quieres puedo quedarme con ese anillo, no tenias que aceptarlo- Observo su mano con la joya brillando.
-Esta bien, me gusta- Sonrió y llevo su mirada hacia la ventanilla ignorando el nudo que había creado en su estomago.
-
-¿Te sientes bien?- Alex tomo la mano de Sam notando como temblaba.
-Debería preguntártelo yo ¿No crees?- Intento bromear pero su voz salió mas tensa de lo que hubiera querido.
-¿Sam? ¿Que sucede?- Apretó su mano.
-¿Con que intención le diste el anillo a Liv?- Alex frunció el ceño.
-¿Disculpa?- Alejo su mano de ella.
-¿Que intención tenias para darle ese anillo?- Dijo aun mas seria.
-¿Estas insinuando que yo?.. por dios tiene 14 años, que idiotez mas grande- Su cara se enrojeció de ira -Le di ese anillo porque la vi demasiado afectada, la niña llego llorando y aferrándose a mi brazo como si su vida dependiera de ello, según lo que me contaron caí sobre ella y la llene de mi sangre, discúlpame mucho si intente contenerla de alguna manera- Prácticamente se lo había gritado, Sam trago saliva con el rostro rojo, intento decir algo pero solo comenzó a tartamudear y Alex levanto su mano -Vete.
-No puedo irme, le dije a tu madre que me quedaría contigo- Alex negó.
-Puede retirarse señorita Arias, le agradezco sus atenciones pero ya no son necesarias, puede irse- Sam iba a quejarse cuando la puerta se abrió, una mujer baja, de tez morena, cabello negro y una placa en su cinturón observo a Alex.
-Danvers...- Susurro con los ojos brillando acercándose a la Doctora.
-Maggie- Sonrió recibiendo el abrazo de la policía.
-Dios te ves terrible- Acaricio su mejilla -Lo siento, no te vi acompañada, soy la oficial Sawyer- Extendió su mano pero Alex alzo su mano para bajar su brazo.
-Ella ya se iba- Ignoro como el rostro de Sam se oscureció.
-Si, yo me iba- Susurro -Cuídate mucho- Salió de la habitación demasiado rápido.
-Eso fue grosero Alex- Maggie la regaño.
-Se lo merecía- Giro sus ojos -¿Que estas haciendo aquí?
-Necesitaba verte, me has tenido con el Jesús en la boca- Sonrió tomando su mano -Estas loca Danvers.
-Hice lo que tu haces- Sonrió.
-Yo soy policía, tu estas loca- Beso su frente -Totalmente loca- Susurro.

-

"¿Quien soy Alex?"- Otra vez esa niña invadía sus sueños, pero era diferente, ahora se veía un poco mas grande.
"Mi hermana"- Respondió esta vez acercándose a ella y la niña rio.
"¿Cual es mi nombre?"- Cambio su pregunta.
"Yo... no lo se"- Bajo la cabeza con vergüenza, pero las pequeñas manos se posaron en sus mejillas levantando su mirada.
"¿Cual es mi nombre?"- Sonrió.
"¿Livet?"- Dudo pero la niña rio y negó.
"Ella puede ayudarte"- Susurro.
"¿Quien mas puede?"- Abrazo a la pequeña.
"Mmm... no te llevas bien con ella"- La pequeña sonrió.
"¿De quien hablas?"-
"Esto te ayudara"- Otra vez coloco algo en su mano "Ahora despertaras"
"¿Puedo abrazarte un poco mas?" La pequeña rubia se aferro a ella con fuerza hasta que Alex abrió sus ojos.

-¿Ya despertaste? Estas de descanso, no tienes que levantarte tan temprano- Maggie sonrió, llevaba su primera semana fuera del hospital.
-La costumbre podría ser ¿Tu que haces?- La oficial estaba peinando su cabello.
-Tengo un caso, acaban de llamarme, Robín esta inconsciente en la sala, recuerda tomar tus calmaste- Le guiño un ojo y salió por la puerta.
Alex al fin dejo de presionar su mano izquierda, en ella ahora tenia en su mano una bola de papel, despacio desenvolvió el papel, solo tenia escrito un nombre y numero.
-¿Doctora en Psicología F.Q?- Frunció el ceño y tomo su celular mientras marcaba esos números -El numero no existe- Susurro.
-¿Que haces?- Maggie se acerco a ella.
-¿Podrías investigar a alguien?- La mas baja frunció el ceño -Acabo de encontrar esta tarjeta, pero no recuerdo de donde la saque ¿Tu podrías ubicarla?.
-Lo intentare Danvers- Suspiro tomando la tarjeta en sus manos -Debo irme ahora, volveré mañana ¿Esta bien?
-Claro- Alex sonrió cuando la oficial beso su frente y se despidió tomando su chaqueta.

