-¿Pablo? ¿Qué ves?
- Es él...- Señalé a la puerta.- Josué está aquí.
- ¿Qué? ¿Dónde? ¡Cuál es!.- Me levanté.
- ¡Pablo, dime cuál de todos es!
- Es el que viene hacia acá.- Viene vestido normal, como se vestía antes.
- Hola, Pablo.
- Josué... Has vuelto a clases.
- Supongo que en algún momento tenía que hacerlo.
- Así que tú eres el desaparecido.- Qué tacto tiene Lanahi.
- ¡Lanahi!
- Está bien, Pablo. Y sí, soy el desaparecido que ya apareció.
- ¿Ya sabe Orión que estás aquí?.- Preguntó Lanahi.
- Más tarde iré con él y sus padres, espero que se alegren por mi regreso.
- Te ves muy fresco, ¿no?.- Lanahi está algo a la defensiva.- ¿Dónde estabas?
- Me habían secuestrado.- Supongo que una posesión cuenta como un secuestro.
- Oh...- Ahora se le ve avergonzada.
- Nos vemos luego, tengo que ir a terminar un papeleo a la dirección.
- Mucha suerte.- Se fue.- Lanahi, creo que te pasaste.
- ¡No sabía que lo habían secuestrado!.- Me senté.- Soy una tonta.- Se le ve desanimada.
- Está bien, no es nada rencoroso.
- Aún me siento tonta.
- Que no eres tonta, mejor sigue comiendo anda.- Volteé a la mesa de enfrente, donde suele sentarse David con sus amigos.
- ¿Aún piensas en él?
- Es difícil no hacerlo.
- Ay, guapurita. Espero pronto te sientas mejor.
- Espero que si mato a Ambrosius, David quede libre.
- ¿Matar? ¡Desde cuándo piensas en cosas así!
- Es mi nuevo destino o algo así.
- Explícate.
- Se supone que debo matar a Ambrosius, el brujo, o él me matará a mí, a David, y cambiará la vida de todo el mundo.
- Guapurita, he sido de mente abierta con eso de la magia, pero esto ya es pasarse.
- ¿Crees que me divierto? No quiero ser un asesino, pero no dejaré que David siga con su mente dañada.- David se ha convertido en una persona completamente indiferente; ya no se enoja, no está feliz, no siente nada, es como si estuviese solo existiendo, sin propósito alguno.
- Sé que la nueva situación de David es complicada, pero no sé si debamos atribuirle todo a la magia. ¿No has pensado que podría estar mal de su cabeza?
- Un doctor no serviría en estos asuntos.
- Puede que sí.
- Da igual, aún no sé qué haré contra el brujo, ni cuándo será.
- ¿No crees que sería bueno que nos relajarnos un poco?
- Estoy harto del alcohol.
- No hablo de eso, podemos pasar el tiempo juntos, guapurita, en algún parque, en la piscina, o hasta en casa.
- Podríamos hacer algo en mi casa.
- ¡Perfecto!
- Podrías ayudarme a pensar qué hacer contra el brujo.- Hizo una mueca de cierto disgusto.
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Un Chico Tímido (Gay)
LosoweEsta es la vida sobre un chico algo tímido que trata de tener una vida común como la de los demás; su vida es un tanto distinta por su forma de ser y pensar, pero algo (o todo...) cambiará cuando se descubra su verdadera preferencia sexual. Con un b...