O21 | YOU ARE AN EXCEPTION

5.5K 253 33
                                    

Bucky Barnes

Era muy común que aquel bar se llenará de gente las noches en fin de semana

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Era muy común que aquel bar se llenará de gente las noches en fin de semana. Allí, los solteros disfrutaban una buena copa con sus más cercanos amigos, y Bucky no era una excepción.

Una noche ingresó al bar, seguido de Sam y Steve. Lo único que Bucky pretendía allí era pasar un buen rato con sus colegas después de tanto tiempo sufriendo. Aún tenia miedo del exterior, lo admitía, pero con sus amigos a su lado todo se veía más seguro.

Habían optado por la mesa más lejana de todas. Querían pasar un momento tranquilo y pasar desapercibidos ante esa gente, principalmente Bucky, el temía que la gente lo reconociera y comenzara a susurrar cosas sobre él relacionadas con su pasado.

Todo iba bien. Con el paso de los minutos Bucky había comenzado a relajarse hasta el punto de soltar una fuerte carcajada ante una de las anécdotas de Sam. Hasta que sus ojos se movieron al pequeño escenario del lugar donde dieron contigo, y le fue imposible apartar la mirada de ti por el resto de la noche.

Tu voz era dulce y melodiosa. Tu canto denotaba lo mucho que disfrutabas aquello, te salía tan natural y bello. No pudo reconocer la canción que tu voz emitía, pero estaba seguro de no poder borrarla de su cabeza por el resto de la noche.

En un momento dado, sus ojos chocaron, dándoles escalofríos a ambos. Tú querías apartar la mirada de él pero no podías, quien era aquel hombre tan llamativo? Estabas segura que lo conocías de alguna parte, pero tu mente estaba demasiado ocupada en aquel momento como para recordar.

Al terminar con tu demostración Bucky no pudo evitar ir tras de ti, con la escusa de que iría al baño. Su antiguo yo de los 40s parecía haber vuelto por unos segundos, sintiéndose confiado y totalmente seguro, pero cuando te vio allí, a pocos metros de él, la inseguridad regresó. Eras más hermosa de cerca, además las carcajadas que salían de tu boca junto al leve sonrojo en tus mejillas lo habían dejado embobado. Sin dudas era la mujer más hermosa que había visto en su vida.

Notaste un intenso par de ojos pegados en ti y, al girar, sus miradas volvieron a conectar, haciendo sonreír a ambos por inercia. Interrumpiste a tu amigo y le diste una mirada rápida que lo hizo comprender todo, en menos de dos segundos ya se hallaban completamente solos.

Bucky dudó en irse, pero al verte acercarse a él su cuerpo quedó totalmente paralizado en su lugar.

-hola- le sonreíste, al llegar a unos pocos pasos de él -soy Millie- Bucky tembló cuando su mano tomó la tuya, en un estrecho saludo. Volvió a dudar, y si salías corriendo al saber su nombre?

-Bucky- respondió, con una sonrisa de lado -no quería incomodarte, solo...quería elogiarte por tu increíble voz, sinceramente jamás había escuchado una voz tan dulce como la tuya y quedé muy deslumbrado- el Bucky de los 40s estaba aplaudiendole al Bucky actual.

-oh, eso es muy dulce de tu parte- sonreíste -la verdad es que nadie se había tomado la molestia de elogiar mi trabajo...muchas gracias Bucky-

Y así comenzó una bonita relación entre ellos. Bucky visitaba aquel bar cada noche solo para verla y oír su hermoso cantar. Tenias una voz excepcional que encantaba a Bucky cada que te escuchaba. Podía oírte por años enteros sin cansarse jamás. Al finalizar con tu pequeño show, Bucky siempre se tomaba el tiempo de pensar en un nuevo halago hacia ti. Era una rutina que ambos amaban y que no querían perder.

Hasta que al fin Bucky tuvo las agallas para invitarte a salir, unos simples tragos después del show de cada noche. Aceptaste inmediatamente y la sonrisa de ambos no se borró en toda la noche. El alcohol hizo efecto y la atracción que había entre ustedes se reflejó en una apasionada noche llena de caricias íntimas y gemidos suaves al oído.

