La señora Min nunca despreciaba que su hijo la fuera a visitar, pero está vez era una visita tan inesperada que realmente necesitaba comprender la razón del por qué su hijo había aparecido tan repentinamente, usualmente avisaba de su llegada, pero está vez no fue así, y ahora allí se encontraba con Yoongi sentado a su lado mientras su hijo disfrutaba de un poco de té.
Yoongi dio otro sorbo a su bebida caliente para después dejar la taza en la mesa y recargar por completo su espalda en el respaldo del sofá.
- Cariño, tienes que avisarme antes para estar más preparada -sonrió hacía su hijo-, pero no importa, es bueno tenerte por aquí.
- Solo me quedaré por algunos días, y espero no ser un estorbo.
- ¡Jamás digas eso! No eres un estorbo en está familia, mi dulce cachorro -a veces su madre podía llegar a hacer comentarios divertidos, pero ella ama mucho a su hijo, y por supuesto que no miente al decir aquello, Yoongi lo sabe, siempre le han demostrado su amor, y es fabuloso sentirse así de querido-. Me hubiera gustado ver a alguno de tus compañeros, ya no los haz traído.
La sonrisa en Yoongi desapareció solamente un poco, era cierto que había veces en que alguno de los chicos le llego a acompañar en sus vacaciones o en visitas rápidas, su madre estaba encantada de poder conocerlos, pero ahora no era como si solo pudiera arrastrar a cualquiera de ellos con él, y mucho menos ahora mismo.
La señora Min noto el cambio tan repentino en las expresiones de su hijo, hasta pensó que había dicho algo realmente malo que había causado que Yoongi se viera algo triste.
- ¿He dicho algo malo, cariño?
- No, nada es solo que... -Yoongi apretó los labios levemente-, supongo ya estás enterada de la marca -la señora Min no se vio sorprendida al respecto.
- Lo sé -soltó un suspiro-, me hubiera gustado conocer al afortunado alfa que te marco.
- Querrás decir los afortunados -ahora si la señora Min se vio sorprendida ante aquellas palabras, Yoongi no pudo evitar soltar una pequeña risa al ver el rostro de su madre.
- ¿C-cuántos te han marcado? -en verdad estaba impactada, y eso que creía que ya sabía todo acerca de lo que pasaba con su hijo mientras no se encontraba en casa.
- Mis compañeros de grupo lo hicieron -dijo en respuesta-, tranquila, yo les dí mi consentimiento y no me arrepiento de eso.
- P-pero, cariño -soltó un bufido-, realmente me sorprendiste con eso, pero ¿en verdad eso era lo que querías? Sabes muy bien que un lazo roto te puede afectar aunque haya más alfas de por medio.
- Lo sé -Yoongi dio un asentimiento.
Su madre dio un suspiro, ella sabía que algo no estaba del todo bien, lo presentía y por supuesto una madre difícil se equivoca en sus presentimientos.
- ¿Ha ocurrido algo, no es así?
Yoongi sabía que su madre trataría de indagar, después de todo es raro que llegue sin avisar a casa y que ahora prácticamente estén hablando de aquellos alfas que le habían marcado, Yoongi se preguntaba si acaso ellos estarían igual o peor, no quería que volvieran a discutir, eso era lo que menos quería, y ahora no sabía si era posible que lo estuvieran haciendo, o seguramente se estarán ignorando como han estado haciendo.
- Mamá -su madre presto atención a su hijo-, no es como si un alfa no discuta, pero ellos lo hicieron y fue demasiado, me interpuse.
- Cariño...
- Y fue peor...
Era obvio, las peleas entre los alfas eran algo que a veces no se podía evitar, y mucho menos un omega, cuando hay demasiados alfas involucrados es mejor dejarlos discutir, no importa cuanto un omega quiera interponerse, es lo mejor, inclusive para evitar salir herido en el proceso.
- ¿Te dijeron algo malo? -Yoongi miro de soslayo a su madre.