-
-La tia Sam esta molesta contigo ¿Verdad?- Liv se sirvió su segundo desayuno.
-¿Por que lo dices?- Lena bebió de su café.
-Ni siquiera te habla, ha pasado los últimos diez días enviándote recados con Jess- Levanto sus hombros.
-¿Y tu como sabes eso?- Cruzo sus brazos.
-No lo sabia, acabas de confirmarlo- Sonrió mordiendo su Hot Cakes.
-Pequeña genio- Empujo su hombro.
-¿Por que pelearon?- Su madre observo al balcón y suspiro.
-Creo que tal vez pude haber dicho ciertas cosas que pudieron molestarla.
-¿Por que no te disculpas?
-Aun no estoy segura de no tener la razón.
-¿Fue por Alex?- Lena frunció el ceño -La doctora.
-¿Como lo sabes?- Liv sonrió -¿Acabo de confirmártelo?- Asintió -Bien, si fue por ella.
-¿Por que no te agrada? Hasta al tío Lex le agrada, le envió siete ramos de flores al hospital.
-Tengo una sensación extraña con ella- Bebió su café -Pero mientras estés lejos de ella, estoy bien- Liv sonrió incomoda y reviso su teléfono.
-La tía Sam esta abajo- Tomo su bolso y beso la mejilla de Lena -Te veo en la noche.
-Intentare llegar temprano hoy- Sonrió.
-Siempre dices eso, sabes que no me molesta- Giro sus ojos sonriendo antes de irse.
-Hola sobrina- Sam sonrió encendiendo el auto.
-Hola Tía Sam, Rubi- Saludo con su puño.
-¿Hiciste la tarea de matemáticas?- Liv giro sus ojos y le entrego una hoja -Una heroe sin capa- Sonrió y aprovecho el descuido de su madre para deslizar un papel en su mano -¿Ya no te debo nada?-Susurro.
-Tu deuda acaba de ser saldada- Guardo el papel en su bolsillo mientras revisaba su teléfono.
-¿Liv aun tienes guardias?- Sam observo la camioneta negra que los seguía.
-Si y un chip en mi bolsa que pueden rastrear- Suspiro.
-¿Estas bien con eso?
-Mama se siente mas tranquila- Hizo una mueca.
-Si no te gusta, deberías decirle- Rubi asintió ante las palabras de Sam.
-No quiero causarle problemas justo en este momento, le diré una vez que las cosas se tranquilicen- Sonrió tomando su bolso y besando la mejilla de su tía.
-Que tengan un lindo día- Rubi se acerco para abrazar el cuello de su madre y ambas bajaron del auto.
-¿Lista para un día agitado?- Liv empujo el hombro de su prima.
-Aun no puedo creer que me hayas vendido la tarea, soy tu socia y tu prima- La castaña levanto sus hombros.
-No mezclo negocios con familia, querías la tarea de matemáticas y la tienes- Sonrió.
-¿Pero porque tu querías el numero de la Doctora Danvers?- Frunció el ceño.
-Salvo mi vida Rubi, solo quiero saber como esta- Mintió sin dejar de sonreír y siguió su camino -¿Tienes la lista?
-Sip- Saco un cuaderno -Lauren quería su tarea de Historia, Austin Química, Jonas Español, Mia la de informática, Brooke su trabajo de física y los hermanos Morgan las instrucciones de su proyecto de la feria de ciencias- Leyó en voz alta.
-Entonces vamos a sus casilleros- Sonrió a sus profesoras.
-Si alguien nos descubre alguna vez, nos van a expulsar- Liv giro sus ojos y sonrió.