Aquella noche fue tan intensa e inolvidable que se les fue imposible no repetirla cada vez que se veían. Había una fuerte conexión entre ustedes, algo que pasaba de lo sexual y que era difícil de evitar. Bucky parecía más vivo e incluso actuaba como el mismo James de los años 40s. Mientras que tú te sentías más segura de ti misma, logrando que varios interesados te llamasen para cantar en eventos privados.

Todo iba bien. Hasta que una llamada descolocó todo el muro de felicidad que Bucky estaba construyendo.

-Bucky debo irme- un sollozo escapó de tus labios, preocupando a Bucky de inmediato.

-que? Muñeca dime dónde estás, iré y hablaremos sobre lo que está pasando porque en verdad no entiendo nada- el de brazo de metal comenzaba a tener una horrible sensación en su pecho.

-Bucky...no puedo decírtelo, me están siguiendo y cuando me encuentren no tardarán en ponerme tras la rejas- murmuraste, el miedo era notable en tu voz.

-quienes!?- el soldado del invierno no tardaría en aparecer si alguien llegaba a lastimar a su chica. Te tomaste unos momentos para responder, pero al final lo hiciste, confiabas en él ciegamente y después de tantos meses juntos no había nada que pudieses ocultarle.

-tus amigos...los vengadores-

__

-te irás?- murmuró, Bucky, sin apartar la mirada de ti. Te movías nerviosa por toda la habitación, mordiendo tus uñas en un gesto de ansiedad y miedo.

-debo hacerlo, no quiero acabar tras las rejas por algo que no hice- dijiste, mirándolo. Su pecho se infló al notar las lágrimas descendiendo por tus mejillas, odiaba verte llorar, odiaba verte mal, y las pocas veces que te había visto de este modo lo destruyeron por completo.

-donde irás? Quiero saber de ti, Millie...-

-no puedo decirte. No quiero que te tachen de traidor por mi culpa- negaste, tomando tus cabellos con estrés. La situación los estaba consumiendo a ambos y era algo horrible. Bucky se acercó suavemente a ti, colocando una mano en tu mejilla, retirando las lágrimas y proporcionando caricias a la zona.

-confias en mi?- preguntó. Asististe -entonces dime tu plan, déjame apoyarte, Millie, porfavor...-

-me iré del país. Comenzaré de cero, lejos de aquí, sin que nadie me reconozca o sepa de mi- comenzaste -con el tiempo, quizá, los vengadores se olviden de mí y en ese momento contactaré contigo. No quiero que me esperes, Bucky, pero necesito oír tu voz para sentirme tranquila...me volví tan dependiente de ti-

-yo también- contestó, el castaño -y no me imagino tanto tiempo sin ti a mi lado, es por eso que...iré contigo- soltó. Tus ojos se abrieron enormemente, sin poder creer lo que Barnes decía; era capaz de dejarlo todo aquí para irse contigo?

-pero Buck, soy una criminal, y tú trabajo es precisamente acabar con criminales, que pasará con eso, uhm?- preguntaste -no quiero arrastrarte a eso otra vez...- bajaste la cabeza. Él se acercó a ti y besó suavemente tus labios, transfiriendote confianza y seguridad.

-hey, encanto, tranquila, si?- colocó un mechón de cabello detrás de tu oreja -tu serás la única excepción que haga, te seguiré aunque eso me asegure la muerte...porque me enamoré de ti, Millie-

-que?-

-...y no quiero dejarte ir, no voy a arriesgarme a perderte- negó él, colocando su frente contra la tuya -escaparemos juntos si hay que escapar, y en caso de que nos atrapen...nos atraparán juntos entonces-

Y esa noche ambos se volvieron criminales para la justicia y los vengadores, pero también se volvieron el mundo, el sol y las estrellas ante los ojos del otro.

__

Lamento la demora bbys, aquí les dejo este os, espero que lo disfruten! Besitossss

❝𝗢𝗡𝗘 𝗦𝗛𝗢𝗧𝗦❞  SEBASTIAN STANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora