Dos semanas después
Apenas puse un pie fuera del avión me quedé quieta para poder estirarme haciendo que Dominik chocará conmigo
-¡Dios!- me queje- Fíjate por dónde vas
-No deberías quedarte parada en medio del caminó- bufando paso a mí lado junto con los demás estudiantes de W.S.
Después de un largo primer mes, nos dejaron viajar a nuestros reinos como es costumbre, pero a Dominik no lo enviaron a Francia sino que pasará la semana en Slinville, lo que hace unos meses me hubiese molestado pero ahora se puede decir que nos llevamos bastante bien.
Después de nuestra charla bajo el árbol nos convertimos en amigos, descubrí que debajo de toda esa arrogancia se encuentran una buena persona que se preocupa por las demás personas que no son él.
Junto a Dominik, Thomas y otros chicos nos subimos a una de las limusinas y continuamos el viaje hasta nuestro destino.
Después de horas llegamos por fin, Dominik ya no podía soportarme ni un segundo más, por lo que de inmediato subio corriendo las escaleras para ir a su habitación.
Creyendo exagerada su reacción fui a la oficina de Garfield para saludarlo. Toque la puerta dos veces y entre cuando me dio permiso
-Hola- dije entrando, allí estaba él solo, es raro ya que la mayor parte del tiempo está con Xavier
-Hola- dijo el poniéndose de pie para darme un corto abrazo, nuestra relación de hermano mejoró un poco, ahora podemos darnos abrazos sin sentir náuseas.
-¿Cómo van las cosas?- pregunté sentándome mientras él rodeaba el escritorio para sentarse frente a mí
-Hasta ahora todo marcha bien- sonrió orgulloso- No he cometido errores y creo que los ciudadanos me quieren
-Eso es increíble- sonreí- Me gustaría ser querida- reí
-Puedo ayudarte con eso- dijo y comenzó a buscar un par algo entre sus hojas- Hay un refugió para niños sin hogar que dicen que se cae a pedazos, he recibido varias cartas pidiéndo ayuda y una en especial me rompió el corazón- dijo entregándome varias cartas- Lee está- dijo golpeando un suavemente
-¿De quien es?- pregunté abriendo el sobre para sacar una hoja
-De una niña que vive en el refugió- asentí y respire hondo antes de comenzar a leer
-Rey Garfield... ¿Cómo está? Espero que bien, si me hiciera esa pregunta respondería que mal porque dónde vivo no es bonito.- mire a mí hermano dolida antes de volver a mí lectura- Se que no debería escribirle y que seguro tiene cosas más importantes de que preocuparse pero espero que pueda hacer mí hogar más feliz. Atentamente: Peggy White... PD: Si viene a vernos prometo esperarlo con lasaña- reí por lo último y volví a mirar a mí hermano- Adoro a esta niña
-Necesitan ayuda en el refugio pero yo no puedo ir, debo viajar y creo que podrías hacerte cargo de esto- entrelazo sus dedos y dejo caer las manos sobre el escritorio
-¿Que puedo hacer?
-Ve al refugio, conoce a los niños, pregúntales que le hace falta y veremos qué podremos hacer por ellos.- dijo y asentí
-Mañana mismo puedo ir si te parece bien- dije y asintió
-Lleva a Dominik contigo, está experiencia podría ayudarlo a ser un rey bondadoso algún día- sonrió y fue mí turno de asentir
-Me encargaré de hacerlo menos egocéntrico, te lo prometo- bromee haciéndolo reír- ¿Puedo preguntar a dónde irás?
-A un pequeño reino en Dinamarca- suspiró- Debo atender un asunto real
-¿Seguro que es eso?- pregunté con picardía y me miró confundido-¿No sera un nuevo amor? ¿O si?
-¿Que dices?- exclamó indignado-¿De dónde sacaste tal cosa?
-¡No te hagas Gar! ¿Crees que soy estúpida?- reí- Durante todas la vacaciones tuviste misteriosos viajes a Dinamarca y siempre vienes completamente enamorado de la princesa Íngrid- dramátice
-¿Cómo sabes de la princesa Íngrid?- pregunto molesto
-Te la pasas suspirando su nombre y escuché como le decías a Xavier que ella es muy especial- solté una carcajada mirando su cara de indignación
-¡No deberías escuchar mis conversaciones!- se quejo como un niño haciéndome reír aún más
-¿Cuando voy a conocerla?- pregunté para molestarlo aún más- ¡Por favor Gar! Quiero conocer a mí cuñada
-Ya puedes irte- dijo serio
-¡Garfield!- exclamé divertida- No podrás evitar está conversación toda la vida ¡Algún día tendrás que presentarme a tu amada!
-¡Nunca lo haré!- dijo y volví a reír a carcajadas- Ya vete Isabelle
-Como tu quieras enamorado- me puse de pie tomando todas las cartas- Me llevaré esto para leerla, te dejo así sigues pensando en tu querida Íngrid
-¡Isabelle!- exclamó y camine hasta la puerta
-¡Nos vemos después futuro esposo de Ingrid!- grite saliendo del lugar ante de que mí hermano me arrojara algo.
Camine por el castillo con las cargas en mis manos, me cruce con Kim a la cual saludé afectuosamente y después de hablar un rato le pedí que me llevará algo para comer a mí habitación para poder leer las cartas y escribir algunas soluciones posibles a sus problemas.
Al estar frente a mí puerta, la del al lado de abrió haciendo que Dominik chocará conmigo
-Lo siento- dijo y lo mire con una sonrisa
-No fue nada- dije- De hecho estaba pensando en golpear tu puerta
-¿Por qué?- pregunto confundido
-Necesito tu ayuda- respondí y sonrió
-¿En qué puedo ser útil?
-Ven- tomé su mano y juntos nos adentramos a mí habitación- Garfield me entre estas cartas y debo leerlas para poder ayudar a unos niños a ser sus vidas un poco menos tristes y vas a ayudarme con eso
-¿Cómo?- ambos nos sentamos en mí cama y dejé las cartas en medio
-Algo se te ocurrirá- suspiré- Mañana iremos a un refugió y veremos qué podemos hacer, pero por ahora tenía pensado leer todo y anotar los problemas para buscar posibles soluciones.
-Me parece bien- Dominik tomo un carta y la leyó. Debatimos en como podíamos solucionar ese problema y después de un rato logramos ponernos de acuerdo
Continuamos haciendo eso el resto de la tarde, varias veces tuvieron que venís a recargar nuestras tazas con café pero valió la pena. A la hora de la cena ya teníamos varios planes para el refugio, solo queda ir a comprobar que lo que decían las cartas era verdad.
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No Soy Como Todas Las Princesas
Roman pour AdolescentsIsabelle Jones, chica complicada que sólo quiere molestar a las personas y salir de fiesta cada día de la semana Cuando tiene que irse a Inglaterra para aprendes a ser una buena princesa, las cosas cambian La chica alegre y feliz puede llegar a ser...