No Soy Como Todas Las Princesas

Capítulo 60: Saint-Casper

Dos meses después

Bajé del avión junto con Dominik, Derían y Quentin. Al fin llegamos al reino de Dominik, después de tanto tiempo por fin estamos aquí.

Los últimos dos meses fueron movidos, Sam y Tomy han estado llamándome todos los días llorando las primeras semanas después de su rompimiento hasta que un buen día ellos decidieron hablar y arreglar sus diferencias, obviamente no volvieron pero por lo menos ahora no recibo llamadas a la madrugada de alguno de ellos.

En cuanto a mí familia, no los he visto desde que dejé el castillo en Slinville. Mantengo el contacto con Dan y con Garfield, con él solo por el refugió, los niños ya se fueron a la casa que les prestamos y ya están arreglando su nuevo hogar.

Sino fuera por esos niños ni siquiera habría hablado con Garfield, él aún está molesto por lo que dije y yo no pienso disculparme.

Pero en fin

Dominik me invitó a pasar unas semanas en su reino y después de la ayuda de mí abuela logré persuadir a Garfield para que autorizará mí vuelo.

-Bienvenida- Dijo Dominik tomando mí mano cuando salimos del aeropuerto

-Estoy emocionada- reí

-Yo igual, tengo mucho que enseñarte

-Mhh Dominik, que pervertido- dije con picardía, él me miró atónito por mis palabras y sus mejillas se volvieron rosadas

-Yo no... Yo... Este

-Solo bromeaba- reí mientras él me miraba molestó- Ya vamos pervertido, quiero conocer el lugar.- comencé a caminar pero me detuve al sentir un tiro de mí brazo, miré y Dominik se había quedado parado en su lugar observandome-¿Qué sucede?

-Es por el otro lado- sonrió y rode los ojos

-Tienes que guiarme don ego- hablé obvia y río

-Vamos- Dominik comenzó a caminar al lado contrario al que estaba por irme y nos subimos a un auto.- Primero vamos a casa así dejamos las cosas

-¿Casa?- pregunté confundida y asintió

-No vivo con mis padres, me fui apenas pude- sonrió orgulloso

-¿Y por qué no me lo habías dicho?- dije ofendida pero reí

-Nunca preguntaste- se encogió de hombros sonriendo y rode los ojos

-Pero ¿Iremos a verlos verdad?

-Por supuesto- respondió- Pero mañana, hoy quiero mostrarte el lugar.

En respuesta solo asentí, me dedique el resto del viaje a mirar por la ventana, nunca había venido a St. Casper. Con suerte había podido ir a París cuando escapé y solo recorrí muy poco porque comenzaron a buscarme y tuve que esconderme durante meses.

Poco a poco nos fuimos alejando del centro, al igual que de las casas, no se me hizo raro ya que mí abuela me contó que la mayoría de las personas de la realeza tienen casas alejadas de todos para cuando quieren estar un rato en paz, un ejemplo claro es su casa en Inglaterra y la casa donde están hospedando a los huérfanos.

-Llegamos- anuncio Dominik bajando del auto, mire la casa frente a nosotros y sonreí

-No es como lo imaginé- dije- Creí que sería mucho más lujosa que la casa de mí abuela

-Nunca me gustaron los lujos- se encogió de hombros- Si hubiese sido por mí sería aún más modesta, pero mí madre se negó a mis otras opciones así que técnicamente ella la eligió.