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Y otra vez lo mismo de siempre. Una nueva pelea con Bucky se avecinaba solo porque, al parecer, dije algo fuera de lugar en la cena con los vengadores.
Últimamente las cosas no iban muy bien entre nosotros. Siempre alguno de los dos buscaba alguna excusa por la cual pelear. Cada día era el mismo cuento que el anterior y ambos sabíamos que al día siguiente se repetiría una vez más.
Muchas veces decíamos cosas hirientes de las que luego nos arrepentiamos, pero jamás nos disculpabamos, simplemente fingiamos que nunca pasó. Pero la espinilla de las palabras siempre quedaba clavada en el pecho.
No recordaba en qué momento nuestra relación se convirtió en esto, de hecho rememoraba cada noche los momentos en los que conversábamos con Bucky sobre un futuro juntos; viajes, una gran casa, adoptar una mascota, incluso el matrimonio. Pero ahora todo aquello se veía muy lejano.
-no debiste decir eso! Acaso viste la cara de Barton!? Fue muy jodido de tu parte!- exclamó, una vez llegamos al departamento que compartíamos.
Dejé el bolso sobre el sofá de un tirón y quité mis tacones bruscamente, tirandolos por ahí. Mi ignorancia pareció enfurecer aún más a Barnes puesto que soltó una risa seca mientras tomaba su cabello con furia.
-eres tan inmadura-
-cualquiera es inmadura frente a un fósil de 80 años- respondí, buscando algo de agua en la nevera. Bucky ahogó un jadeo al oír mis palabras, incluso creí haber visto como se colocaba la mano en el pecho. Estúpido y sensual idiota.
-qué dijiste?- preguntó, en tono dramático casi de teatro. Rodé los ojos y guardé una carcajada. Había decidido dejar de pelear y disfrutar viendo a Bucky siendo el dramático que siempre fue.
-lo que oíste- contesté, para luego darle un sorbo a la botella entre mis manos. El agua fría inundó mi garganta y pasó con facilidad por ella. Solté un suspiro, aliviada de cubrir mi sed y descubrí a Bucky siguiendo cada uno de mis movimientos.
-lo dices en serio?-insistió, una vez volvió de su trance. Solté un bufido y dejé la botella sobre la encimera, girando a verlo.
-Acaso la vejez no te permite oír bien? Ya te dije que iba en serio- ya harta de su insistencia decidí que lo mejor sería ir a la cama y relajarme entre mis suaves mantas.
La verdad es que aquella cena fue tan aburrida como incómoda. Al parecer todos notaban la tensión entre Bucky y yo por lo que todos temían hacer algún comentario y que éste se malinterprete, logrando que se desate le tercer guerra mundial allí mismo. Es por eso que declaré esta noche como la noche más aburrida junto a los vengadores, algo raro teniendo en cuenta que Thor y Tony estuvieron allí y ellos siempre saben como alegrar el ambiente.
Sin embargo esta noche Bucky y yo no parecíamos ser los únicos en llevar un conflicto, puesto que, por la manera en la que Pepper observaba a Tony, es más que claro que algo no iba bien entre esos dos.
-de veras no puedo tomarme en serio tus palabras- Bucky ingresó al cuarto, observándome raro, como si estuviese esperando que yo gritara "sorpresa, todo se trataba de una broma, no decía lo de tu vejez en serio" sin embargo yo iba muy en serio, tan en serio.
-ya me hartaste- terminé de colocarme el pijama y me fundi en la comodidad de mis sábanas. Contuve mis ganas de sacar las garras y arañar su rostro para hacerle entender que hablaba más que en serio. Verán, ser hija de Wolverine tiene ciertas ventajas y una de ellas es las fuertes y afiladas garras que heredé de mi padre.
-Alexa...-
-volveremos a hablar cuando tus dos brazos sean de carne y hueso- me giré, dándole la espalda. Al instante en el que dije eso me arrepentí, sabia que era un tema serio para Bucky y yo acababa de usarlo como burla. Iba a disculparme, dejar el orgullo de lado pero su carcajada me sacó de órbita.
Acaso se estaba riendo? Porque siempre que hablábamos de su brazo de metal parecía un tema bastante duro para él, no comprendo que cambió ahora.
Giré mi cabeza bruscamente, con el ceño fruncido a más no poder. Estaba más que confundida. Sin embargo sus carcajadas eran contagiosas y poco tiempo después me vi riendo junto él, mientras Bucky caía a mi lado en la cama, soltando aún algunas carcajadas pero con menos fuerza que las anteriores.
-e-ese si que es-tuvo muy bueno- habló con dificultad a causa de la risa. Sentí lágrimas acumuladas en mis ojos a causa de las risotadas que escapaban de mi boca, tanto alcohol habíamos digerido para encontrarnos así? Al parecer si.
Luego de varios minutos riendo, haciendo extrañas muecas y hablando con algo de dificultad, nos sumimos en un silencio donde apenas se oían nuestras respiraciones y pequeñas risas que se escabullían de nuestros labios.
Giré mi cabeza y lo pillé mirándome. Ambos rostros estaban serios, en busca de las palabras adecuadas para decir. Pero me adelante, necesitaba expresarme.
-Bucky, que nos pasó?- pregunté, más no esperé tener respuesta antes de continuar -antes los momentos como este eran continuos en nuestra relación, ahora son apenas perceptibles- mi voz se cortó ligeramente pero ignoré aquello -ya no quiero pelear más, Buck-
Él soltó una larga respiración mientras me atraía a su pecho y acariciaba mi cabello con suavidad. Sus labios proporcionaron pequeños besos a mi frente y yo comenzaba a soltar unas diminutas lágrimas.
-no esperaba esto en nuestra relación- admiti, quebrandome por completo frente a él. Bucky me lanzó una mirad abatida, al parecer oírme decir aquello había generado cierta angustia en él.
-lo sé, Alexa, lo sé, cariño- consoló -no sé qué estamos haciendo con nosotros-
-no quiero separarme de ti- confesé, levantando mi cabeza de su pecho para mirarlo. Él negó frenéticamente con su cabeza.
-tampoco yo- murmuró, como si la simple idea le asustara -no quiero estar sin ti, y tampoco quiero continuar discutiendo contigo-
-entonces dejemos de ser tan imbeciles y aprendamos a aceptar nuestras diferencias- pedí. Él asintió como si su vida dependiera de ello y luego me atrajo para besarme dulcemente.
-Lo lograremos, ya no pelearemos más- sonrió tenue al separarse del beso. Aquello me reconfortó porque él estaba demostrándome querer pelear por un nosotros -esta será nuestra última pelea-
-lo prometes?- hice un leve puchero, mientras extendía mi meñique en su dirección. Bucky observó mi dedo entre divertido y enternecida y luego lo unió con el suyo.
-lo prometo, Alexa- ambos sonreímos y nos fundimos nuevamente en un beso. Ahora la paz reinaba entre nosotros y por primera vez, después de semanas, comenzaba a ver nuevamente un futuro junto a Barnes. Y nada me puede gustar más que eso.
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Aquíestá tu pedido, corazón, espero que te haya gustado! ❤ y lamento no haber podido desarrollar bien lo de sus habilidades como hija de Wolverine, juro que en algúnpróximo os le daré a la protagonista esas habilidades en tu honor.
Diosss su carita en el gif es simplemente la cosa mas linda y tierna que haya visto 😭 lo amo.