- Parece que estaban de acuerdo en que les he llevado más problemas en estos meses, quizás debí abstenerme de querer ir a esa audición como me habías dicho -su madre no comento nada, así que pudo continuar-, tal vez algo hubiera sido distinto, debí quedarme como me habías dicho, debí dejar ese absurdo sueño de querer ser algo más que un simple chico que vive en Daegu... debí permanecer aquí.
Yoongi bajo la cabeza, evitando ver a la cara a su madre, pero ciertamente la señora Min no le reprendió diciéndole que le hubiera hecho caso desde un principio, tal vez ella había pensado aquello desde antes, cuando escucho a su hijo mencionar que había sido aceptado como trainner, no mostró más que enfado al saber que le había desobedecido, cuando escucho que había sido uno de los seleccionados, se enojo de igual manera, después de todo era un grupo con más alfas, y él era solo un omega que se hacía pasar por un beta.
Pero, todos esos pensamientos habían cambiado, y más cuando había recibido boletos de parte de su hijo para que asistieran a una de sus presentaciones, al principio no había querido asistir, pero su esposo le dijo que sería bueno ver todo el esfuerzo que había logrado hacer Yoongi para estar allí, así que accedió.
No solo podía ver como su hijo junto a los demás daban un show digno de ser recordado, si no que también presenciar a cada fanático, ver como los apoyaban, escuchar los gritos, y ser parte de eso, saber que su hijo era quien también provocaba aquellas ovaciones, observar la emoción en los rostros de los demás, y mirar como su hijo derrochaba talento al igual que todos esos alfas... eso la había hecho sentir tan orgullosa.
Ella sabe que ese mundo no es fácil, sobretodo cuando se trata de un omega que es hombre, pero ahora podía ver que su hijo lo había logrado, a pesar de que no mostrará quién era en realidad, podía ver todo el esfuerzo que había rendido frutos, y estaba sumamente orgullosa de él.
- No te atrevas -Yoongi levanto poco a poco la cabeza y miro a su madre, estaba desconcertado al escuchar eso-... Min Yoongi, no te atrevas a arrepentirte de algo como eso.
- Mamá, pero tu me dijiste -su madre le interrumpió.
- Sé lo que te dije -ella sonrió tenuemente-, sé que fue injusta al no poder apoyarte, sé lo mucho que te esforzaste para estar allí con ellos, tu lugar está allá con tus alfas y... debes comprender, en un grupo al igual que en las familias, hay veces que llega el punto en que no puedes soportar ciertas cosas, y te enojas -asintió levemente-, tu padre y yo hemos peleado a veces, pero siempre hay una disculpa de por medio, ¿sabes lo que nos une más que nada?
Yoongi negó lentamente mientras la miraba.
- Amor, hijo mío -hablo su madre para después acercar su mano hacía la espalda de Yoongi y brindarle caricias-, estoy segura de que ellos no quisieron hablarte de ese modo, estaban enojados, y cuando alguien está de ese modo, no piensa con claridad, y mucho menos si son alfas.
Aquel comentario hizo que Yoongi sonriera y que su madre soltara una corta risa.
Su madre tiene razón, el estrés era mucho, conciertos por delante y próximamente un nuevo álbum, entrevistas, fansings, todo era demasiada labor, Taehyung se había molestado por el hecho de que Seokjin menciono un posible embarazo frente a los fanáticos, por supuesto que no era apropiado hablar de eso como un juego y eso fue lo que los llevo a discutir, y él se había metido en una discusión que estaba yéndose del tema principal, era obvio que iban a explotar aún más.
- ¿Amor? Amor -menciono Yoongi a lo que su madre asintió-, aún así, me gustaría quedarme un poco más aquí.
- Quédate el tiempo que consideres necesario, cariño, todo sea porque estés tranquilo y que esos tontos de tus alfas aprendan a no gritar tonterías mientras se pelean.
- Lo haré, madre, gracias.
- No hay de que, cachorro.
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Un Omega Entre Alfas
FanfictionNada iba cambiar, ¿oh sí? Yoongi ha guardado un secreto desde el debut, y lamentablemente ha sido descubierto por sus compañeros, todo por olvidar los malditos supresores. -Menciones de varios Shipps. -Yoongi Bottom. -No copias y/o adaptaciones (a m...